Rutina de la Mañama

Único

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El error de Zenitsu es pensar que escapó solo porque llegó al genkan sin cruzarse con Kaigaku.

El castigo por su descuido es ser clavado en la puerta principal, el aliento caliente golpeando la parte posterior de su cuello mientras Kaigaku se ríe, las manos grandes se desabrochan el cinturón y vuelan para que Kaigaku pueda deslizarse los pantalones por debajo de su trasero.

"Kai--Abuelo--" Zenitsu llama, ya sea para pedir ayuda o para advertir a Kaigaku de la facilidad con la que podrían ser descubiertos, no está seguro.

Kaigaku se ríe, se lame la concha de la oreja. "Fue al dojo temprano hoy, hermanito".

Kaigaku mete alegremente tres dedos en la boca de Zenitsu, empujándolos tan atrás como puede. Lo hace más por el placer de hacerlo vomitar que por algo práctico, pero Zenitsu hace todo lo posible por humedecerlos con saliva por su propio bien.

"Veamos si todavía estás suelto de anoche, ¿eh?" Kaigaku dice mientras retira sus dedos, llevándolos al trasero expuesto de Zenitsu. "Quiero decir, después de cuatro rondas, incluso alguien tan tenso como tú tendría que relajarse un poco".

El cerebro de Zenitsu se detiene en el número. ¿Cuatro? ¿Cuatro veces?

"No fue--" dice, "Fue sólo--"

"Te follé cuatro veces", le informa Kaigaku alegremente, empujando los tres dedos dentro de él. Es incómodo, pero bueno, Kaigaku tiene razón, todavía está un poco suelto. Podría ser peor. "¿Crees que me importa si estás despierto o no?"

Se siente estúpido, estar tan horrorizado por eso, llorar más fuerte por eso: Kaigaku le ha hecho todo tipo de cosas horribles, en este punto, ¿no debería estar llorando? Pero no, nunca lo es.

"Creo que incluso me gustó más", continúa Kaigaku, metiendo y sacando bruscamente los dedos del agujero de Zenitsu, todavía sensible por el abuso de la noche anterior. "Follar tu cuerpo de muñeco de trapo. No tenía que escuchar tus lamentos, pero aún así lloras mientras duermes. Lo mejor de ambos mundos".

"¿Q-qué te pasa?" Zenitsu solloza, intentando y fallando en no tensarse cuando Kaigaku saca sus dedos. Se estremece ante el sonido de Kaigaku escupiendo en su propia mano, el sonido resbaladizo de él cubriendo su pene con él llenando sus oídos.

"¿Qué me pasa ?" Kaigaku pregunta, y hay un borde de furia maníaca en su voz mientras se alinea, empuja su polla en el cuerpo mal preparado de Zenitsu sin ceremonia. Zenitsu se muerde el labio para evitar gritar. "¡Nada! Solo estoy ayudando a mi cachondo hermanito, tal como el anciano dice que debo hacer. ¿Ves?"

Kaigaku desliza una mano por el frente de Zenitsu, encuentra su verga humillantemente dura y la aprieta.

"Mírate", dice Kaigaku, su voz es una pantomima de preocupación, sus ansiosas embestidas desmienten cada una de sus palabras, "Te follaron hasta quedarte dormido anoche, pero ya estás duro y desesperado por una polla otra vez. Dios". , si no me encargara de follarte todos los días tu culo inútil, probablemente te pasarías todo el tiempo libre mendigando polla en las calles, puta".

Zenitsu niega con la cabeza, no sabe por qué se molesta, pero algo en él todavía intenta rechazar las palabras de Kaigaku incluso ahora, aunque no tiene sentido.

A Kaigaku no le importa, solo sigue follando duro a Zenitsu, sus embestidas rápidas y egoístas, su mano en la polla de Zenitsu es solo una táctica para aumentar su humillación al hacer que su cuerpo reaccione.

"Es mejor así", susurra Kaigaku acaloradamente, apartando el cabello y el cuello de la camisa de la nuca de Zenitsu. "Así, soy el único que tiene que saber la desgracia que eres, hermanito, ¿no es tan amable de mi parte asumir una carga como la tuya? ¿Por qué no dices gracias, Zenitsu?" ? Dile a tu hermano mayor que estás agradecido".

"Estás enfermo", grita Zenitsu, las palabras salen a la fuerza de su boca sin importar cuán estúpido sepa que es reaccionar, cuán inútil, "¡Estás tan enfermo! ¡¿Cómo sigues empeorando?!"

Kaigaku muerde la nuca, con fuerza. Lo suficientemente fuerte como para romper la piel, probablemente, y el dolor lo golpea lo suficiente como para callarlo. Kaigaku mantiene sus dientes enterrados en el cuello de Zenitsu mientras sus embestidas se aceleran, abandonándose como un animal egoísta en cada movimiento. Zenitsu apenas puede ver, está llorando mucho, pero ahora está callado, no puede pensar más allá del dolor en su cuerpo, en su corazón.

Cuando Kaigaku finalmente llega, es con una especie de gruñido de placer mientras bombea el culo de Zenitsu lleno de semen caliente, manteniéndose enterrado profundamente en todo momento.

"Probemos esto una vez más", dice finalmente Kaigaku, lo que obliga a Zenitsu a girar la cabeza para mirarlo. Hay sangre en sus labios. Realmente rompió la piel. "Di, 'Gracias hermano mayor por cuidarme'".

Zenitsu mira fijamente el tinte rosado de los caninos de Kaigaku. Dice, hueco y plano, "Gracias hermano mayor por cuidarme".

"Buen chico", se burla Kaigaku, presiona un beso cobrizo y descuidado en la boca de Zenitsu. Zenitsu se queda quieto cuando Kaigaku se retira, descuidadamente levanta la ropa interior y los pantalones de Zenitsu, le da una palmada en el culo dolorido.

"Bueno, será mejor que te muevas entonces. No puedes llegar tarde a la escuela ahora, ¿verdad, Sr. Comité de Moral?"

Kaigaku se ríe para sí mismo mientras se aleja. Zenitsu espera hasta que ya no puede escuchar el roce de sus pies descalzos en el suelo antes de cerrarse los pantalones y secarse las lágrimas de los ojos. No tiene idea de qué hacer con la sangre en su cuello, pero si no se va ahora, realmente llegará tarde.

Zenitsu abre la puerta, sale al aire libre y respira.

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