Cuando luo binghe regresó del reino demoníaco. Su primera parada era la cocina luego iría a ver a su shizun. Esta vez cuando llego shen qingqiu lo esperaba en la puerta. Con expresión solemne oculta tras el abanico viéndolo fijamente.
A luo binghe le parecía extraño que su shizun estuviera ahí din moverse y sin decir una palabra,así que, se acercó cauteloso. - ¿Shizun? ¿Hay algún problema? ¿Necesita algo?
Plegado su abanico. Señala con este hacia adentro - entra - dice sin cambiar su expresión y luo binghe de inmediato obedece temeroso. Intentado pensar en el error que cometió.
Después de entrar shen qingqiu cierra la puerta tras él y se enfrenta a binghe. Acercándose paso a paso mientras binghe se mantenía inerte totalmente desconcertado - ¿shizun? - antes de que pudiera terminar de decir las palabras. Shen qingqiu ya lo había besado.
Shen qingqiu estaba totalmente necesitado. Desde que empezó el embarazo luo binghe no se había dignado en tocarlo y eso lo hacía sentirse frustrado. Dándole apenas besos de vez en cuando. No sabía si era por el embarazo pero tenía una fuerte necesidad de binghe y como él no lo empezaba, entonces no le queda más que provocarlo.
Manteniendo su beso mueve sus manos desde los hombros de binghe hacia abajo deslizando lentamente sus dedos por los fuertes abdominales del discípulo. En busca del cinturón de sus prendas para luego arrebatarselas. Pero antes de lograr su objetivo sus muñecas son detenidas por un par de fuertes manos. Luo binghe separa el beso. Topando su frente a la de su shizun y con una mirada consoladora dice casi en un susurro.
-shizun, no pudo, lo siento.
Este fue un golpe bajo para shen qingqiu. Fue rechazado directamente. Había tirado su dignidad para empezar a tocar a su discípulo. Sus actos fueron casi una súplica por necesidad. Parece que sus pensamientos eran ciertos luo binghe no deseaba tocarlo. Pero jamás dejaría que se le notara en el rostro su frustración. Aclarando su garganta da un paso atrás. Cubriendo nuevamente su rostro con el abanico - Olvidalo - dicho esto y se da la vuelta dirigiéndose a la mesa con unos papeles para fingir hacer sus deberes.
Luo binghe se quedó parado en el mismo lugar observando a shen qingqiu por un rato. Preguntándose si debería dar alguna explicación. Sin embargo después de pensarlo bien decidió dirigirse a la cocina y preparar algo especial para su shizun.
Acabando con la cena luo binghe le propone a su shizun - shizun, tengo mucho trabajo en el reino demoníaco ¿que le parece si volvemos aya por un tiempo?
-como quieras
Después de todo estando aquí o allá el asunto seguiría igual. No cambiaba nada el lugar. Al siguiente día tal y como lo dijo. Se fueron al reino demoníaco y se instalaron como siempre en la casita de bambú. Antes de irse a atender sus asuntos binghe dice.
-shizun, si me necesita solo llameme, este discípulo vendrá enseguida.
Shen qingqiu pronuncia un reconocimiento para luego seguir sumergido en sus pensamientos. Sin darse cuenta ya había pasado más del medio día y su estómago empezaba a rugir. Parece que luo binghe llegó a tal extremo de olvidarse de sus alimentos. Levantándose molesto agita sus manga a su costado antes de disponerse a buscar a luo binghe.
Caminando por los pasillos desde cierta distancia se escuchan los rugidos furiosos de binghe. Era muy extraño verlo enojado de tal manera. Debe ser un asunto muy serio. Pero mientras se acerca el color de su rostro se iba escurriendo como agua al escuchar el motivo de la discusión.
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AH LUO
FanfictionLuo binghe y shen qingqiu disfrutaban de su vida juntos, pero con la alegría viene la preocupación, cuando shizun cae inconsciente varias veces binghe estuvo a punto de volverse loco. Lo que menos se imaginaban estaba pasando. Un hombre embarazado e...