Melody

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ALEJANDRA

New York era increíble, las vistas son asombrosas, en cuanto llegamos un señor llamado Thomas nos llevó con los padres de Marco, Marco es un buen hombre, se ve que ama a Maya y viceversa.

¿En qué piensas?- me pregunto David abrazándome por la espalda y dándome un beso en la mejilla, mi cuerpo se tenso pero lo trate de disimular- en todo y en nada, que es increíble que estemos en New York, que hayamos encontrado a Maya y que vayamos a asistir a su boda- dije y me di la vuelta para quedar frente a frente.

En eso tienes toda la razón, es increíble lo que ah pasado en menos de una semana, siento que está vez todo saldrá perfecto para todos- dijo y solo pude asentir, había algo en el últimamente que no encajaba.

Cariño, yo siempre tengo razón y creo lo mismo que tú, ahora vayamos a almorzar que los padres de Marco nos estarán esperando.

Al salir vimos que el almuerzo sería al aire libre, nada mejor que un respiro de aire fresco, a mitad del almuerzo vimos que llegaron Maya y Marco, se veían como la pareja perfecta, ambos cómo modelos dignos de una portada de revista, detrás de ellos venían los padres de Maya que nos saludaron apenas nos vieron, habremos perdido el contacto con Maya pero jamás con sus padres.

Después de las presentaciones, Maya ofreció un tour por la cuidad a lo que no nos pudimos negar, era más tiempo con ella, recuperar el tiempo no se podra pero si aprovechar cada que tenga oportunidad para pasarla con ella, recordar como era todo antes.

A medio paseo ví el amor que se tiene la pareja, si ya creía que estaban enamorados ahora lo confirmo, ella se ve tan feliz, tan alegre, su aura no desprende más que felicidad pura, me quedé observando con curiosidad, ¿Cuál sería su historia? ¿Quién vio a quién? ¿Fue amor a primera vista?

Me da miedo preguntarle a Maya, a lo que vi ella me olvidó por completo, ella siguió con su vida y nos dejo en el pasado.

Al llegar a su casa informaron que tendrían casa llena, la tal Melody vendría junto con un Stefanio, no es por ser celosa ni nada, se que no tengo el derecho de siquiera reclamar un puesto que ya no es mío no por decisión mía si no por decisión de ella.

Se ve que te ama mucho- David hablo de inmediato y sus miradas conectaron- tanto cómo yo lo amo a el, nos conocimos desde que llegué aquí entonces ah sido un gran apoyo para mí desde entonces- respondió sencillamente y David asintió con una mueca, está inconforme con esa respuesta lo conozco- ¿Por qué te fuiste sin siquiera decirnos algo?- hable yo está vez- sinceramente no creo que sea el momento ni el día para hablar- su cuerpo se puso rígido y el mío también- lo sé pero creo que merecemos una respuesta del por qué, por qué nuestra mejor amiga se fue de la nada- dijo David enojado, yo también lo estoy, merecemos una explicación por lo menos, iba a hablar cuando dos pequeños brazos abrazaron a Maya por detrás, ¿Sería Melody?, yo también quisiera abrazar a Maya así, más que amiga era mi hermana.

Hola guapa- su voz maldita sea, tan aniñada y chillona- Hola pequeña, ¿Cómo estás?- hablo Maya con una sonrisa gigante en su rostro- muy bien ahora que te veo y como está mi sobrino, espero lo hayas alimentado muy bien en mi ausencia- pero que rayos dices, si tú solo me das dulces y todo lo que se me antoje, a este paso terminare como un globo gigante.

¿Sobrino? ¿De qué sobrino habla? ¿Maya está embarazada?

¿Tienes un hijo?- pregunto David por los dos y lo agradezco, no puedo articular tan siquiera algo coherente- ¿Cómo?- pregunto ella entre asustada y confundida, sigue siendo la misma chica que su rostro habla por si mismo- lo que escuchaste, que si tienes un hijo- repitió David enojado.

No creo que sea de incumbencia saberlo o no, pero viendo que en algún momento lo sabrán o lo verán- contesto y se quedó callado, la tal Melody se puso a un lado de ella y por fin la pude ver, era pequeña, con un cuerpo voluminoso, un par de ojos tan verdes como el bosque pero con una pizca de azul, eran hermosos, su nariz tan bien perfilada y nada que decir de su rostro, parecía modelo, su cabello se veía tan liso, cortado por debajo de los hombros, su color era hermoso, un rubio pero sin dejar de ser castaño, era simplemente hermosa.

Tengo seis semanas de embarazo- terminó diciendo y mi boca se abrió ligeramente- ¿Seis semanas de embarazo?, exactamente, ¿Cuánto es eso?- pregunto David y no pude evitar darle un golpe en la nuca- serás estúpido, tiene mes y medio- conteste yo y escuche la risa de Maya y otra risa desconocida, la tal Melody aún estaba aquí- así es, se que debo pasar de los tres meses para pasar el peligro de un aborto espontáneo o algo por el estilo, pero se que va a ser el bebé más querido por los Johnson y los Velázquez- lo dijo con una gran sonrisa en su rostro y su mano automáticamente se posó sobre su abdomen.

Y por nosotros también- dije sin pensar y su mirada rápidamente me observo con detenimiento- claro solo si nos dejas- me apresuré a terminar mi propuesta, su boca hizo una linea y sus cejas se alzaron y antes de que pudiera decir algo, otra voz hablo.

Hola, soy Melody, la mejor amiga de esta guapa- su voz Dios no la soporto, se que ella no tiene la culpa de nada pero no la soporto- Hola, yo soy Alejandra y el David- hablé lo más amable que pude pero el tono me delató, sus ojos se abrieron y volteo a ver a Maya incrédula- ¿Alejandra y David? ¿Esos Alejandra y David?- está vez se dirigió a Maya, ella le había contado de nosotros, ojalá cosas buenas, se que no fui la mejor amiga pero eran más las cosas buenas que malas- si, ellos asistirán a la boda, ¿Dónde está Stefano y Marco?- trato de cambiar el tema, la tal Melody trato de protestar pero dos presencias masculinas interrumpieron el momento.

Aquí estamos amor, Stefano se quedó charlando con Thomas, ya sabes cómo son- entro diciendo Marco con una sonrisa en el rostro- Hola mi bella dama, ¿Cómo has estado con eso de las nauseas y los mareos?- dijo una voz entre masculina y suave, voltee a verlo y esque no puede ser posible, todos aquí son los mismos Dioses de Grecia o que, el era un hombre demasiado atractivo, llamaba la atención con su altura que debería ser entre 1.80 y 1.90, su mandíbula estaba marcada, su cabello negro como la noche al igual que sus cejas muy bien pronunciadas, sus ojos cafe claro y sus pestañas tan largas y bromosas, su cuerpo se veía muy bien trabajado.

Lo llevo bien, son pocos las náuseas pero ni te digo los mareos, son horribles te lo juro- le contesto Maya y seguido lo fue a abrazar- oh cariño, sabes que es normal,  nada que una buena dona de chocolate no te ayude- dicho eso saco una caja detrás de el, ¿Esa caja ya la traía?

Ustedes me dejarán como pelota como sigan así pero las acepto- tan pronto como terminó de hablar comenzó a comer una dona, se veían muy buenas y ella parecía disfrutarlas, tuve que hacer un sonido raro con mi garganta para que notarán que aún seguíamos aquí.

Lo siento, Stefano, ellos son Alejandra y David- dijo solamente y nosotros alzamos la palma de nuestra mano y la sacudimos- un placer chicos, desearía poder quedarme a platicar pero tenemos demasiado trabajo pendiente que hacer, así que si nos disculpan- ni siquiera dejo que contestaramos y salio de la habitacion tan pronto como entro.

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⏰ Última actualización: Jun 28 ⏰

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