Alma perdida (Jujutsu Kaisen)

Alma perdida

— No es posible.

— Pero tú mismo la viste.

— . . . ¿Por qué?

En uno de los estacionamientos subterráneos de la ciudad, dos jóvenes descansaban en plena noche.

Una fogata improvisada era su acompañante. Si una maldición pasaba cerca, la podrían visualizar.

Megumi y Yuuji miraban a cualquier lado. A veces al techo destruido del lugar; otras veces al ir y venir de las llamas. Buscaban distraerse por lo hablado recientemente.

El tema del que conversaban no era tan agradable precisamente. Hace poco, uno de ellos había tenido un reencuentro algo... Impactante.

— Ella... Pero tú me diste a entender que-

— Su cuerpo estaba en la escuela Jujutsu. Desde que la señorita Shouko dejó el lugar, no sabemos nada de lo que ocurre ahí dentro.

— . . . No era ella.

— Viste su nombre cuando apareció en la lista del juego de Kenjaku. Incluso la viste de frente. ¿Aún lo dudas?

— No me refiero a eso...

Itadori recordaba el momento en que se  vieron cara a cara. Pese al tiempo transcurrido, verla hizo que cierto sentimiento ardiera dentro de él.

En su mente solo había una imagen clara; cómo Mahito usaba su técnica para acabar con su vida. Pese a la pequeña esperanza que dio cierto hechizero, no fue lo suficientemente acertada.

O tal vez lo fue, solo que el resultado no fue el esperado. Y la palabra "culpa" se manifestaba como un cartel de neón dentro de su cabeza.

— Ella me reconoció, pero pude notarlo en su mirada... No era la Kugisaki que conocimos.

— Puede haber una explicación.

El pelinegro decidió acercarse al fuego que había en el centro del lugar. Las marcas en su rostro, ocasionadas por enfrentamientos anteriores, se dejaban ver.

— Cuando Mahito la-

Vio cómo la mirada del pelirrosa se apagaba. Él tuvo que ver de cerca cómo su compañera sufría el ataque de la maldición, sin poder evitarlo o hacer algo para revertirlo.

— Bueno, tú sabes. — prefirió no mencionar directamente lo ocurrido — La hirió en su cabeza. Es probable que ella haya perdido su memoria.

— ¿Qué? En ese caso, ¿Por qué me estaría bus-?

En un momento de lucidez, al de cabello rosa se le ocurrió una razón. La escuela Jujutsu buscaba matar a Sukuna.

Sin tener recuerdos sobre él y lo que pasaron juntos, solo tendrían que engañarla para que lo vean como el enemigo.

Aún así, toda la idea en sí sonaba muy... Fantasiosa.

— Sea cual sea la razón por la que Nobara esté viva, ahora ella está apoyándolos. Te buscan, posiblemente para que el Sukuna sea ejecutado.

— Tch. Podrían esperar a que consiga los 5 dedos que me faltan antes de hacerlo. Claro, si es que no los asesino al intentarlo. — la maldición dentro de Yuuji se hacía presente.

— Cállate. No te dejaré salir, ¿Entendiste?

— Sí, sí; lo que tú digas.

Los dos jóvenes presentes se miraron luego de la conversación con el Sukuna.

— No creo que se hayan olvidado de ese detalle. O están encontrando los dedos faltantes, o esperan que tú los encuentres y te tienen vigilado para cuando eso suceda.