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Al día siguiente, Nayeon no ocultaba la ansiedad que sentía por ver de nuevo a Mina, fue ella de primeras en llegar al salón y ahora se encontraba sentada apretando la caja de Pockys en su mano.
Estaba decidida a pedírselo a Mina, quería confesarle tantas cosas pero primero tenía que pedirle ser su pareja de juego.
Espero impaciente a verla entrar pero luego recordó que Mina solía llegar siempre tarde, recostó su rostro en sus brazos y observó como de a poco empezaban a llegar los alumnos.
Luego de varios minutos el salón empezaba a llenarse, en un momento llegó Jihyo quien se encontraba platicando entretenidamente con su novio, sus ojos se encontraron con Nayeon un momento para después desviarlos incómoda y caminar hasta su lugar.
Nayeon ni siquiera se inmutó, la observó pasar a su lado unos momentos hasta que la voz del profesor llegó a sus oídos.
—Muy bien clase todos sentados ya. —dijo serio mientras dejaba sus cosas en el escritorio.—Me alegra que están empezando a ser más puntuales, eso les ayudará en un futuro a ser mejores profesionales y...
El profesor detuvo su charla cuando vio como la puerta era abierta, Nayeon sintió su corazón latir con fuerza al instante mientras veía a Mina entrar al salón con su chaqueta de cuero negra.
Nayeon pudo empezar a babear y suspirar en ese preciso momento sino fuera por el repentino enojo que la invadió al ver a nadie más que Tzuyu prensada de su brazo izquierdo.
El profesor bufó cansado.
—Vaya horas de llegar Myoui. —le dice serio, Mina lo miro confundida mientas miraba el reloj en su muñeca verificando que había llegado justo a tiempo. —Si yo digo que viene tarde es por que es así ¿De acuerdo?
Mina rodó los ojos asintiendo y llevó sus ojos a la chica de tinte rojo que al instante le regresó la mirada con risueño.
Nayeon espero el guiño de todos los días pero se sintió triste cuando Mina simplemente regresó su mirada al profesor Siwon.
—De acuerdo, profesor. —dijo cansada e hizo una reverencia, sus manos que estaban dentro de las bolsas de su chaqueta salieron y fue cuando se dio cuenta que Tzuyu apretaba uno de sus brazos.
La vio con una ceja alzada ganándose de parte de ella un sonrojo y que se aproximara más.
Murmullos divertidos se escucharon en el salón por tal escena y Nayeon no pudo más que apretar los labios furiosa.
—Espero que no sea lo que yo creo el porqué de la llegada tarde.—dijo el profesor Siwon atando cabos incorrectos.—Se sientan juntas ¿No? Pues ya no, clase tomen sus cosas y levántense vamos a cambiar de pupitres.
Por supuesto se escucharon quejas en todo el salón pero de igual forma empezaron a levantarse para ir frente al pizarrón, el profesor Siwon ignoró las quejas y empezó a hacer papelitos con números para todo el salón.
