Apocalipsis [Bakushima]

Capitulo 5: Sobrevivientes

Una noche en completo silencio y muertos caminando por donde sea era de las cosas que nuestro dúo estaba acostumbrado. Pero esa noche estaba mas silenciosa de lo normal, Bakugou estaba apenado por lo que dijo en los baños junto al mal pensar lo que dijo su amigo Kirishima. Mientras por otra parte, Kirishima pensaba seriamente si seguir discutiendo con Bakugou o solo quedarse callado en cualquier problemática que cause el cenizo. La situación estaba muy tensa y ambos no se animaban a hablarse, parecía que se distanciaron aunque estaban juntos físicamente. Ya harto del silencio, Eijirou detiene el vehículo y mira a Katsuki seriamente. 

No soporto estar callado. -dijo el pelirrojo- Mira, estoy notando que lentamente nos vamos a convertir en solo compañeros de equipo. 

¿A que te refieres con eso? -dijo el rubio devolviendo la mirada-

Que nuestra amistad se esta corrompiendo, no quiero que eso pase. -dijo Kirishima-

Yo.. sinceramente tampoco quiero que pase. -dijo Bakugou mirando a la ventana- Creo que empezó a quebrarse en el momento que me enoje en los baños, tuve que tener más tacto contigo, a mi no me afecta tanto ver demasiadas muertes, a ti si. 

¿Podemos hacer las pases? -dijo Kirishima con voz quebradiza-

Si idiota, podemos hacerlas. -el rubio coloco al pelirrojo en su hombro, dejando que llore en el-

Me afectó el cambio tan drástico en las ultimas semanas, no sé el por qué de este cambio. Ya me acostumbre a ver a esas personas en todos lados pero aun me sorprende el como alguien puede morir de la nada. Sin previo aviso. Solo un "tengo hambre" ya es alarmante.

Puedo entenderlo, el cambio fue bastante sorprendente. Estoy preocupado por mis padres y aunque no me guste aceptarlo, extraño a nuestros amigos. -dijo el rubio-

Yo también, me pregunto como estarán ahora, o por lo menos sigan con vida. Me seria tan doloroso saber que un compañero murió. -dijo el pelirrojo-

Bakugou al notar su tono calmado de voz, su cara sonriente y teniendo a Kirishima en su hombro porque el mismo lo coloco, se dio cuenta que su actitud cambio demasiado, seguía siendo un perro rabioso pero algo pasaba cuando se desahogaba con Kirishima. Era raro para el imaginarse una versión de si siendo amable. Una persona normal, una persona que no gritara todo el tiempo, alguien capaz de escuchar a los demás y siendo un guía que no tratara a su alrededor como una basura.

Kirishima, si quieres puedes dormir atrás, te noto cansado. -dijo Bakugou tratando de tomar el control del volante-

Estoy bien, puedo seguir manejando. 

Pareces estar somnoliento, lo más sano es que duermas. 

Iré a dormir si tanto insistes. 

¡Duerme bien pelo pincho! 

¡Igual tu perro rabioso!

Bakugou apaga las luces del auto para que Kirishima durmiera a gusto. Mientras manejaba, parqueo en un lugar seguro y cayo rendido contra el sueño. Esa noche ambos descansaron sin preocuparse de nada mas. Aunque aun les faltaba solucionar el tema de la comida y la medicina, se sentían cómodos de la compañía del otro, después de esa platica la comunicación fue mejorando. Las siguientes semanas lograron conseguir medicinas saqueando farmacias, la comida escaseaba y aún no había una solución al problema. A cada supermercado que visitaban era lo mismo, todo saqueado y zombies por doquier. Los chicos ya casi sin comida se alejaron un poco de la ciudad, viendo un gran campo cerca de una casa con un cartel en la entrada.

Bakugou, ¡mira eso! -dijo el pelirrojo fijándose en la casa- 

Tendremos que bajar, veamos si podemos pedir ayuda en ese lugar. -exclamo el rubio con la esperanza de encontrar comida-