La rosa del Sultán.

6.Guardia.

1538.

Mehmed.

La noche anterior.

Convencer a su padre había sido fácil, sólo le había "confesado" su deseo de pasar un tiempo a solas, le había pedido solo una semana, pero milagrosamente le había concedido un mes entero (mas el tiempo de viaje) para que pudiese disfrutar.

Su madre fue el problema, Hürrem era sobreprotectora, talvez demasiado, se había molestado y le suplico a Mihrimah que le convenciera de llevarla con él al viaje.

Al final, todo terminó en una pelea entre Mihrimah y el.

Típico.

Pero eso no arruinaría sus planes.

Por fin volviera a ver a su rosa de primavera.

Después de 4 años sin verle.

Le iba a costar caro, si, un chantaje por aquí, un chantaje por allá, uno que otro soborno y la ayuda de uno que otro sirviente.

En especial la ayuda de Osman, el se haría pasar por el en Edirne, su más fiel amigo y confidente, Osman.

A Osman le conoció un día en el mercado, iba a ser vendido al palacio para ser Eunuco, recuerda verlo en el suelo suplicando, ese día había decidido dar un paseo de incógnito y sin saberlo ese día ganaría un gran amigo.

De eso ya pasaron 2 años.

- Llegamos - anunció el jefe de guardias, logrando que todos frenará sus caballos frente al palacio de lágrimas.

Donde vivía su rosa.

- Es hora - ordenó el jefe - Omer, Yuveiz iran a buscar al jefe de Eunucos.

Los susodicho se retiraron - y los demás, menos Orhan - ordenó el guardia principal - se trasladarán a las puertas del palacio inmediatamente.

Los 7 guardias restantes se retiraron a cumplir de inmediato la orden dada.

- Orhan - le murmuró - Perdone,Príncipe.

- No me digas así Kemal.

- Pero usted es el príncipe.

- Si - murmuró viendo ansiosamente hacia los lados - pero aquí nadie puede saberlo.

Kemal suspiro y le tomó el hombro al contrario.

-No se como puedo ayudarte con esta locura...

- Sabes porque lo haces - murmuró divertido - por Halime.

Kemal le miró apenado - no puedo contradecirlo.

- No te preocupes mi querido amigo - sonrió Mehmed - solo recuerda, que mientras tu guardes mis secretos yo cumpliré con lo que te prometí, tendrás una vida con Halime.

- No le fallare Príncipe - se callo al ver la mirada molesta del otro.

- Recuerda el nombre que utilizaré estando aquí.

- Orhan.

- Exactamente, y ahora mi amigo, iré por mi camino y si te preguntan quién soy o quien me envió, ya sabes que responder.

- Eres Orhan - repitió lo ya estableció desde hace meses - hijo de un Bey, convertido en guardia y fuiste enviado por la sultana madre para proteger a la madre de él difunto príncipe Mustafa.

- Correcto - murmuró dirigiéndose al palacio - ahora vete, que yo empezaré la búsqueda de mi tesoro.

Kemal solo asintió en silencio y se dirigió con los demás guardias que cumplían sus órdenes.