Mi destino como Villana.

Capítulo; Trigésimo O/ctavo.

El largo viaje llegaba a su fin y con él mis interrogantes, todas ellas. Ya no quedaba más camino que recorrer que el que me separaba del Castillo Lorechester, "La fortaleza norte de los Cardaellaine".

En el reino de Aekaetish cada noble posee tierras, desde mansiones hasta ciudades, esa es la escala de medida de la nobleza. Los nobles de menor rango, como los Barones y los Condes, normalmente, poseen mansiones, tierras de factura o empresas. Los nobles de rango medio como los Marqueses, en el caso militar, o algún Conde más ambicioso, son dueños de una gran porción de tierra con solo dos mansiones, generalmente. En cambio, los Duques poseen una o dos ciudades enteras a su cargo, en el caso de los Cardaellaine, al ser Archiduques, los únicos del Reino, poseen un total de cinco ciudades. Considerando que el Reino divide la territorio total en ciudades con tres zonas, los Cardaellaine tienen mucho poder, en todos sentidos. La división de las ciudades es simple, primero está la zona central, donde se concentran la mayor cantidad de accesos y servicios, la zona secundaria, donde están las ultimas casas, y la zona terciaria, donde está el terreno "vacío". Lo que, en conclusión, los deja con el 38% de todo el reino. Por otra parte, las ciudades que no tengan alguna familia ducal deberán regirse bajo el Código Noble de Organización Estamental, reglamento que regula el trabajo mutuo que deben ejercer los nobles de aquella ciudad para poder gobernarla, una vez organizados, una vez cada cinco años se es escogida alguna familia ducal externa para poder corroborar que todo esté bien. Las familias ducales se rotan estas "supervisiones" a estas ciudades, logrando que no haya casos de colusión efectivos.

Un poco más al Sur de la ciudad de Bruejan está la ciudad de Breyvania, un sitio lleno de eruditos dedicados y un montón de infraestructura que los respalda. Al ser esta última una de las ciudades de los Cardaellaine la historia pareciera cobrar vida y el tiempo suspenderse. Si hay algo que el cara de papa y su papá (el abuelo de los chicos) aprecien, eso es la cultura en todos sus niveles, por lo que la arquitectura de la ciudad se ha conservado sagradamente a través de los años. Hay enormes bibliotecas con cientos de esculturas en sus pasillos, candelabros en sus techos y cuadros colgados en las paredes. Cada plaza posee una biblioteca, al menos, disponible para cualquier necesidad del usuario, en serio, cualquiera. Las escuelas poseen tanto aulas pequeñas como conversatorios y auditorios enormes. Quería ver cada una de esas cosas, pero mi atención se desvió totalmente al enorme Castillo que tenía en frente.

Apenas salimos del agua, una enorme estructura de forma cruzada atrapó mí interés. En medio de un inmenso lago que rodeaba la propiedad se alzaba un Castillo de un singular color mármol cálido, compuesto solo de ladrillos y tejas, con enormes cúpulas y afiladas puntas en el techo. Me pregunto ¿Con qué propósito lo construyeron así?

Habían cuatro enormes y hermosos puentes que llegaban a la propiedad. Marie me dijo que el Castillo era considerado por muchos como la bóveda del conocimiento, por eso habían tantas bancas. Nosotros no usamos ningún puente, puesto que salimos directamente del lago. Aguardando por nosotros había una enorme fila de sirvientes reverenciándonos. Nos recibieron como la prometida del Príncipe Heredero y su escolta, la guardia del Heredero. Podía notar su disconformidad a kilómetros.

Una anciana con tantas arrugas que no pude mirar sus ojos nos recibió. Se presentó a sí misma, a duras penas, como la administradora del Castillo. A su lado, su esposo, el mayordomo del mismo. Ambos tenían una arrogante y prepotente actitud, pero eso me daba un poco igual.

 - Saludamos a la Prometida del Príncipe Heredero - Lo normal es que hicieran una reverencia, pero son muy tontos y se dejaron llevar por su orgullo, así que no lo hicieron.

 - Esta es Nicolyn, añadida de los Cardaellaine, intima amiga de los Jovenes Maestros de la Casa y prometida del Primer Príncipe del Reino de Aekaetish, el Heredo y Escogido por los Dragones, Su Eminencia Zheasthish Grymbientass Mniphobeath Verkameth - Melanie se adelantó y lo amenazaba con su mirada mientras ninguno de los dos se inmutaba - ¿A quién creen que están ofendiendo ahora?