R e s i l i e n c i a.

Pequeña dulce niña.

Capítulo 1

Mientras llovía conversaban dos enfermeras a lo largo del pasillo lo siguiente:

-¿Qué cosa interesante podría ocurrir al nacer?

-¿Llorar?

A lo lejos alguien se reía, es difícil buscar un sinónimo de todo lo que transmitía, era llena de paz, no daba miedo, más sin embargo, inculcaba dolor, desesperación, tristeza y cada vez se escuchaba más cerca.
Las enfermeras se acercaban llenas de curiosidad y temor a la puerta con un gran encabezado, el cual era: M o r t u o r i o.

Se encontraron con un señor a lado de uno de los cadáveres, alto, barba abundante y tez oscura con rasgos de la persona más dominante que podrías imaginar, cuando estas quisieron emprender la huida, ya era tarde...
El les dijo:

Lo más interesante es vivir, porque desde que naces, la muerte espera con ansias.

No queda mucho que decir, al escuchar estas palabras, ambas se quedaban desesperadamente sin aire, tratando de pronunciar alguna palabra, lo que sea, mientras escuchaban el sonido de un bebé al nacer.

Que irónico a de ser, estar muriendo mientras escuchas la vida.

Ni siquiera podría describir lo que sentían, talvez era el mismo sentimiento que tenemos al tener una pesadilla de la cual no podemos escapar por mas intentos, estos siempre fallan, pero esto?
No era una pesadilla, no despertarán mañana, solo eran dos mortales con mala noche pasando el turno, hasta la fecha no se sabe quien era aquél hombre, pero estoy segura que no era un simple ser humano.

Esto paso hace 18 años, no se sabe mucho de lo ocurrido, seguro los medios de aquel entonces no permitían indagar mucho sobre lo espiritual o emociones.

"Es más fácil soportar la muerte sin pensar en ella, que soportar el pensamiento de la muerte".
Blaise Pascal.