Prólogo

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Vivir una vida donde todo parece de colores felicidad de la mano y rodeada de las personas que más amas, mirándote con ojos de cariño pero que a percepción de los demás son de recelo y frialdad.

Eso nunca me importo pero siempre veía como mis hermanos y mis padres se colocaban vestimentas que ocultaban todo su cuerpo y unas peculiares máscaras en la que solo se apreciaban sus ojos, solía preguntarle a mi mamá muchas interrogantes

-¿Yo algún día podré hacer eso?

Y ella siempre respondía lo mismo con una gran sonrisa

- Tu eres lo que siempre espere mi pequeño rayo luminoso.. no quiero perderte por órdenes de nadie más

Con el tiempo me acostumbre al rechazo de aprender el negocio familiar pero seguía doliendome más cada día hasta que escuche unas palabras que me impactaron

- Ya sabes está familia de villanos solo tiene una flor buena.. lastima que la señorita este con ellos..

- Es cierto.. ella no los merece

Palabras así siempre las escuchaba pero no tenía valor para salir y decirles que mi familia me amaba y era yo quien no los merecía

El tiempo pasó y las cosas se fueron poniendo muy extrañas mi segundo hermano se fue de casa y escuche de los sirvientes que fue al templo, pensé que era genial hasta que después todo se complicó

- Padre.. como puede el estar segado por una mujer.. esa falsa mujer solo quiere la reliquia de nuestra familia

- Es cierto cariño.. el templo quiere el imperio.. y nosotros somos sus obstáculos.. y el príncipe heredero.. el

- Mato al emperador.. sin señales de arrepentimiento.. por esa mujer y su palanquin las cosas están cambiando según los deseos de esos dos

Sabía que al escuchar eso debía hacer algo para ayudar pero era una inútil que solo estaba escuchando como su familia podía caer, así que me arme de valor y cuando mi madre me dió las buenas noches la enfrente

- Mamá nuestra familia está en peligro.. las sirvientas dicen que van a huir porque todo el imperio caerá y nuestra familia será la primera

- Mi rayito.. ciertamente muchas cosas cambiarán pero te prometo que te protegeré.. y serás feliz..

En ese momento debí habertirle que no sería a precio de su propia vida pero no fue así y convencida de que todo mejoraría dormí, sin pensar que años después estaría llorando con el cadáver de mi madre en mis manos

- Cassia quédate detrás de nosotros..- dijo mi hermano con lágrimas en los ojos

- Está bien hermano..- en ese momento decidí ser fuerte aunque tenía el alma destrozada mi madre dió la vida por mi.. por mi felicidad como me lo prometió pero ella no lo merecía

"Quienes son los villanos de esta situación.. nosotros solo nos defendemos.. ellos nos quieren matar"

En ese momento pensé en el porque de muchas cosas y empecé a culpar a mi misma por no seguir mis deseos de ser parte de todo el trabajo de los villanos de pronto mi hermano me lanza una pistola

- Vete.. - grito mi padre dándole la espalda a su enemigo algo que nunca se debe hacer por más que tengas a un compañero de respaldo ante mis ojos una vez más otro de mis amores cayó

-¡Papá!- grite con desesperación y lo más doloroso fue ver a mi hermano correr a respaldarlo pero solo lo vio perecer mientras que mi segundo hermano lucía como un maniquí muerto, no sabía si huir o correr por mi hermano a brazarlo pero un instinto de odio se alojo en mis venas y tome el arma y le dispare a la mujer a la culpable de mis penurias

- Te detesto.. - murmuré aunque falle mi tiro

- Cassia vete de aquí..- dijo con desesperación mi hermano

- No puedo permitir perderte a ti también.. solo quedamos los dos.. - dije llorando

Aquella mujer empezó a reír muy fuerte y caminando tranquilamente empezó a hablarme

- Querida.. solo quiero la reliquia.. si me la das perdonaré tu vida y solo la tuya.. y por supuesto te devolveré a Lennox después de todo ya no me sirve de nada

- Tan importante es..

- Si querida lo es.. recuerda que está es tu oportunidad de oro

- Cassia no la escuches ella te traicionara.. si le das la reliquia todo acabará no habrá felicidad.. - grito mi primer hermano Max

Lo ví y asentí pero en ese instante el palanquín lo mató por detrás sonriendo

- Por fin logro asesinar al fuerte Max.. esto se siente muy bien.. solo queda ella Gala no crees que debamos terminar ya.. recuerda que tenemos la sangre real ya

- ¡¿Que le hiciste al príncipe heredero?!- grito con furia la santa

- Lo que se tenía que hacer.. no me digas que no querías asesinarlo.. lo amas tanto.. no olvides que todo era parte del plan

- Pero habían otras opciones porque lo hiciste.. yo.. Asirius..- ella empezó a llorar mientras el hombre se le acercaba

En ese momento mientras ellos discutían con el dolor de dejar a todos me fui de allí con el arma que me habían dado y fui al salón donde se encontraba la reliquia necesita proteger por lo que ellos lucharon

Corría como una loca por la mansión dejando un rastro por lugares equivocados para despistar un poco a todos sobre todo si me buscaban en grupo hasta que por fin llegué al salón al cual solo podía entrar con una gota de mi sangre pinche mi dedo con mi boca y lo coloque en la manija la cual se abrió rápidamente y entre

- Aquí estás luminoso y brillante.. como si nada a pasado.. y tanta sangre a sido derramada por ti- me acerque y lo tome

- Me has hecho las cosas más fáciles..- dijo el palanquín

Sabía que ese era mi fin nada de lo que había hecho resultó el me quitaría el cáliz y yo moría al igual que mis amores

De pronto el cáliz empezó a brillar y un pequeño gatito está en mis manos dónde antes estaba el cáliz

"Que desesperación te atormenta mi rayito"

- Solo quisiera que nada de esto hubiera pasado.. quiero cambiar esto..- le dije y de pronto todo se iluminó

El luminoso destino de la villanaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora