Capitulo 59

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Al Harry y Hermione regresar a los terrenos de Hogwarts, se dirigieron inmediatamente a la vivienda temporal donde un ansioso Sirius los esperaba y el cual no perdió la oportunidad de hacerle una que otra broma por su nuevo estado como pareja. Sin embargo, la bienvenida no duro demasiado porque inmediatamente los duendes se los llevaron hacia la sala de entrenamientos para ver la magnitud de los cambios que ocasiono su vínculo y cuál sería el siguiente paso a seguir para fortalecerlos y que Harry no tuviera ningún problema durante la tercera prueba.

-A simple vista, no veo ningún problema con su unión, se han adaptado bien ahora solo hay que probar la distancia a la que pueden estar separados y que sensaciones tienen cuando están lejos del otro- hablo uno de los duendes encargados del entrenamiento de Harry.

-La verdad, es que mientras estuvimos fuera colocamos a prueba nuestra capacidad de estar lejos y puedo decirles que al principio no fue fácil separarnos, pero cuando se estabilizo el vínculo lo podíamos hacer sin ninguna consecuencia, hasta ahora no hemos probado cuanta distancia podemos soportar pero podemos estar lejos el uno del otro sin sentir ninguna molestia- explico Hermione las pruebas que ellos ya habían hecho ese fin de semana.

-Además, que desde que completamos la unión nuestras conversaciones mentales se han hecho más fuertes y si no fuera por nuestra oclumancia nuestras cabezas serian un caos, pero eso sí, cuando nos separamos ya no sentimos dolor como cuando estuve en el lago en la segunda prueba- agrego Harry sus impresiones a lo dicho por su ahora esposa.

Los preparativos para la última tarea del torneo seguían su curso normal, Hagrid se encargaba de seguir cultivando los arbustos que rodeaban el campo de quidditch para ir formando el laberinto que los campeones tenían que enfrentar, además de ocuparse de cuidar las diferentes especies mágicas que iban a estar apostadas a lo largo de la contienda.

El entrenamiento para esas últimas semanas previas a la tercera prueba fue arduo e intenso donde ambos adolescentes aprendieron los límites y ventajas de su ahora formado vinculo de alma y en el que Harry no paro de estudiar como vencer los animales mágicos que Hagrid había puesto en el laberinto; además de estudiar la forma del mismo y el acceso más rápido para llegar a la copa y que pasara lo que tuviese que pasar, porque de algo si estaban seguros si lograba llegar primero al cáliz de fuego cuando colocara sus manos sobre él se develaría de una vez por todas cual era el plan de Voldemort para colocarlo dentro de la competencia, a lo que la familia extendida junto con los duendes estaban alertas para ir en su auxilio si fuera necesario.

Y asi llego, el tan esperado día de la prueba; ese día Harry despertó como siempre enredado entre los brazos de Hermione sin ninguna intención de levantarse pronto, pero sabiendo el día que era tenía que hacerlo asi no quisiera,  después de unos cuantos besos y abrazos el nuevo matrimonio se arregló y salió para reunirse con Sirius, Narcisa, Severus, Minerva y algunos de los duendes que habían servido de maestros en ese tiempo para desayunar con total calma.

-Bueno querido ahijado, ha llegado el momento que tanto habíamos estado esperando- hablo Sirius mientras todos los habitante de la vivienda temporal disfrutaban de su desayuno.

-Si solo espero que todo salga como lo habíamos planeado- respondió Harry.

-Claro eso es lo que todos queremos, pero si las cosas se salen del contexto sabes que nos tienes a nosotros para respaldarte y ayudarte en lo que haga falta- volvió a decir su padrino.

Entre tanto Hermione tomaba la mano de su ahora esposo y le decía mentalmente "tranquilo, sabes que si llega a pasar algo que se sale de nuestras manos; me tendrás a mi rápidamente a tu lado, además de que Sirius, Narcisa y nuestros maestros solo estarán un paso detrás de nosotros"; "Lo sé, pero eso no quita que me preocupe que tu llegues a la línea de peligro, tu sabes muy bien que gracias a nuestro vinculo cualquier daño que yo pueda recibir también puede llegar a ti" respondió Harry preocupado por la salud de su esposa "No te preocupes por eso, sabes que estando los dos juntos somos más fuertes" finalizo la conversación mental Hermione no queriendo tener más pensamientos pesimistas.

UN HARRY POTTER DIFERENTEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora