"No, pero quiero hacerlo". Esas palabras rondaban por mi cabeza, fueron hermosas.
-De verdad que no es necesario, yo puedo pagarlo - Pero él hizo caso omiso
- ¿Qué es lo que ibas a compar? - Me miró
- Nada... yo... de verdad no debes comprar nada
- Bien -por un momento creí que me haria caso, pero no fue así. Cuando Rose, una compañera del lugar, pidio la orden, Justin me sonrió y habló.
- Hola, am, yo queria saber si tú sabias, que es lo que ella toma
- ¡Claro!, ella todo el tiempo pide un capuccino con canela - contestó Rose con una sonrisa falsa y un botón menos en su camisa. Zorra
- Bueno quiero un de esos, por favor
- Claro
Despues de dos minutos, Rose le entregó el capuccino
- Gracias, ¿Cuánto te debo? - Dijo mientras sacaba su billetera
- Nada guapo, la casa invita - y le guiño el ojo
- Gracias, pero no puedo hacer eso - dijo mientras dejaba un billete de 20 doláres sobre el mostrador. Tomó el vaso y mi mano, para despues salir de la cafetería.