Ojo por ojo dijo alguna vez algún viejo

464 30 3
                                    

Ésta historia comienza en día cualquiera saliendo del entrenamiento dónde, como no, nuestros protagonistas ya estaban discutiendo.

- Como te va a gustar la leche sola Kageyama?? Estas demente.

- Tu ahora con que sales? Me gusta y ya.

- Que borde eres, parece que se te ha cortado la leche esa en el estomago.

Entre eso kageyama escucho el tipico comentario irritante de Tsukishima y el cartón q tenía en la mano lo estaba apretando y... bueno

Sucedió. Hinata ahora tiene la cara mas blanca  que los mocos de maradona.

- KAGEYAMAAA!!!!!!!!!

- eeeeh, lo siento? Pero no es mi culpa, es culpa de Tsukishima, me dijo que tenia el pelo como abono y claro.. pero bueno, ya casi llegas a tu casa. Kageyama ciertamente se sentía mal, pero no puede parecer débil delante de su rematador, pierde autoridad, según él.

Hinata pensó seriamente si lo que dijo Tsukishima tenía sentido pero poco le importó cuando Kageyama dijo lo de que quedaba poco para su casa, vivia en una colina altisima, estaba por llover y la pobre bici se le había pinchado una rueda, también por culpa de Kageyama. 

-COMO QUE QUEDA POCO A MI CASA?  TU CASA ESTA AL DAR LA VUELTA PERO MIS CASA ESTÁ  MAS DE 25 MINUTOS, NO TIENES LA BICI PINCHADA Y TU QUERIDA MADRE TE HA PUESTO UN PARAGUAS EN LA MOCHILA ÉSTA MAÑANA.

- Oye no me culpes a mí, fue culpa de Tshukishima, además, no fue adrede entonces me lo puedes perdonar.

- ¿Y eso a mí que? Ahora cogeré un resfriado por tu culpa y no podré ir mañana a clase, ni a la práctica, ni podré estar cerca Natsu, ni podré ir a pasear a mi pato. No tengo pato pero da igual, no podre ir a la practicaaaa.

Kageyama sin Hinata en el entrenamiento matutino, se lo imaginó tranquilo, hasta q pensó en su mítica carrera para saber le ganador supremo de la cuesta al instituto y las conversaciones incomdas que puede evitar si está Hinata y se le reinició el cerebro en ese momento e hice el único acto de bondad que le quedaba para toda su vida.

-Bueno, te daría mi paraguas pero no quiero que lo mojes tu, si quieres ven a mi casa, te secas y te vas rápido, PERO RÁPIDO.

-ME VAS A DEJAR ENTRAR A LA SAGRADA CASA DE LOS KAGEYAMA?!?!?  Muchas gracias Kageyama, a veces consigues ser buena persona, te cuesta, pero bueno confío en tu progreso, podrás serlo, porque no eres malo realmente, pero eres muy frío y te cuesta bastante socia...

Hinata siguió hablando y Kageyama siguió ignorandolo, porque el solo podía pensar en cómo iba a hacer para que su madre y hermana no obligaran a Hinata a quedarse a cenar y después engatusarlo para quedarse a dormir. Era por que se preocupaban de la vida social de su amado Tobio pero es que él no quería estar con la gente, cosa q les costaba entender a aquellas damiselas.

Llegaron ya a la casa, modesta y cómoda pensó Hinata, aunque ya la había visto por fuera, nunca le dejó entrar el zopenco habitante de ella.

-Entras, te secas rápido y te vas, que no te vea nadie.

-Uy kageyama, parezco tu novia secreta jijiji. 

Evidentemente se llevó un capón pero hizo exactamente lo que le dijo, aunque claro, no le dijo dónde estaban las toallas y cúando fué a preguntar se encontró a un Tobio asustado.

Kageyama fue a buscar a Shoyo para ayudarle pero antes de que pudiera hacer nada ya estaban tras el las mujeres de la casa y Hinata estaba hablando entusiasmado con ellas sobre el retoño, ya que hizo el amago de no culparlo de su torpeza.

-jaja, si Hinata como siempre un descuidado, si, bueno creo que ya se iba, no Hinata?

-Como q te vas? Como te vas a ir? Has visto el tiempo? Que va, que va, quedate a cenar, que acabo de comprar un poco de carne y he comprado mucha.

-Bueeno, por mi no hay problema solo tendría q avisar a mi madre

-Claro hijo, sin problema, a q si Kageyama?

-...

-A Q SI KAGEYAMA?

-...Si mamá.

Cenaron, todo impecable, Hinata no parecía el mismo aunque ya era hora de que se fuera, o quizás no.

-Bueno, muchisimas gracias, estaba todo delicioso cocina super bien señora Kageyama pero creo que ya me tengo que ir ya, no quiero ser una molestia.

-Pero cariño no te puedes ir, la lluvia no cesa y no te puedo llevar en coche, da la casualidad que ayer lo llevé al mecánico, porque no te quedas a dormir?

Su madre no era tonta, y sabía lo que le costaba querer a alguien más en su vida después de su abuelo y viendo como se comportaban, quiso ayudar un poco a hijo que tanto quería que fuera de nuevo feliz. 

-Pero no se puede quedar, donde duerme? además no tiene ropa para mañana ni los libros, ni una bici arreglada, ni un abrigo, mañana han dicho q aumentará la temperatura un montón

-Duerme en tu cama y por los libros, mañana cuando su madre vaya al trabajo se los trae al igual que un abrigo, por la bici no te preocupes Hinata, el vecino es mecánico y podrá arreglarlo facilmente por la mañana.

-...Tampoco quiero cargarla tanto señora Kageyama

- Hijo mío no me cargas en nada, está todo solucionado acabo de hablar con tu madre mientras tomabais el postre.

- Vale, bueno, muchas gracias, le agradezco todos sus cuidados.

Hinata se inclinó frente a la mujer que se sintió un poco mal por el chico, por lo que le dijo al oido antes de que se fueran a dormir.

-Espero que hagas a mi hijo un poco más feliz, se le vé mejor desde que empezó el curso, e intuyo que es gracias a ti.

Hinata  no dijo nada de la impresión ante sus palabras y subió cabizbajo hasta la habitación pensativo sobre como hacer feliz a kageyama coscientemente, ya que el lo quiere con su mejor rendimiento en la pista, o a lo mejor tambíen lo quiere ver feliz desde el fondo de su corazoncito...

-Bueno tu quedas por ahí y ya vete a dormir deja de fisgonearlo todo.

-Vale, vale, señor sargento, pero se supone que dormiré en el suelo con una fina sabana de algodón con el frío que hace?

-...Si, no?

-Pues no, hazme sitio atontao.

Hinata haciendose hueco ya predispuesto a subirse que no era muy bien recibido en la cama de la bestia, pero la bestia ese día estaba más tranquila y no hubo nadie mal herido, aunque nunca de manera pacifíca

- HECHATE PA YA, desde aquí es mi sitio lo demás es tuyo.

Hinata al ver que el sitio que le dejó era el de un perro, utilizó el mejor ataque de distracción, hacer la pelota.

-Oye Kags que buenos brazos tienes no? 

Con esa clara distracción Tobio se sonrojó y entre el forcejeo y lo aturdido por el comentario Hinata consiguió abalanzarse sobre Kageyama y encima de el le dió la vuelta para poder quedarse en una esquina estrategica en la que dificil será que alguien pueda moverlo de ahí. 

-Agh... Bueno, te dejo, PERO POR QUE TENGO SUEÑO, no vengas mucho para mi lado, que luego me da calor.

Al final depués de unas cuantas peleas por quien tiene más sabana y tonterias varias pudieron dormir apasionadamente, no por nada en especial, es que hacia tanto frío que tuvieron q dormir abrazaditos uno enfrente de otro como dos ardillitas.

Look me over closely       kagehina/hinakageDonde viven las historias. Descúbrelo ahora