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¿Qué tan cruel hay que ser, para poder ser capaz de matar a una minoría para mantener a salvo a una mayoría?

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¿Qué tan cruel hay que ser, para poder ser capaz de matar a una minoría para mantener a salvo a una mayoría?

En lo profundo del bosque Yongmasan, lejos de las cabañas y lejos de Gwanjin-gu, oculto entre los arboles, cerca de las montañas donde yacía un hermoso río del que caía una pequeña cascada de algunos metros de altura, tan hermoso y limpio, tan bien cuidado por quienes habitaban en el lugar.

Había armado un pequeño pueblo, cabañas pequeñas, donde pequeñas familias vivían allí, felices y tranquilos, los diferenciaba de los que vivían en Gwanjin-gu o en el pueblo humano de Yongmasan, es que estos eran híbridos, la mayoría sobrevivientes a la masacre cometida años atrás, en especial a quien habían proclamado como su guardián, quien protegía el pueblo oculto de Yongmasan, uno de los sobrevivientes de la masacre, quien se quedó en el peligro del lugar por un tiempo hasta que sus heridas sanaron.

Lo apodaban SaenGi, una abreviación de la palabra en hangul Saengjonja que significa "Sobreviviente". Era un hibrido de gato; en su cara resaltaba una enorme cicatriz en su ojo izquierdo, sus ojos eran de un color medio verdoso, bien claros y bonitos, pero a causa de una infección en su herida, una catarata cegaba aquel ojo herido.

Tras ser ayudado, curado y liberado por un joven humano, llegó más allá del bosque, donde encontró a los híbridos sobrevivientes y a quienes no estaban enterados de lo sucedido, entre el dolor, la confusión y el resentimiento, SaenGi decidió que debían unirse y actuar.

Comenzó reformando a los mas fuertes y hábiles, reforzando sus instintos para proteger a los demás, protegiendo a cada uno que viviera en esta parte del bosque, recibiendo con los brazos abiertos a cualquier hibrido que llegara, brindándole ayuda y un hogar.

Cuando un humano aparecía, todos se ocultaban; ya sea en los arboles, tras las cataratas, cuevas o madrigueras, siempre como animales. SaenGi se encargaba de que todos estuvieran a salvo, y si era necesario, peleaba y arriesgaba su propia vida para que los demás pudieran buscar un refugio.

SaenGi también era quien recorría como un gato el distrito Gwanjin-gu. Lo que les facilitaba información sobre lo que pasaba en el mundo que estaba fuera de su alcance, pronto formó un grupo, para que pudiesen ir con él a Seúl y de paso rescatar a algunos híbridos.

Nadie debería quedar atrás, nadie merece ser esclavizado ni torturado, nadie merece que lo asesinen por el simple hecho de ser diferente.

Todos merecen un mundo en el cual vivir.

Así que.... ¿Qué tan cruel se puede llegar a ser para mantener a salvo a los que juraste proteger?

Área prohibida de humanos.


- Era de esperarse que algún día esos hijos de puta se rebelaran contra el mundo ..... - Murmuró un hombre en su celda - No les bastaba con que promulgaran leyes que los protejan.... - Rió de forma irónica - Les dije que teníamos que exterminar a todos esos monstruos.

¡Hey, You! Lemon EyesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora