Arrogante - Yoongi ±¹⁸ ✔

2.

Joder, ¿cómo salgo de esto? Va a pensar que cerré la puerta a propósito.

- Lo siento. Traté de sujetar la puerta.

La comisura de su boca se levanta, formando una ligera sonrisa sarcástica; Yoongi aprieta sus ojos, analizando mis palabras y luego se lame los labios antes de comenzar a hablar.

No hay forma de que salga de esto fácilmente. Si le digo que traté de abrir las puertas pero las cerré, pensará que lo hice a propósito, y si digo que no lo hice, pensará que soy una mentirosa, cualquiera de los dos, no sirve.

- No. Intenté abrir la puerta.

- Lo que sea

Yoongi gira sobre sus talones, vuelve a caminar hacia la silla y siento la mano de Addy sujetando mi codo, llevándome hacia la salida. Eso salió bien. Después de que salimos del estudio, cierra la puerta lentamente, casi sin hacer ningún sonido, y me apura por el pasillo donde está el ascensor.

- Espera. ¿Ese es Min Yoongi ?

El reconocimiento me golpea como una roca, al darme cuenta con quién acabo de hablar. Min Yoongi es uno de los mayores productores de Seúl. El hombre es una leyenda. Ha estado produciendo y escribiendo desde que era un adolescente.

- Bueno, sí. Te dije que era Yoongi. ¿Cuál es esa historia del ascensor de la que estaba hablando?

Mordiéndome el labio, considero si es seguro o no decirle esto. Ella podría decírselo, considerando que acaba de hablar con él usando bases de nombres. Sin embargo, decido seguir adelante con ello. Parece que al hombre ya no le agrado así que, ¿cuál es el daño?

- Accidentalmente presioné el botón de cerrar en lugar del de abrir.

Pensando las cosas con claridad, no era un gran problema. Simplemente no sostuve el ascensor para él. ¿Qué tiene de malo eso?

- Bueno, debe pensar que lo cerraste a propósito. No es gran cosa, pero Yoongi tiende a ponerse nervioso cuando está grabando algo. Se vuelve... nervioso.

Ella ignora mi comentario.

- Creo que probablemente llegó tarde esta mañana. Por eso se molestó tanto.

Estupendo.

El resto del día transcurre sin problemas. A pesar de no ser la persona más amigable, en realidad tuve una buena conversación con Addy y, alrededor de la hora del almuerzo, ya habíamos intercambiado números. Después del almuerzo, trabajé un poco y ayudé a uno de los productores junior a escribir una próxima presentación. En general, fue un buen primer día; a todos les gustó mi trabajo, excepto al gruñón Yoongi. No lo vi por el resto del día, afortunadamente.

Al salir del trabajo, paso junto a la chica de la recepción y le digo:

- Buenas noches.

No soy la persona más amigable, pero tengo buenos modales, y esta chica supera mis peores expectativas. Ni siquiera levanta la vista ni responde a mis palabras. Al salir del edificio, mi teléfono suena dentro de mi bolso. Después de ver la identificación de la persona que llama, respondo.

- Oye hermana, me voy ahora. ¿Cómo te fue en la escuela?

Mi hermana tarda un rato en contestar, haciendo una serie de sonidos de queja al otro lado de la llamada.

- Bien, supongo. ¿Puedo morir ahora? Estoy cansada de la universidad.

Su respuesta me hace resoplar y reír al mismo tiempo. Mi hermana está en su segundo año de la escuela de medicina y tiende a ser un poco dramática sobre su vida. Somos solo nosotras dos, ella se mudó a la ciudad para estudiar y ahora compartimos una casa.

- No. Puedes morir después de preparar la cena, es tu turno esta noche.

- Agh... está bien. Pero estoy haciendo fideos ramen instantáneos, realmente no tengo ganas de cocinar.

Después de escuchar sus quejas sobre lo difíciles que eran las clases, entro en mi auto y conduzco a casa. El tráfico está un poco lleno, pero esto me ayuda a pensar en todo lo que sucedió hoy y por qué el 'lo que sea' de Yoongi me afectó tanto. Fue grosero. Fue un accidente.

La luz roja del auto frente a mí no me ayuda a calmar mi ira mientras sigo recordando la sonrisa en su rostro cada vez que se enciende.

[...]

Al día siguiente me levanto bastante temprano y empiezo a prepararme para el trabajo. Hago la misma rutina todas las mañanas antes de salir de casa. Necesitando cafeína, recuerdo haber visto una cafetería ayer en la esquina de la calle y entré directamente antes de ir a trabajar. Va a ser un día largo, Addy me envió por correo electrónico mis tareas para la mañana y, si tengo suerte, podría terminarlas en las primeras horas. Si no lo hago, todo mi día está condenado. Tomo un café con leche con un trago extra de café y camino hasta que estoy frente al edificio de vidrio.

- Buenos días, - le digo a la recepcionista poco amable, y como el día anterior, no obtengo respuesta de ella.

Sin alejarme del ascensor, tomo un sorbo de la bebida caliente que tengo en la mano. Es bueno, la cantidad justa de líquido y espuma, además ayuda a calentar mis manos frías. Mientras espero, veo un reflejo en las puertas de metal acercándose detrás de mí.

Muevo mi cabeza hacia la voz ceceante que casi derramó mi café sobre mí. El sarcástico productor musical me mira con una sonrisa algo divertida en su rostro.

- Ya lo eh presionado

Mi voz sale apática y Yoongi exhala un profundo suspiro, sonriendo al suelo antes de levantar la cabeza hacia mí. Sus ojos oscuros son imposibles de leer.

Las puertas del ascensor se abren y ambos entramos, yo presionando el botón de mi piso y Yoongi dirigiéndose a los estudios. No hablamos, es mejor. Hay esta tensión entre nosotros, en realidad es culpa suya, ya que me impide hablar con él. Salgo del ascensor, y antes de que pueda empezar a caminar hacia mi cubículo, escucho su voz ceceante hablando.

- ¿Oh, Kimi?

Volteándome hacia él, lo primero que noto es esa maldita sonrisa.

- Le pedí a seguridad que revisará la cámara. Presionaste el botón equivocado

Me quedo sin palabras, mirando su rostro antes de que desaparezca detrás de las puertas de metal. Ese hijo de... ¿Qué hizo él...?