Aᴍᴏʀ sɪɴ ғɪɴ (AU MDZS, Viaje en el tiempo) [TERMINADA]

Capítulo 22: Entertainment Day

Comenzó muy temprano por la mañana. Wen Qing no estaba segura de qué estaba sucediendo en realidad. Había escuchado la puerta de los hermanos Bai sonar cuando el reloj en el velador junto a su cama marcaba las cinco y media.

Si hay algo a lo que se acostumbró, fue al hecho de que las cosas en la mansión Bai comenzaban a funcionar a las seis justa de la mañana. El mismo Bai WuXian junto a Bai Meizhen se encargaban de cocinar para todos, mientras Bai DiLan y Bai Minzhe se preocupaban de preparar la mesa. A los viajeros les sorprendió que no contaran con trabajadores para cocinarles, luego recordaron la regla de que nadie podía pisar la cocina hasta que Bai ZeLin llegara y todo cobraba sentido.

Sin embargo, antes de poder hacerse una idea de qué podrían estar planeando sus primos, la puerta de su habitación fue tocada. Wen Qing miró a su esposo del otro lado de la cama, quien terminaba de acomodarse una camisa. Ella se movió hacia esta para abrir, encontrándose a una sonriente Meizhen. —¡Buenos días, Señora Nie! Da-ge me pidió que viniera a invitarlos a dar un paseo. Los chicos y yo necesitamos ir al supermercado por unas cosas, mientras tanto DiLan se encargará de darles un tour. ¿Qué dice?

Wen Qing parpadeó estupefacta, pero de inmediato se recuperó para responderle con una pequeña sonrisa. —Sería un placer.

—¡Perfecto! Entonces, los esperaremos en media hora en el comedor para desayunar. ¡Este será un largo paseo! La idea es que conozcan más de nuestra época mientras se encuentran aquí, hasta que llegue Waipo —Bai Meizhen sonrió agitando su mano— ¡Nos vemos luego!

Dicho esto la joven se fue por el pasillo a la próxima habitación, repitiendo la misma acción. Wen Qing agitó su cabeza divertida, cerrando la puerta detrás suyo con la finalidad de terminar de vestirse. Luego le explicó a Nie Mingjue sobre los planes de los hermanos Bai, quien claramente estuvo de acuerdo curioso por salir; era la primera vez que abandonaban la residencia de los Bai desde que llegaron, y una aventura en una moderna época no sonaba para nada mal.

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Mo Xuanyu no se sorprendió de ya encontrar a los chicos junto a los Bai, llevando la comida a la mesa. Desde que los adolescentes se volvieron cercanos a Bai Minzhe, era común verlos a todos ir de arriba para abajo juntos. Lo más divertido, y lo comentó también con Nie HuaiSang y Wen Ning. Era el hecho de que a su vez, los cuatro perseguían a Bai WuXian como patitos a su madre. ¡Algo sin duda adorable! Pero que no se atrevía a decir en voz alta sin avergonzar a su sobrino temperamental, que si incluso su relación con este mejoró en su gran medida, no quiere tentar a su suerte.

—Buenos días, Xuanyu —saludó un feliz Bai WuXian, con su característica sonrisa llena de dientes iluminando el salón completo. Mo Xuanyu sintió que quedaría encandilado con tanta luz.

Parpadeó algo aturdido. —Buenos días, WuXian-ge.

La sonrisa del mayor se hizo más amplia. —Ve a sentarte, el desayuno está servido. A-Yue, ¿encontraste el frasco de Nutella para los hotcakes?

Bai Minzhe, sentándose en su lugar asintió. —¡Aquí está, A-die!

Mo Xuanyu fue al lugar que le dijeron, en el momento justo que los hermanos Lan, Nie y Wen llegaban también al comedor seguido de los Jiang y Jin ZiXuan. Estos últimos saludaron cortésmente, sobre todo a Jin Ling, para luego seguir el mismo patrón de los demás. Sin embargo, Lan Wangji se movió a la cocina detrás de Bai WuXian para ayudarlo con lo último que quedaba. Meizhen y DiLan intercambiaron miradas llenos de picardía, habiéndose dado cuenta de esto.

Lan XiChen no supo como tomarse las miradas de esos dos, aunque, debía de admitir que incluso cuando estaba avergonzado de la osadía de su didi, también estaba orgulloso de su iniciativa. Viendo su avance con Bai WuXian y Bai Minzhe, era de asegurar que las cosas saldrían bien para el Segundo Jade; además, por alguna razón DiLan y Meizhen mostraban una clara preferencia hacia Wangji, sabiéndola disimular muy bien como para ser notada. Sólo alguien tan observador como él sería capaz de darse cuenta de ello.