31/1/22.
Había una vez un vampiro en la ciudad... un "vampiro" solitario, que vagaba más como un fantasma que como un "vampiro". Pasaba entre los mortales sin que ellos notaran su presencia en sus vidas agitadas de mierda, mientras él paseaba sin rumbo y con "tranquilidad", ya que era un ser "inmortal"... Y cuando escribo "tranquilidad", es porque estos seres no saben el significado de tranquilidad, no saben lo que es estar tranquilo, porque ellos no tienen sensaciones o emociones, porque no los necesitan para "sobrevivir"... Los "vampiros" como él no se queman con la luz del sol, o les es imposible estar cerca del ajo; tampoco es de los que necesitan beber sangre para saciar su hambre voraz o pueden ser destruidos por una estaca de madera o alejados por una cruz o con agua bendita. Él es de esos "vampiros" que son "infinitos", porque su forma de conseguir energía para "sobrevivir" es, simplemente, coexistir con otras formas de vida... Y cuando escribo "inmortal" y "sobrevivir", es porque los seres como él ya no tienen sentido del tiempo o de la realidad; lo único que saben hacer es estar "ahí"... y "caminar". "Caminan" y "caminan" hasta que, después de miles de millones de años, sus "pies" se van desgastando a tal punto que dejan de tenerlos y entonces siguen "caminando" con el resto del "cuerpo". Terminan arrastrándose por su espacio con sus "brazos" y al final solo su "cabeza" sigue rodando y siendo empujada por ligeras corrientes de aire hasta que terminan por ser borrados de su espacio... Y cuando escribo "caminan", "cuerpo", "pies", "brazos" y "cabeza" es porque estoy intentando plasmar a estos "vampiros" de una manera en que puedan imaginárselos, porque estos "vampiros" no tienen apariencia humana, tienen tanto una forma como una corporeidad totalmente diferentes a las de los humanos. Ellos pueden ser tan inmensos como un país o tan diminutos como un átomo; pueden ser de colores tan sólidos como el verde, el morado o el azul, pueden tener matices como lo son los grises, pueden ser de todos los colores existentes y ninguno al mismo tiempo; incluso pueden ser de colores que ningún humano puede ver... Y escribo "vampiros" porque esa es la palabra más simple que podría describir a estas criaturas que "viven" entre nosotros sin que nadie tenga conocimiento de ellos... Estos "vampiros" son algo que no podremos entender con nuestra simple mente humana, así que solo nos quedaría "temerles o adorarles", es por eso que ningún ser humano debería saber de ellos... Y escribo "temerles o adorarles"... Y escribo "temerles o adorarles", porque esas serían las dos opciones que la pequeña e insignificante mente humana puede pensar de algo que no conoce, tiene miedo o fascinación; sin embargo, no deberíamos temerles, porque ellos no son "malos" o "buenos", simplemente están "ahí"... Y cuando escribo "malos" o "buenos", es porque en realidad esas palabras son un concepto humano demasiado moldeable, que depende de cada quien y de muchos otros factores además de la moralidad y la ética que tiene cada uno de nosotros; pero ellos no saben lo que es ese concepto tan moldeable, porque no lo necesitan como nosotros para construir una sociedad armoniosa y en orden, ya que simplemente, están "ahí", en el espacio... Y escribo "ahí" porque, en realidad no sabemos si están en este plano, o sí hay un plano en el que estos seres convivan entre ellos, y sin embargo, de algún modo puedo asegurarles que...
Había una vez un "vampiro" en una ciudad...
M. Chamay bat
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Relatos escritos con una taza de café y un poco de música.
RandomRelatos ligeros que varían entre temas que pueden ayudarte a salir un momento de la realidad, pero que no siempre se alejan de ella. Todo lo que tienes que hacer es relajarte, con una buena bebida y quizás un poco de música tranquila. Disfruta tener...