Kushina y el mundo

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Desde hace miles de años el mundo se ha dividido en castas: alfa, beta y omega. 

Desde el comienzo, la parte de omegas siempre había sido constituida únicamente por mujeres, como la de alfas únicamente de hombres, sin embargo, desde hace ya varios años, se han dado casos de omegas varones así como de féminas alfas. 

Pero a la sociedad no le gusta. 

Los alfas repudian a los omegas varones por no ser fuertes y por ser igual de "inútiles" que sus homólogas féminas, de igual manera, las omegas repudian a las alfas por no ser delicadas y bellas, a su parecer. 

Pero, la realidad estaba muy lejos de ellos. 

Los líderes - alfas, por supuesto - temían que este cambio terminará con su reinado sobre las demás castas. 

Esto llevó a la creación de cientos de normas ridículas dentro de los clanes shinobi. 

Ningún omega, varón o fémina, tiene el derecho a recibir algún tipo de educación 

Ningún omega puede estar sin marcar tras cumplir los dieciséis, de romper esta regla, el omega será enviado a los nidos conjuntos, donde será obligado a tener las crías de los shinobi que así lo deseen 

No tienen el derecho a alzar la voz ante ningún superior, así como no tienen derecho a quejarse, cuestionar o desobedecer 


Hay más reglas, sin embargo, esas son de las más resaltantes. 

¿Hubo alguna para las mujeres alfa? 

Ninguna, realmente, la sociedad es un asco. 

Una vez se inició la creación de las aldeas (esto debido al tratado construido tras el matrimonio del primogénito omega del clan Senju y el primogénito alfa del clan Uchiha), la aldea, bajo el mando de Uchiha Madara, cambió ligeramente estas leyes. 

A los omegas se les permitía opinar, reclamar por algo que no les pareciese o quejarse sobre cualquier abuso sin recibir consecuencia (siempre y cuando no estuvieran marcados), podían, además, asistir a la escuela y recibir únicamente educación primaria y materias para el cuidado del hogar y de niños, además, la ley de los nido conjuntos fue totalmente erradicada. 

Aun así, Madara había crecido en un ambiente demasiado conservador, por lo que varias de estas leyes no cambiaron, por ejemplo, la prohibición de que estos trabajen o desobedezcan a sus alfas e incluso que, una vez emparejado (esta vez a más tardar los veinticinco), los alfas pueden controlar incluso como visten los omegas y cuántos hijos tendrán. 

Años más tarde, el siguiente Hokage, Izuna, el hermano menor de Madara, cambió las leyes un poco más, importandole muy poco los reclamos del Consejo civil y el Consejo Shinobi. 

Los omegas tenían permitido trabajar siempre y cuando sus alfas se los permitieran, además, podía levantarle la voz a sus alfas, claro, debía haber una razón tras esto, por ejemplo, que el alfa lo hubiera golpeado sin razón o que no estuvieran llevando suficiente dinero a casa, incluso, según el contexto, el omega podía golpear a su pareja. 

Además, permitió que cualquier omega pudiera entrar y recibir entrenamiento médico para poder apoyar ante la creciente e inminente guerra entre naciones shinobi. A los alfas se les prohibió obligar a sus parejas a vestir como ellos querían, permitiendo mayor libertad a la "casta débil". 

Y, finalmente, el último cambio antes de su muerte en guerra, abrió las puertas a que todos los omegas pudiesen recibir una educación mayor, incluyendo de algún oficio, si es que querían, por ejemplo, producción textil o ventas de productos. 

El omega de una alfaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora