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amor

Daniel había vuelto a tener a Johnny en sus brazos, era un sueño estar luego de veinte años separados junto a él. Ambos se fundieron en la intensidad de sus besos y caricias. El moreno le soltaba algunos "Te amo" al rubio mientras este le mordía el cuello dejando algunos moretones, Daniel quería quedarse así toda su vida, besando al rubio, mordiéndole el cuello, incrustando sus uñas en la espalda trabajada de Lawrence y gimiéndole su nombre en el oído. Y Johnny tampoco quería que terminara, también había deseado por años que esta fusión entre sus cuerpos se volvería a dar.

Ambos terminaron exhaustos, envueltos en los cuerpos sudados y con sonrisas de placer. Johnny no había sido salvaje, ni duro, había sido lo más dulce del mundo, por que quería que todo tuviera un valor más importante que el sexo y que eso mismo sintiera Daniel, que sintiera que realmente lo seguía amando.

Luego Johnny y Daniel comieron juntos tomados de las manos, mientras tomaban decisiones sobre el futuro dojo que el rubio abriría.

- Entonces, Colmillo de Águila Karate, uniformes rojos, tú serás mi co-sensei y, ¿que falta?, ah, si, publicidad.

- De eso me encargo yo, John- Daniel besó a Johnny tiernamente. -No se como pagarte todo lo que has echo por mi Daniel, le volviste a dar un sentido a mi vida.- Daniel volvió a besarlo. -Ya me pagaste.- Johnny rió bajito.

Luego de que ambos ya se hubiesen encargado de las decisiones sobre el dojo, Johnny invito a Daniel a dar una vuelta en su auto.

A la mañana siguiente ninguno de los dos podría olvidarse de todas las cosas que habían echo la noche anterior, desde la buena música que inundaba las paredes del automóvil hasta los apasionados besos que ambos se daban, recordando esa primera vez junto al mismo mirador en la que Daniel fue completamente de Johnny, y Johnny completamente de Daniel.

Johnny miraba a su esposa con muchos sentimientos encontrados, amaba lo que sentía con Daniel, pero a la vez, amaba lo que había construido con Shannon, desde su hogar hasta su hijito, quien dormía en la habitación disfrutando de estar con sus dos padres los fines de semana.

- ¿Te veras con Daniel hoy?.- Johnny salió de sus pensamientos alterado por la pregunta de su esposa.

-¡¿Qué?, no, ¿por qué?!.- Shannon lo miró a los ojos con sorpresa. -Ey, calma, solo preguntaba, quizás tenías que terminar algunas cosas del dojo. ¿Iras a casa de mi mamá hoy? Se que no te gusta ir, pero con Robby iremos por todo el fin de semana largo, te lo había dicho ayer pero no estabas muy atento.- Johnny ya más aliviado asiente con la cabeza para luego moverla negativamente. -Ahora que me acuerdo, me faltan estudiantes para el dojo, quizás este fin de semana vaya a buscarlos.- Shannon sonrió levemente y se levantó con Robby.

Johnny no iría en busca de estudiantes pero si de otra noche llena de amor y lujuria con LaRusso.

El teléfono de Johnny sonó, era Daniel.

Daniel LaRusso (activo ahora) 🟢

Hola cariño, ¿cómo despertaste?, yo todavía acordándome de todo lo que hicimos ayer :3

Desperté muy bien, y yo tampoco puedo olvidarlo, me haces tan feliz <3

Hablé con Shannon ira con Robby a casa de su mamá, nunca voy donde esa vieja arpia, pero si podemos hacer algo tú y yo este fin de semana largo :)

Siii!, sabes que no tengo nada que hacer más que trabajar!, ¿te quedas en mi casa y desarreglamos el dojo 7w7?

Estaba pensando en ir a acampar, tú y yo en la montaña, ¿no te gusta?

¿Me estás jodiendo?, John, sabes que eso me encanta!, hace años que no voy a acampar.

Entonces es un hecho, hoy en la tarde nos vamos :)

Me haces tan feliz amor <3

Tú me haces feliz cariño <3.✔️✔️

Johnny le dijo a Shannon que iría en busca de estudiantes y acamparía con Daniel y otros amigos al otro día. Su esposa estaba feliz, hace años no veía a Johnny salir con amigos, Daniel le había vuelto el alma al cuerpo a su marido y ella no sabía cómo poder pagárselo.

Shannon salió con Robby mientras Johnny empacaba sus cosas para salir con Daniel. La puerta sonó, Daniel ya había llegado. Lawrence lo invito a pasar para que lo ayudase a llevar la comida, el bolso y la carpa que llevarían al auto del moreno.

Ya con todo listo el rubio cerró ventanas y puertas para poder irse tranquilo, mientras Daniel veía algunas fotos de Johnny, Shannon y Robby. Anhelaba la vida que llevaba la morena, casada con el amor de su vida, con el hijo que Daniel nunca podría haberle dado al rubio, en el hogar más familiar y cálido que había conocido. Tenía envidia, claro que si, era algo indiscutible, algunas veces pensaba en cómo pudo haberle cambiado la vida quedándose en Los Ángeles.

Quizás seguiría con Johnny, casados y con unos pequeños. Solo podía pensarlo, por que eso nunca podría ocurrir.

Johnny y Daniel subieron al auto mientras sonaban algunos clásicos ochenteros en la radio.

- Tuvimos la mejor música, ¿cierto cariño?.- Daniel seguía absorto en los sentimientos que le habían causado ver esa fotografía, sentía que le estaba cagando una vez más la vida a su amor y eso no se lo perdonaría.

- Johnny, no quiero ir.- Lawrence paró el auto y se volvió a Daniel, a quien le caían algunas lagrimas por las mejillas.

- Amor, ¿que pasó?.- Johnny seco las lagrimas de su acompañante. -¿Qué, que me pasó?, Johnny no debemos estar juntos, yo no te merezco, yo, no quiero volver tu vida miserable de nuevo, yo solo quiero que tú seas feliz.- Johnny esta vez rió bajito y se volvió al rostro rosado de Daniel a causa de sus lágrimas. -Amor, mi vida era miserable antes de que llegarás, tú le volviste a dar luz a mi vida cariño, y si te vas una vez más moriré.- Daniel miro los brillantes ojos azules que lo miraban, sintió el amor que Johnny decía que sentía y la veracidad de sus dichos. Dejó sus pensamientos apartados y besó tiernamente al rubio. Quizás no podría darle la mejor vida a Lawrence pero si podía darle todo el amor que durante veinte años estuvo aguardando para Johnny, su Johnny Lawrence.