PV AILEEN:
Los meses pasaron y cada día era peor que el anterior, parecía que comenzaba a vivir un maldito infierno, un maldito infierno del cual no sabia como salir sin ser cobarde.
- Amor – dice papá entrando a mi oficina
- Que paso – digo con temor
- Tenemos las de ganar – dice haciendo que por primera vez en semanas gritara de felicidad y me tirara a sus brazos
- No sabes lo feliz que me pone eso – digo separándome de el para mirarlo
- Así es como me gustaría verte amor, feliz – dice dándome un beso en mi frente
- Veras que muy pronto lo seré – digo sonriéndole, haciendo que me mire confuso
- A que te refieres – dice confundido
- Señor Clarke será abuelo dentro de siete meses – digo con emoción
- No – dice sin creerlo y cuando reacciona me abraza mientras grita como loco haciéndome reír a todo pulmón
- Ellos lo saben – pregunta cuando me suelta mientras limpia las lagrimas de felicidad que salen de sus ojos
- Aun no, pero esta vez no cometeré el error de esconderlo papá, ellos tienen derecho a saberlo y así será y si no lo aceptan pues no me derrumbare por ello, el tendrá una madre que lo ame por el triple de ellos y una madre que le entregara el mundo entero si es necesario para ser feliz y el mejor – digo segura
- No sabes lo orgulloso que estoy de que te hayas convertido en la gran mujer que eres ahora amor – dice abrazándome
El día paso tranquilamente en el trabajo, después de salir me dirigí hacia el departamento de Adrik donde sabía que encontraría a todos.
- Una vez mas estamos en la misma situación amor, la unica diferencia es que antes era tú hermanito y de que tenía miedo, tanto miedo, pero ahora no, esta vez no seré una cobarde y si la respuesta es negativa no te preocupes mi vida que mamá estará aquí por lo que te reste de vida para hacerte feliz – digo acariciando mi vientre con emoción mientras veo el lujoso edificio frente a mi
PV ADRIK:
Nos encontrábamos en la sala revisando papeles del trabajo sin siquiera mirarnos o hablarnos, nuestra relación de hermanos iba peor cada día, había diferencias y enojos por cosas tan insignificantes que comenzaba a hacerme a la idea de que muy pronto volveríamos a alejarnos tomando caminos distintos pero esta vez para siempre.
- Puerta – dice Hans sin levantar la mirada cuando el timbre suena
Al ver que nadie se levanta lo hago yo, pero vaya mi sorpresa al ver quien estaba detrás de ella.
- Aileen – digo con confusión y emoción al verla verme con una gran sonrisa y las mejillas rojas haciendo que me confundiera si eran por el frio o por vergüenza
- Hola, podemos hablar – dice bajamente mirándome, haciendo que mi corazón se alborote
- Claro – digo dejándola pasar
Ella entra dejando su aroma en el aire cuando pasa a mi lado y entonces los recuerdos de la última noche que estuvimos juntos llegan a mi haciéndome sonreír inconscientemente.
- Que haces aquí – la voz de Dillion hace que reaccione y me acerque a ellos que la miran a la defensiva
- Yo quería hablar con ustedes – dice ella seriamente y muy segura de ella dejandome sorprendido de la madurez que ha tomado estos años
- Que sea rápido estamos ocupados – dice Hans con indiferencia
- Aileen – digo con lentitud haciendo que me mire y entonces por un segundo regrese a esos tiempos en los que con solo mirarla ella tomaba seguridad
- Estoy embarazada – suelta haciendo que todos nos quedemos estáticos – Tengo un mes y medio casi dos
- Y quienes son los padres – dice Lando haciendo que ella sonría burlonamente
- No lo sé dímelo tú – dice ella mirándolo
- Quien nos asegura que es nuestro – dice Cassius mirándola y por un segundo veo tristeza en sus preciosos ojos
- Solo viene a decírselos y si creen que no es suyo no tengo problema con ello, cumplí con decírselos y me conformo con ello, así que me retiro y que tengan una linda noche – dice ella tomando su bolso del sillón tras ella y camina hacia la salida
Entonces lo comprendí, culpábamos a ella de todo, de nuestra infelicidad y problema de hermanos cuando en realidad los únicos culpables éramos nosotros, desde el comienzo jamás dimos todo de nosotros, lo único que dimos fueron órdenes y la manejamos a nuestro antojo, cuando ella se fue y regreso con alguien más la culpamos de no perdonarnos, pero ¿Cuándo nosotros pedimos perdón por nuestros errores? ¿Cuándo comprendimos que ella lo hizo porque se sentía sola e insegura sola? ¿Cómo fue que no me di cuenta de que ella solo buscaba amor y seguridad? Aquella que nosotros pudimos darle, pero decidimos no hacerlo, desde el comienzo la habíamos dejado sola y eso no lo había visto hasta hoy. Creía que no tendría oportunidad de estar con ella una vez más con ella, pero ahora lo veo razonablemente, ella siempre dejo la puerta abierta y estaba cansada de ello que no sudaba que muy pronto la cerrara para ser feliz con mi hijo y nunca más abrirla. Así que no lo haría, no la dejaría de nuevo, no una vez más.
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RAMÉ
RomanceSolo vasto una mirada para caer ante ellos. Una mujer dulce, amable, inocente y tierna fue dejada sin rumbo. Y a pesar de ello ¿Quién es capaz de resistir el pecado más placentero que se puede llegar a experimentar? Se decía que todo aquello que...