TERROR || Roronoa Zoro

Capítulo 4.

Narrador omnisciente.

Todos se apresuraron y corrieron hasta la cocina del barco, que era donde se encontraban los 3 chicos inconscientes. Todos veían extrañados la escena y Umiko, siendo la última en entrar, estalló en risas hasta casi llorar.

"Ah, perdón. Mal momento para disfrutar la escena." dijo la chica al parar de reír.

Mientras que el resto discutía formas de despertarlos, la pelirroja tomó un den den mushi de uno de sus bolsillos y tomó una fotografía de los tres, lo guardó disimuladamente y fue con ellos a discutir el como hacer que volvieran en si mismos. Usopp se acercó teniendo una idea y habló. "¿Es esa una hermosa espadachina comiendo carne?"

Tras escuchar las palabras que quería escuchar cada uno, se levantaron y la pelirroja volvió a estallar en risas, disculpándose nuevamente al terminar. La tripulación salió de la habitación y comenzaron a explicar la situación, desde la razón del comportamiento de Brook y su promesa con Laboon, hasta el secuetro de Nami y las sombras.

"¡¿Laboon?! ¡¿El esqueleto conoce a Laboon?!" gritó sorprendida Umiko. "No, esperen, ¿él es parte de su tripulación?"

La chica cruzó sus piernas y se sentó con los brazos cruzados para procesar la información. Mientras ella digería lo hablado, el resto siguió hablando y los primeros mugiwara contaron sobre su encuentro con aquella ballena en la Reverse Mountain. "¿Todos tienen el plan? ¿Umiko?"

Kokai, quien no había escuchado nada, volteó a verlos y asintió sin dudarlo.

"¡Claro, lo tengo! ¡Salvar a todos y no estropearlo!"

Ellos la miraron incrédulos, pero decidieron dejarlo pasar por falta de tiempo. Sin nada más que discutir, se adentraron nuevamente en la isla barco. Sin embargo, evidentemente no incluido en su plan, el puente por el que cruzaban fue destruido cuando Oars cayó del cielo mientras luchaban contra los zombies, lo que provocó que se separaran.

El primer grupo, conformado por Luffy, Robin y Chopper, siguió su camino hacía Moria, mientras el resto iba a ayudar a Brook y Nami.

"Oigan, hay unos fantasmas extraños ahí." avisó Kokai, a lo que los chicos se pusieron alerta. Sorprendiendo a la chica que iba con ellos, todos comenzaron a deprimirse y tener una actitud negativa, posteriormente ella también fue atrapada en ello. "Lamento ser así, ni siquiera sirvo para dar miedo." espetó ella al borde de las lágrimas.

Tras todos caer, Usopp se levantó de nuevo y, al darse cuenta de que él no era afectado por el hecho de ser extremadamente negativo, el resto lo dejó a cargo de Perona y se fueron en un acuerdo silencioso de no mencionar ese momento nunca. Luego de un rato Sanji también se separó para ir en busca de Nami, así que los demás siguieron en busca de Brook.

"Hey." llamó Zoro a la chica. "¿Qué se supone que haces?"

"¿'Qué hago'? ¿Te refieres a cómo peleo?" cuestionó confundida por su pregunta y recibió un asentimiento de cabeza como respuesta. "Oh, doy miedo."

"¿Qué?"

"También uso una espada doble, pero usualmente no la empleo, solo doy miedo. Oh, ahora que lo pienso nunca les expliqué como funcionaba mi fruta del diablo. Básicamente la Fear Fear no mi me permite infringir miedo en quien sea que esté cerca mío, puedo decidir la cantidad de miedo que doy, pero no la persona, lo cual complica la situación si mis aliados están cerca mío."

"En water 7, ¿eso fue lo que hiciste?" preguntó el peliverde.

"¿Lo recuerdas? Sí, fue eso."

"Va a ser un problema si no puedo pelear porque estás cerca usando esa cosa."

"Oh."

"¿Qué?" cuestionó Zoro de nuevo.

"Lo sé, tienes razón. Seré un problema si también les infrinjo miedo a ustedes." dijo deteniendose, a lo que ellos también se detuvieron. "Me quedaré acá deteniendo a los zombies, ustedes vayan a buscar a Brook."

Franky la miró dudoso y asintió, ambos chicos siguieron su camino y ella se quedó viéndolos en silencio hasta que desaparecieron de su campo de visión. Continuó corriendo en otra dirección y pronto se encontró con muertos vivientes que iban tras ellos.

Umiko se sentía extremadamente inútil, pues mientras los otros se encontraban en batallas importantes, ella peleaba contra míseros zombies pues no podía evitar inmovilizar a sus aliados. "¡Agh!" gritó molesta al terminar con el último zombie y se movía a la siguiente locación.

Luego de lo que pareció un interminable tiempo para Kokai, terminó con todo zombie a la vista y terminó en un lugar alejado de la mansión. Mientras rondaba por el bosque escuchó un gran gruñido a sus espaldas, sabiendo que aquel ruido solo podía provenir de algún lugar, corrió hacía allá esperando llegar primero para poder ayudar sin dañar a nadie inocente.

Para su mala suerte la mayoría se encontraba ahí, faltando solo unos cuantos. Se acercó y llamó la atención de quienes estaban consientes. Comenzó a analizar la situación e identificó el lugar donde se encontraban inconscientes el resto.

Cuando Moria se creía victorioso, Usopp lanzó una gran bolsa de sal a la boca de Oars, sin embargo, la sombra del shichibukai salió de ahí con la bolsa en mano y la lanzó devuelta, evitando que la sombra de Luffy escapara de aquel cuerpo muerto.

Al ver que el gigante estaba por aplastar a Nami y Usopp, la pelirroja usó todo su poder y esfuerzo en tratar de enfocar su miedo en Moria y el gigante, sin embargo solo logró parar el golpe por un momento durante el pequeño shock de la gran ola de terror que infringió y Oars continuó con su ataque.

Para suerte de quienes serían aplastados, aquel pequeño retraso en el golpe le permitió a Luffy, o a una extraña versión de él, salvarlos.

Luffy lanzó un gran golpe al abdomen del gigante, noqueando al shichibukai por un momento y haciendo que Oars cayera, así mismo, una gran cantidad de sombras salieron del cuerpo de Luffy, volviendo éste a su estado normal.

Ahora consientes, todos pensaron que ese era el final, al menos hasta que Chopper habló y explicó que, siendo un zombie, el gigante no siente dolor alguno. Este se levantó y dejó a todos en estado de incredulidad, aquellos que no peleaban considerando que tal vez no serían capaces de vencerlo.

Umiko, cansada y adolorida por aquel ataque que se le dificultaba controlar, se agachó y limpió la sangre que salía de su nariz. Se quedó un momento analizando el plan que tenían los mugiwara y se levantó decidida.

Sabiendo lo que tenía que hacer, Kokai se preparó mentalmente y en el momento que Oars estuvo apunto de liberarse, empleó su poder aún más concentrado y poderoso, deteniendo al gigante por unos segundos que le permitieron a Luffy acabar con él de un golpe, rompiedo su columna y dejándolo inmóvil.

Desafortunadamente, eso no estaba cerca de ser el final. Moria, en un intento desesperado de ganar, recolectó las 900 sombras que había dispersas por la isla y las absorbió dentro de él, volviéndose gigante.

El capitán de los mugiwara se recuperó rápidamente de su forma pequeña y activó nuevamente su Gear Second, que le permitió esquivar los ataques del shichibukai y lo logró golpear unas cuantas veces, haciendo que el mayor vomitara algunas sombras fuera de su boca.

Aún sin ser suficiente, Luffy no tuvo más opción más que activar el Gear Third mientras el segundo estaba activo. Éste se infló y tomó gran impulso para golpearlo una última vez. Moria, quien tapaba su boca evitando que las sombras salieran, fue lanzado contra el gran mástil, el cual se rompió en dos y cayó sobre su estómago, liberando todo.

Todos los mugiwara, incluyendo a aquellos sin sombra, se mantenían de pie ante el amanecer mientras miraban a su capitán vencer. Sus sombras volvieron y sonrieron victoriosos.

Rompiendo aquella asombrosa escena, Umiko se inclinó mientras colocaba una mano en su adolorido pecho y comenzaba a toser sangre.

"Mierda." espetó ella antes de caer a los escombros.