17. CAPÍTULO

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Capitulo 17.

SEREN.

La luz entraba por mi ventana, eso hizo que me levantará.

-Kiera -dije dando leves golpes a la puerta de la recamara de mi hermana.

-pasa -escuche en un susurro.

-¿cómo estás? -pregunte.

Ella no contesto solo se siguió arreglando frente a su tocador.

-¿y como te sientes? -volví a interrogar acercándome a ella.

Agarre su secadora de pelo y empeze a secar su cabello.

-mal... Soy una tonta solo tenia un trabajo y lo arruine.

-no eres tonta, era tu primera vez, no tenia por que salirte bien .

-pero me lo confiaste, y lo hice mal.

-todo salió bien.

-no mientas ese negocio ya no se hizo por mi culpa, todo se perdió.

-se perdió algo insignificante -agarre ahora su cepillo de cabello -lo que importa es que estas bien y no te paso nada, eso debe de importarte.

-¿Novecientos millones es algo insignificante?

-claro que si, luego se recupera el doble o hasta el triple, tu no te preocupes por eso.

- gracias por no enojarte conmigo.

-nunca me enojaría contigo...y que te parece si vamos desayunar.

-solo si haces hot cakes -dijo apuntandome con un dedo.

-trato.

-pero ves a cambiarte todavía sigues en pijama.

Salí de su recamara y me adentre a la mía.

Me cambie, cuando escuche sonar mi teléfono.

-¿si? -dije al contestar.

-¿qué mierda paso?, novecientos millones, novecientos putos millones se perdieron.

-lo se no soy estúpida, y cuidado como me habla... Ya estoy hasta la puta madre que siempre me grite, usted no es nadie para gritarme, no es mejor que yo ni lo será, yo soy, seré y fui la mejor, entienda así que yo luego lo voy a ver para arreglar esto.

Sin más que decir le colgué y avente mi teléfono así estrellándose en la pared.

-¡¿maldita sea, quien te crees?!, ¡hijo de puta!

Respire mirándome mi reflejo en el espejo.

Baje a la cocina, y ya me estaba esperando kiera.

-ya llegue.

-ya te vi y muero de hambre.

-no seas exagerada.

-soy dramática no exagerada.

Sin decir más me hacer qué a los estantes y comense a hacer los hot cakes.

-ya no me siento muy triste por la muerte de izar, -dijo kiera en voz baja -así que hize... Una colección de ropa inspirada en él... Mira.

Deje de lado todo y me acerqué a ella, para ver los diseños, eran sumamente hermosos el contraste de colores opacos con pasteles era fantástico.

-¿y cuando sería? -dije sirviéndole sus hot cakes en un plato.

-eso lo decides tú -dijo y se metió un bocado a su boca.

-¿yo?, ¿por qué?

No termino cuando Anastacia, Roy y Nara entraron a la cocina.

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