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Ya había pasado casi una semana desde que Seungmin fué ingresado a la clínica. Todos esos días había recibido ayuda por parte de Lia y ya habían progresado bastante.
Changbin, que solo había hablado un par de veces con el omega, ahora está listo para mantener una conversación más profunda y hablarle de encontrar a alguien de su familia. Con algo de dudas, el alfa finalmente pidió permiso para entrar al cuarto.
-Buenos días doctor -saludó Seungmin, el menor había estado leyendo una novela que Jeongin le prestó, a pesar de que en su vida el omega había leído un libro tan extenso se estaba esforzando por agilizar su lectura lo que es por demás difícil si contamos que solo acabó la primaria.
-Seungmin buenos días, ¿Cómo te sientes?
Seo tomó asiento junto a el y el omega cerró el libro para poder conversar.
-Estoy bien, la doctora se fué hace un rato y dijo que estoy avanzando rápido.
La pequeña sonrisa de Seungmin hizo que el mayor quisiera darle un abrazo y jamás soltarle.
-Eso es una buena noticia -animó- sabes, estoy aquí porque tuve una buena idea y quizás sería una forma de ayudar en tu futuro, pero si no lo aceptas está bien ¿Si? Es tu decisión.
Seungmin sintió nervios en su estómago por la incertidumbre.
-¿Cuál fué su idea, doctor?
-Bien, ya hemos hablado acerca de que creciste en el orfanato y de tus padres... ¿No te gustaría que te ayudemos a encontrar a algún familiar? Quizás algún hermano o tío... Alguien que quizás quiera conocerte.
El corazón de Seungmin latió con rapidez.
-¿Eso sería realmente posible?
-Te aseguro que si me das el nombre del orfanato y con tu fecha de nacimiento, podremos encontrar algo... No estoy seguro de que puedas formar un lazo pero creo que no hay nada que perder ¿No?
Seo esperó a que Seungmin respondiera, pero lo único que recibió -para su sorpresa- fué un abrazo. El omega había casi saltado a sus brazos y Changbin le sostuvo firmemente, adorando la cercanía con el omega, su alfa se volvía loco al poder notar el aroma de su omega, dulce caramelo.
-Gracias por ésta oportunidad... No voy a estar esperando encontrar a una familia feliz que me reciba de brazos abiertos -confiesa- pero me gustaría intentarlo y cerrar luego esa parte de mi vida, ya no quiero tener esa duda.
El omega se permitió olfatear disimuladamente al alfa y su lobo inmediatamente se regocijo, eso le hizo apartarse del mayor pues no quería que su tonto lobo empezara a soltar feromonas.
-No hay de que Seungmin, solo quiero lo mejor para ti -sostuvo su mano- y para la bebé.
Nuevamente su lobo reaccionó al escuchar que su bebé era nombrada.
