Mi peor error

5 0 0
                                    

Desperté en un cuarto de hospital, con un suero conectado a mi brazo y la maquinaria a mi alrededor al igual que con mantas, pues el aire acondicionado era alto como lo exigen en todo hospital. Con la vista busque a Ethan que se encontraba  en una esquina, sentado en la silla y dormido, parecía estar tan incómodo en aquella posición doblada.
Por supuesto era mi culpa, ni siquiera se porque me desmaye. Me siento bien, dentro de todo creo.
La enfermera entro en la habitación y observo que estaba despierta. Por lo cual se acerco rápidamente.

-¿Cómo se siente?-  monitoreando las máquinas a la vez que me veía. Su rostro a pesar de parecer neutro me observaba extraño, como si sintiera pena hacia mi. Como si se compadeciera de mi vida.

- Estoy bien- respondí lo mas rápido que pude. No quería mostrar debilidad y menos duda.-¿Puede explicarme porque estoy aquí?

- Le diré al doctor que ya despertó, para que hable con el- y se retiró. Intente sentarme y detenerla pero un dolor fuerte me lo impidió. 

Mi estómago, mi pelvis y útero dolía, mas bien ardía. Chille a causa del dolor, por consecuencia desperté a Ethan.
Intente nuevamente sentarme; Ethan me fue a detener, pero era en vano todo intento por estar sentada, ni siquiera podía flexionar mi abdomen. Quería sentarme y allí estaba ese dolor nuevamente. Pero esta vez acompañado de calambres horribles, mis entrañas me dolían como nunca, sentía algún liquido escurrirse por mis piernas.
Levante las mantas y había una mancha de sangre en mi entre pierna.

Ethan quedó pasmado por unos segundos y comenzó a gritar por ayuda. Yo creo que me encontraba paralizada. 

Me podía ver en aquel suelo, estaba en mi casa y Went, me estaba pegando. Mi bebé; ¡mi bebé!- mi subconsciente gritaba. No, no, no, no otra vez. Mi bebé...

El doctor me hablaba, pero yo no estaba escuchándole, no podía concentrarme en las palabras que salían de su boca; solo quería que Went dejara de pegarme. 

Mi mente me enjaulaba en aquella escena. 

Aquella tragedia. 

El doctor que me hablaba, me alumbro las pupilas y lo ultimo que sentí fue un gran sueño. Así que supuse me había sedado, lo supuse porque en ningún momento sentí la aguja insertarse en mi piel.

[···]

Me levanté de aquel sedante y Ethan me sostenía de la mano. Esta vez se encontraba a mi lado y estaba dormido. Sus parpados estaban hinchados como si hubiera estado llorando.

Ethan, pobre Ethan, solo traigo problemas a todos. Mírate solo estas conmigo un tiempo y me tuviste que buscar, cuidarme en un hospital y salvarme de mi marido.
Si todos vieran como eres, si mi hermano te viera. Lo lamento...

Acaricie cabeza y el se levanto como un rayo. -¿Estás bien? ¿Qué te duele?- me bombardeó- ¿Doctor? ¡Doctor!- terminó gritando.

Trate de tocar su mano y acariciarla calmándolo.
- Eh, estoy bien, estoy bien, no me duele nada- el comenzó a llorar en mi regazo.

- No, no vuelvas a asustarme así- dijo entre lágrimas- Eres como mi hermana Kelly. Si yo te pierdo, me voy a morir de dolor, tu eres la única que me apoya siempre- dijo abrazándome. Le acariciaba la espalda brindando consuelo con algunas que otras palmadas en la misma.

El médico entro al rato a la habitación. Nos explicó que me había desmayado por anemia y que tenia una infección. Después le pidió a Ethan que se retirara de la habitación para poder hablar conmigo en privado, pero aun así había una enfermera a su lado en todo momento.

...

Me pregunto si alguien había abusado de mi recientemente. Me explicó que había tenido un desgarre interno y por eso el sangrado.
Me motivo con un discurso bellísimo sobre la valentía que debía tener. Sobre mi valor como mujer, pidiéndome que denunciará a la persona causante del daño.
Me pidió que confiara en él o en las autoridades.
Le negué todo, le expliqué que había tenido relaciones con mi marido y que nos gusta el sexo rudo. Que nadie me había tocado fuera de mi voluntad.
Le agradecí su amabilidad y comprensión. Por su rostro pude ver que no me creyó, "es su decisión" fue lo que me dijo.  Me atreví a pedirle que no le dijera nada a Ethan y le pedí el acta de salida.

El que tiene tienda que la atienda...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora