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Carga con tus propias cargas

Justo en el momento cuando la brisa fría te pasa tan cerca del rostro, es en ese mismo momento que te das cuenta lo tan cansado estás. El andar de tus pasos han hechos de tus pies el contrapeso perfecto para seguir soportando. Somos tan capaces cuando somos tan fuertes como para seguir aguantando la tarea enorme de poder seguir, cuando todos te han dejado atrás. El día a día de nuestras vidas cansadas de seguir y celebramos la dicha de estar en ellos, inoportunos a la hora perfecta siempre están allí para ti y tú tan inagotable, persiguiendo los sueños de quienes junto a ti siempre han estado. Los haces brillar y los conduces a su propio rumbo. Sabemos las veces con las que podemos pero no las veces que aguantaremos, cargas sutiles, cargas muy fuertes, esas que te hacen creer en ti cuando pruebas un poco de polvo. Seco de todos, nos ven tan limpios a lo cotidiano de siempre, ese que te obliga a no desviarte de tu camino del cual siempre debes perseguir.

Solo cuando más cansado estás, debes cargar con otros y saber si puedes seguir haciéndolo para cuando ellos puedan solos. Se trata de guiarlos a todos por la vida justa y no la fácil que es la que más rápido enseña la vida. Seremos conscientes del daño que ocasionaremos cada vez que les dejamos las cargas a otros, pero muy en el fondo, harás el bien ajeno al empujarlo por el camino duro y tedioso del cual a ti y a mí, nos enseñaron. Caminarás despacio y con precaución por los lugares desconocidos y te darás cuenta, que no será fácil si no te empeñas en llegar. Podrán existir mil problemas pero recuerda, que para ello siempre habrán miles de soluciones, caminarás sumiso pero de manera rápida por donde creerás saber por dónde ir, pero estarás siempre alerta de qué tan largo será el recorrió que puedas haberlo olvidado. Cuando decaigas al suelo hazlo tuyo, hazlo propio pues solo así podrás de la misma manera levantarte.

La vida carece de personas y es hora que demuestres que puedes de la misma forma con la que ella te coloco allí, junto a los tuyos, esos con los que tú sobrellevas tus propias cargas. Hazle saber que no es la forma con las que aguantes, es la manera con la que te aferras a seguir. Los problemas son enseñanzas intangibles a ti como tan visibles a otros, al caer no mires a los lados, levanta el ánimo y recuerda por qué lo haces, recuerda que no eres débil y puedes andar aún mejor que los que se creen volar. Cuando nos hacen ser tan pequeños por fuera, llevamos multitudes de personas por dentro y recordamos que no somos uno, sino millones de personas con la misma voluntad de vernos seguir, solo así verás detrás de las cuerdas que atan la soberbia y el egoísmo de un mundo pobre de pensamientos, de personas a las que les hace falta tocar suelo para abrazar al mundo, un mundo que te está pidiendo aguantar para ver un futuro, pero aguantar de la forma con la que se nos enseñó desde aquel inicio que sobrellevaba consigo nuestras propias cargas. Solo resta hacernos saber que no importa cuál sea el camino que tomemos siempre y cuando, podamos aguantar de la misma forma que la vida nos ha aguantado a todos.

"No existirá carga más grande que tu propia mente"