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Tristán estaba en la habitación, acostado en la cama, su semblante no era bueno, se veía un poco pálido, parecía enfermo

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Tristán estaba en la habitación, acostado en la cama, su semblante no era bueno, se veía un poco pálido, parecía enfermo. Mis ojos estaban sobre él y sabía gracias a Fabian que Tristán había escuchado parte de la conversación, solo esperaba que no tuviera la idea equivocada.

Camino con calma y me siento a su lado, quito mis botas, y él me mira atento.

- Antes que digas algo, aún iré al campamento de Tiara, apesar de que Alexis haya usurpado uno de los campamentos abandonados de Undra, ahora respecto a lo que paso esta tarde, te debo una disculpa, fui grosera contigo, y suelo ser una idiota cuando estoy furiosa y no hago lo que deseo, soy malcriada, berrinchuda y tengo un terrible temperamento - suspiró -, pero te amo, y lo digo en serio, no sé cuanta de mi conversación escuchaste con él, pero te amo, y te escojo a ti sobre él y sobre todo - me acuesto a su lado.

Sus ojos brillan con lágrimas atrapadas en sus pestañas y ahora sé que ha estado llorando, el contorno de sus ojos me lo revela, maldigo mi estupidez.

- Lamento haberte herido con mis palabras, amor, haré mi mejor intento para que no vuelva a pasar, deseo realmente estar contigo, tener una vida, un futuro, una familia - me inclinó a él y besos sus mejillas borrando el camino de sus lágrimas ya derramadas.

- No quiero que vayas porque sé que te ama tanto como yo te amo - Tristán habla y su voz se escucha ronca y apagada, sus ojos están oscuros, llenos de tristeza -sí te vas, no podré seguirte y tengo miedo de que veas en él las virtudes que hasta ahora no has visto en mí - me abraza y su cara se mete en mi cuello haciéndome cosquillas.

- Entiendo lo que sientes - me separó un poco mirándolo a los ojos - sentía lo mismo cada vez que la mirabas a ella, cada vez que ella ocupaba todo lo que yo siempre anhele - susurró - y quiero decirte que te perdonó, por todas las cosas que me hiciste, por el daño que causaste - mis lágrimas se agolpan y un dolor sordo que se alojo en mi pecho comienza a desaparecer.

¿Son estos los sentimientos de la Marjory real?

- Te he amado por mucho tiempo, Tristán Sigfred, eres mi General, cumpliste tu promesa y finalmente viniste a mí - mis labios se mueven solos y un escalofrío recorre mi cuerpo.

Esas no son mis palabras.

- Gracias por darme tu perdón, por creer que aún vale la pena lo nuestro, aún hay mucho que tengo que mejorar, pero estoy trabajando duró para conocerte, para que esto funcione, te amo, te amo, te amo, tanto que incluso duele - sus labios atrapan los míos.

Nos fundimos en un beso, ya no hay necesidad de esperar, lo anhelo y necesito tanto como él me necesita.

El beso necesitado encendió el calor de la pasión, los sentimientos y el deseo afloraron en nuestro interior, poco a poco sus manos comenzaron a vagar, desde mi espalda hasta mis pechos, sus caricias eran tímidas, algo inexpertas, puedo estar segura de que él no sabe mucho más de su experiencia con Bela.

Lα Lεccισ́и dε lα SαитαDonde viven las historias. Descúbrelo ahora