Síndrome de Génesis

Primer día de trabajo

Siendo una primeriza en esto, creo que es normal sentirme nerviosa en esta situación. Las luces, el escenario, las cámaras apuntando y los múltiples hombres que desconozco que serán mis compañeros de trabajo para el día de hoy. El director ya me está mandando órdenes, me dice que entre a escena, las cámaras ya están filmando. El papel que tengo que interpretar es bastante simple, como la de cualquier papel en una película porno, actuar como una buscona y que me penetren bien fuerte, nada nuevo la verdad.

Comienzo con unas palabras de flirteo completamente vacías, me acerco a él , pasando la mano por su muslo e ir subiendo a sus partes erógenas, mientras mi boca busca la suya, introduciendo la lengua a lo más profundo de esa cavidad. La verdad es que poco le costó excitarse, ya se sentía duro su miembro viril; hago mi trabajo y le bajo los pantalones sin muchas complicaciones y comienzo a saborear su pene. No es demasiado impresionante, un pene mediano, me llegaba hasta la campanilla mas no hasta la garganta. Voy a ir poco a poco aumentando la intensidad, manteniendo mi mirada fija a la cámara que grababa mi rostro de falso placer. A pesar de que no es muy grande, actúo como si me llegase a la garganta y me faltase el aire, siendo  el guion establecido. 

En cuestión de 30 segundos se corrió mi compañero en mi boca, la verdad es que no me lo esperaba, me siento decepcionada. El director pide que se corta la toma para que podamos recolocarnos para la siguiente escena. Esta es bastante más simple, desnudarme e ir lubricando mis orificios, mientras tanto el chico va colocándose el preservativo ante posibles altercados que puedan ocurrir. Con solo mis medias y tacones puestos, procedo a tirar al chico al sofá y empezar a montarlo, en una posición en la que mis pechos chocaban frontalmente con sus ojos. Creo que está posición se llamaba cowgirl, aunque no estoy segura, de todos modos, se notaba que había tomado viagra,  su pene estaba duro como la piedra y es capaz de aguantar bien mis sacudidas. Subo y bajo a una velocidad constante, su cara es de placer, bastante adorable si me lo preguntáis, y poco a poco voy aumentando la intensidad. Viendo que poco podía aguantar más, procedí a frenar y cambiar de posición, para la siguiente escena.

El director hizo un corte e inmediatamente comenzó con la siguiente toma, esta vez yo sería la que estaría en una posición sumisa y pasiva, a cuatro patas. Él me tomó por las caderas e introdujo su pene por mi vagina de nuevo, entonces comienza a empujar y tirar, sentía como me penetraban mis entrañas, lo poco que pronuncié fueron gemidos de placer, cuanto mayor volumen eran los sonidos que producían, más intensos eran sus movimientos. Sentía como su punta  tocaba las paredes hasta llegar a la puerta del útero, de forma continuada, a pesar de su apariencia, cierta experiencia tenía. Durante unos minutos eso fue lo que sentí, hasta que se acabase la escena.

Esta siguiente toma sería ya la última antes de un pequeño descanso. Procedo a quitarle el condón y a chuparle la polla de nuevo, aunque esta vez me tendría que beber su semen, no niego que es un poco desagradable, el sabor de antes no fue placentero que digamos. Fui al grano y la intensidad a la que chupe fue alta en todo momento, no duró mucho hasta que se corrió por segunda vez en mi boca, enseño entonces toda su "esencia" ante las cámara antes de tragármela de forma rauda, lo poco que se me estaba cayendo de la boca, pues lo tuve que recoger y tragar también. El director ya entonces corta y hacemos una pequeña pausa.

Continuará...