¤ ▪︎ Capítulo 1 ~°•☆

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Estaba asustado y aterrado al mismo tiempo. No sabía porque todo estaba saliendo mal últimamente. Primero, su casero estaba por echarlo de su casa sino pagaba la cuota atrasada de hace tres meses; segundo, su madre le estaba obligando a casarse con alguien a quien no conocía y tal vez no era de su agrado, y ahora, después de tantas horas de ensayo y dedicación en aquella pista de patinaje del coliseo, Yang Zi decide abandonarlo a su suerte.

-Vamos Zhan, estoy seguro que debe tratarse de una broma de mal gusto. No creo que Zi Zi te deje a última hora para irse con la competencia. -habló Cheng mientras comía unas papitas-.

-No estoy bromeando Cheng, Yang Zi se largo con el estúpido de Xu Kai y ahora todo lo que practicamos se fue a la misma mierda. -agarrándose de los pelos-. No entiendo porque todo me sale mal.

-¿Por qué lo dices?. -preguntó Li Qin-.

-Porque ellos estuvieron practicando todo este jodido tiempo. Prácticamente yo les hice la coreografía y todo ¡Me utilizaron vilmente!

-Eso es una traición con letras mayúsculas. -dijo Reba mientras se limpiaba las manos con gel desinfectante-. ¿Cómo diablos no te diste cuenta que todo era una jodida trampa?

-Ya no le digas nada. No le coloques más sal a la herida. -dijo Li Qin con cierta pena por su amigo-. Es una lastima que ninguno de nosotros sepa manejar unos patines para poder ayudarte.

-No me lo recuerdes. -mordiendo la paleta de su helado-.

-Hombre tranquilo. Debe haber una forma para ayudarte. -pensando-. ¿Y si le dices a Ziyi que te ayude? Si le digo puede ayudarte. Dudo mucho que no quiera ayudar a su hermano favorito.

-No, ella no puede. -respondió Reba-. Ella está de viaje por Tailandia Cheng ¿Acaso lo olvidaste?

-Estas jodido Zhan. No sé me ocurren más ideas. -mirando con cierto desconcierto a su amigo, preguntó-. ¿A dónde vas?

-No pienso quedarme aquí lamentándo mi horrible existencia. -tomando sus llaves-. Iré a pensar. Nos vemos después.

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Era cuestión de una semana que tenía para encontrar a la persona adecuada que lo ayudara con el baile para la competencia nacional de patinaje artístico. Pero era casi imposible encontrar a una persona tan buena en tan poco tiempo

Quería llorar y de paso matarse para no pasar una vergüenza pública, ya que estaba seguro que el rumor de que Zi Zi lo había abandonado a tan sólo días del campeonato, era noticia y tendencia en el chat grupal.

Aquello lo hubiera corroborado si tan solo no le hubieran robado el móvil cuando salió furioso de la cafetería, en donde encontró a ese par de traidores con sus sonrisas tan cínicas y desvergonzadas que tenían.

¿Cómo pudo creer en sus palabras dulces y tiernas? ¿Cómo fue que cayó en sus mentiras tan fácilmente? ¿Cómo fue que nunca intentó una relación con Li Qin antes que Yang Zi?

Tantas preguntas y ninguna respuesta llegaba a su cabeza, aunque si era realmente consciente; creyó en todo lo que decía la pelinegra porque se aprovechó de lo mucho que le gustaba. Aquello debía agradecerle al estúpido de Liu por andar de lengua floja, pero ya sabía como cobrarse eso. Iría a llorar donde Lulú y ella gustosa lo castigará como niño pequeño.

Sonaba un poco infantil, pero por lo menos le daba un poco de satisfacción el saber que alguien más sufre y no solo él. Era obvio que no diría a nadie lo que estaba planeado, ya que se ganaría un jalón de orejas de Reba y un zape por parte de Cheng.

La segunda pregunta, era más obvia que la primera, Yang Zi era actriz e interpretaría un papel con su gran trayectoria fácilmente. Era lógico que fuera super sencillo fingir amor sin levantar sospechas. Siete años en la industria dieron sus frutos necesarios y si alguien le preguntaba, diría que merecía el premio por ser tan buena actriz.

Suavemente... bésameDonde viven las historias. Descúbrelo ahora