Reencarnado como Holly Potter: El prisionero de Azkaban (3)

Capítulo 25

-LA HISTORIA ORIGINAL LA PUEDEN ENCONTRAR EN MI PERFIL.

-TODO LO QUE ESCRIBE LA AUTORA, INCLUZO LAS NOTAS DEL FINAL, NO SON MODIFICADAS, POR LO TANTO, NO ES NECESARIO TOMARSE EN SERIO O RESPONDER A LAS PREGUNTAS QUE HACE.

-EN CASO DE QUE YO HAGA UNA PREGUNTA U OPINE, OCUPARE MAYUSCULAS Y LA LETRA EN NEGRO.

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Después de que ambos inspeccionaron la casa, los llevé a caminar y les mostré cómo llegar al número 12 de Grimmauld Place.

Estarían caminando de regreso solos ya que eran literalmente 2 cuadras.

Los ingresé a ambos en las protecciones en silencio y caminé directamente hacia la casa.

Entré y les hice señas para que me siguieran.

Por suerte, la entrada ya no estaba llena de elfos domésticos muertos.

Kreacher no quería que los cuerpos fueran destruidos o enterrados, así que accedí a hacer una habitación solo para los restos del elfo doméstico.

Así tendrían un lugar de honor para descansar sin ser una pieza de diseño de la casa. Esa mierda era simplemente macabra. Me gusta mi estilo oscuro y aterrador sin cabezas reales alineadas en las paredes.

Kreacher estaba feliz y al menos no me enfrentaba a los pobres cuerpos cada vez que caminaba por el pasillo.

La familia Black en realidad hizo que los elfos pensaran que era algo que hicieron para honrarlos, pero en realidad fue una muestra grotesca de dominio y fue absolutamente repugnante.

Sirius y las hermanas Black estuvieron de acuerdo y ahora tenían su propia habitación para los pequeños duendes honrados.

Lancé múltiples hechizos para que la habitación siempre tuviera flores frescas y cada elfo tuviera una placa con su nombre grabado.

Kreacher conocía cada uno de sus nombres y estaba feliz de ayudarme a poner pequeños diseños en cada placa de lo que le gustaba a ese elfo.

Aparentemente, los elfos domésticos Black contaron historias a través de cada generación para honrar a sus antepasados.

El único que no quedó contento con el arreglo fue el retrato de Walburga Black.

Gritó al respecto durante un día antes de que yo le gritara y le dijera que se callara la boca o yo se la cerraría.

Creo que mis ojos pueden haber brillado en rojo para insinuar mi punto, pero funcionó y ella se calló al respecto. A la mujer le podría gustar un poco menos ahora, pero mi punto fue probado...

Ahora Grimmauld Place estaba pintado en colores naturales y aireados que lo hacían mucho más atractivo.

Llevo a Petunia ya Dudley a la sala de estar.

Una vez que nos sentamos, Kreacher apareció en la habitación haciendo que Petunia dejara escapar un pequeño grito y Dudley mirara a Kreacher con los ojos muy abiertos.

Kreacher los ignoró por completo, sabía que no me agradaría que hablaran mal de mis invitados y le había dicho que nunca me enfadaría con él simplemente ignorando a alguien mientras no les faltara el respeto.

"¿Qué puede conseguir Kreacher para la señorita Holly?" preguntó en su tono grave.

Sonreí amablemente "hola Kreacher, ¿podrías traernos un poco de té para mí y mi familia?" dije dejando en claro quiénes eran estas personas y que necesitaban ser respetadas.

Kreacher asintió antes de desaparecer.

"¿Qué fue eso?" preguntó Dudley con los ojos muy abiertos y fascinados. Maldita sea, volver a ser un niño... oh, espera...

Negué con la cabeza con cariño. "Ese era uno de mis elfos domésticos, sirven como una especie de sirviente para las familias de magos. Tomo a cualquiera que haya sido expulsado o maltratado", expliqué simplemente.

Después de un momento, una bandeja de té apareció en la mesa de café frente a nosotros y sin perder el ritmo me serví una taza.

Cuando puse el azúcar y la crema, miré hacia arriba para ver parpadear a Petunia haciéndome sonreír levemente.

Me senté en el sofá poniéndome cómoda. "Contraté un tutor para ti, Dudley, se reunirán contigo todos los días durante la semana y te enseñarán todo lo que aprenderás en Hogwarts. Tienes un año para ponerte al día pero no te preocupes, si no llegas a tercer año siempre puedes hacer otro año de tutoría. La mayoría de los chicos tienen tres años para aprender lo que tú harás en uno" expliqué con calma.

Una mirada de determinación creció en el rostro de Dudley. "Puedo hacerlo. Solo tengo que trabajar más duro. ¡Además, esto es mucho mejor que las aburridas Matemáticas!" dijo emocionado.

Me reí entre dientes mientras Petunia le enviaba una sonrisa afectuosa pero podía ver la preocupación en sus ojos.

Asentí con la cabeza "sí, la magia es mucho más interesante, pero debes tener cuidado, solo practica tu magia en el ático, la he protegido de los muggles y tiene hechizos de seguridad en toda la habitación. Le suministré todo lo que necesitarás para hacer pociones o aprender cualquier tipo de hechizos que necesites. Ya están todos los libros de primer año allí y una vez que los termines, fácilmente te puedo dar el próximo año" expliqué.

Asintió con entusiasmo antes de beber su té y comer algunas de las galletas que Kreacher puso con el té.

Después de unos minutos, Sirius entró caminando a la habitación oliendo "¡Olí galletas!" dijo alegremente mientras se dirigía directamente a la bandeja de té sin siquiera darse cuenta de que había alguien aquí. Demonios Canuto, qué manera de tener una mente única. Pero con esa nariz de perro, ¿quién podría culparlo?

"Muy elegante de tu parte Canuto, muy elegante" dije sarcásticamente desde donde estaba sentado.

Se volvió hacia mí con dos galletas metidas en la boca y una tercera en camino.

Sus ojos se abrieron como platos antes de volverse hacia Petunia y Dudley y comenzó a farfullar haciendo que las migas volaran por todas partes.

Dudley se rió, pero me di cuenta de que Petunia quería hundirse en el sofá y desaparecer.

Sirius inmediatamente se enderezó y tragó la comida en su boca mientras desaparecía el desastre.

Le sonrió amablemente a Dudley "tú debes ser Dudley, ¡Holly me ha hablado tanto de ti!" dijo con un tono amistoso.

Pude verlo mirar a Petunia con una ligera mirada cuando Dudley no estaba mirando, pero por lo demás, todo salió bien.

Dudley comenzó a hablar con Sirius sobre todas las cosas que había visto mientras Petunia intentaba desaparecer.

"Sirius, ¿por qué no le muestras a Dudley algunas de tus bromas o tal vez cómo montar una escoba?", dije sugestivamente.

Los ojos de Sirius se abrieron con horror antes de volverse hacia Dudley "¡¿No sabes montar una escoba?!" preguntó con la boca abierta. Bueno, eso funcionó...

Dudley negó con la cabeza con una mirada confundida en su rostro que hizo que Sirius se levantara de su asiento.

"Bueno, vamos muchacho, te mostraré todo lo que necesitas saber" dijo Sirius emocionado mientras sacaba a Dudley de la habitación.

Una vez que estuvieron fuera del alcance del oído me giré hacia Petunia con una mirada seria en mi rostro "tenemos que hablar de Peter" dije sin lugar a discusión.

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feliz lectura

Descargo de responsabilidad: No poseo nada más que mi propio estatuto y trama originales.