RAMÉ

16 "LA ADVERTENCIA"

PV LANDO:

Amor, el amor para mi era solo una simple palabra antes de cumplir los 20 años, el amor lo conocí cuando tenia 22, conocí a la mujer que creí que era la correcta para toda mi vida, la que seria madre de mis hijos y la que estaría a mi lado hasta que muriera.

Algunas veces el ser humano comete errores al creer en personas que jamás te otorgaran lo que tú das, yo di tanto de mi que me daba miedo volver hacerlo y era lo que pasaba con Aileen, mi pequeña niña de ojos brillosos y sonrisa tierna, tenia miedo de entregarme por completo a ella, pero a la vez me aterraba el no hacerlo.

- Estas bien – pregunta Hans entrando a mi oficina haciendo que deje unos papeles en el escritorio para mirarlo

- Quien te dejo entrar – digo serio soltando un gruñido

- Tú secretaria, soy tú hermano idiota – dice sentándose frente a mi

- Que quieres tengo trabajo que hacer – digo levantándome para servirme un trago

- Que pasa – dice serio

- No pasa nada – digo sin mirarlo

- Es por Aileen no es así – dice

- Siempre la tengo en la mente Hans al igual que ustedes – digo restándole importancia

- No hermano la piensas mas por lo que sucedió y aunque ella te perdono o más bien nos perdonó, sé que aún hay algo mas que no has dicho – dice

- Le dije que la amaba Hans – digo soltándolo

- Todos lo escuchamos hermano, eras el único que no se lo había dicho – dice

- Si lo sé, pero eso me aterra – digo sincero haciendo que el asienta comprendiendo

- Se que te aterra amarla y darle todo lo que decidiste ocultar en su momento Lando pero ella no es Barbara, ella no se parece en nada a esa mujer y te lo ha demostrado como a nosotros, ella no seria capaz de dañarnos – dice

- Lo sé, pero tengo miedo de entregarme en bandeja de plata ante ella, es joven Hans es una niña, no sabemos que pueda pasar dentro de unos años – digo

- A que te refieres Lando – dice serio Hans mientras se pone de pie para caminar hacia el ventanal

- A que no sabemos si en realidad ella esta dispuesta y quiere una vida llena de hijos y en una casa preparando la comida y cuidando niños – digo

- Tú crees que solo para eso la queremos hermano, yo la quiero para amarla, para tener días buenos y malos a su lado, quiero que termine su carrera y si ella quiere ejercerla la dejare, no la tendré encerrada en una casa, ella es una mujer libre Lando, una que logra lo que quiere y que lucha cada día, yo quiero hijos cuando ella este lista y si es su decisión quedarse en casa la apoyare, de esto se trata hermano de apoyarnos y amarnos, comprendernos en todo – dice mirándome – Pero al parecer tú no lo quieres, así que pieza bien hermano si en realidad la quieres en tú vida y si no es así me dolerá el que te alejes – dice haciéndome sentir el corazón estrujado

- Que quieres decir Hans – digo

- A que si no estas dispuesto a luchar por ella como nosotros tomes tú camino y la dejes en paz, si eso sucede pasaras a ser su cuñado y nada más, porque si lo haces Lando te juro que no dejare que te le acerques de otra forma – dice dejando el vaso en el escritorio y sale rápidamente de la oficina dejandome dolido y confundido