Historias de media noche - JohnDo

III

Viernes por la mañana Doyoung se levanto más temprano, incluso más de lo normal, preparo el desayuno para ambos e incluso se tomó la molestía de llevárselo a su compañero a la cama y de paso con una confianza que no sabía de dónde sacó; desayunar a su lado.

Johnny aún se encontraba un poco fatigado, el dolor en la espalda todavía estaba presente así que seguía sin pararse.

El menor todavía preocupado por la salud de él, volvió a sugerir que llamarán a un médico por el dolor que persistía en su espalda pero Johnny lo volvió a calmar diciéndole que no era necesario y que si para mañana no mejoraba con los analgésicos entonces si llamarían a uno. Doyoung asintió aunque no tan convencido.

Antes de irse a la universidad, ayudo a Johnny a pararse con cuidado, necesitaba estirar un poco sus piernas y de paso ir al sanitario, después se quedó solo y para matar el tiempo en lo que regresaba Doyoung decidió ver una serie o película en su laptop, al poco tiempo se aburrió y decidió revisar sus redes en su teléfono, aunque por el mismo aburrimiento y cansancio se quedó dormido.

•

Doyoung había terminado su última clase, usualmente se quedaba más tiempo en la escuela a adelantar tareas o estudiar un poco en la biblioteca con su amigo Jungwoo. Esta vez sería la excepción, le había prometido a Johnny que traería de comer algo para ambos, así que no cocinaría pues según el era viernes y los viernes no eran de cocina. Obviamente traería algo lo más sano posible, no quería que el castaño volviera a la comida chatarra, al menos no por un tiempo. Rápidamente recogió sus cosas.

—¡Hey, Doyoung! —la voz de su amigo Jungwoo le paró antes de salir del salón. —¿A dónde vas? No habrás olvidado que hoy es viernes de karaoke, ¿verdad?

Cierto. Se recriminó mentalmente. Generalmente los viernes, el junto con Jungwoo, Lucas, Mark y Kun se juntaban para ir al karaoke cerca de la universidad. Habían adoptado esa tradición desde finales de su penúltimo año de la carrera con la finalidad de distraerse y desestrezarse de todas las labores de la semana cantando a todo pulmón cualquier canción que se les atravesará. Cabe destacar que ese plan de todos los viernes no se había visto interrumpido ni una sola vez, era ya un ritual entre los cinco amigos.

Doyoung tuvo que cancelar sus planes de volver temprano a casa, no tenía ganas de dar una excusa a Jungwoo y a sus demás amigos por llegar a faltar a su actividad predilecta de los viernes.

A parte si les revelará la verdadera razón, que no era algo realmente grave o malo, pero conocía a sus amigos y sabía que estos se encargarían de molestarlo por el resto de la carrera.

Desde que Jungwoo lo acompañó a ver el departamento por primera vez (solo para asegurarse de que no viviría con un loco o algo por el estilo), quedó fascinado cuando conoció a Johnny, tanto que lo empezó a molestar con que le consiguiera el número de su roomie o encontrar la excusa para acompañarlo a casa nadamás para toparse con el alto, al final dejo de insistir cuando el apuesto Jung Jaehyun se le cruzó en el camino.

Aún asi las molestias no terminaron pues un día Jungwoo empezó a decir de que el haría bonita pareja con Johnny, y le sugirió que lo invitará a salir, no bastando con eso, sus demás amigos a pesar de no conocer al escritor empezaron a seguirle el juego a su amigo. Claro, Doyoung prefería no hacerles caso y negar cualquier tipo de sentimiento diciendo que solo eran simples conocidos.

Volteó a ver a Jungwoo —: N-No, para nada, solo estoy recogiendo mis cosas rápido porque necesito pasar al sanitario antes de que nos vayamos. —se excusó.

Jungwoo levanto una ceja dudoso. Pero lo dejo pasar.

—Esta bien, te veo a la salida junto con los demás.