Xiao estaba a punto de suicidarse cuando su vecino.
Aether se lo impidió; si le daba a Xiao 12 razones lo suficientemente buenas como para vivir, se casarían.
y si él fallaba, ambos morirían. Juntos.
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Está historia es de @97sarte ||...
Angustia, dolor, sufrimiento... Todo en él estaba ardiendo ya que salía una gran cantidad de sangre a través de todas sus heridas abiertas, sin embargo, ni siquiera tenía un moretón. No los que puedes ver con los ojos, por supuesto todo era interno. Le dolía allí, en el corazón, en el fondo.
Paso la mayor parte de su tiempo solo con esos malditos pensamientos que lo volvían loco. Obviamente no fue culpa de el pensar esas cosas feas, si no por ser una persona llenas de traumas del pasado.
Al menos Xiao todavía podía tener un momento de paz cuando huyo de todos sus pensamientos suicidas para vivir como un ser humano simple y ordinario. Su único momento de paz fue cuando salió de casa, paseo por el parque cerca de su residencia donde había varios niños jugando felices, un lugar de inmensos sentimientos, y se dirigió hacia su mediocre trabajo. -Oh, trabajo...- Bajo salario, jefe molesto, y compañeros de trabajo perezosos...argh.
Qué lugar tan terrible.
Lleno de emociones negativas.
Al menos Xiao solo estaba a tiempo parcial allí, no toda su vida. Un punto a favor para la vida.
Es solo que...ah, de nuevo esos malditos pensamientos vuelven, y esta vez más fuertes. Xiao nunca tuvo el coraje suficiente para buscar ayuda. Las voces en su cabeza se lo repetían cada vez que lo intentaba; "ella solo se reiría de ti. Tus problemas están podridos. Solo quieres llamar la atención".
El chico de cabello oscuro, con mechas coloreadas de azul cian y ojos dorados, en este momento estaba en el último piso de su apartamento, sentado justo en el borde del edificio mientras observaba los autos que pasaban, los jóvenes, las luces, la extravagancia de los ruidos.
Xiao siempre había sido un cobarde para buscar ayuda, sin embargo, tuvo mucho coraje como para cometer aquel acto. Suicidio.
Lo había intentado dos veces. Una de ellas consumiendo droga cuando tenía unos quince años, justo en la casa de sus difuntos abuelos. La segunda vez...se cortaba la muñeca varias veces, realizaba la acción a la edad de veinte años, un año antes de abandonar la casa de sus padres, quienes lo juzgaban como "mimado" y "deprimido por entretenimiento".
¿Qué pasaría si lo intentara de nuevo? Aun así, ¿con grandes posibilidades de éxito?
De repente, una gran sonrisa apareció en sus labios secos.
Xiao se levantó lentamente, abrió los brazos para sentir la brisa, cerro los ojos y...
— ¿Te vas a tirar? —
Una voz apareció en su cabeza confundida. Pero no fue una de esas voces que te anima a hacer lo que quieras. De hecho, era una voz muy hermosa que le daba una buena sensación.
— Si es así, por favor no lo hagas—
— Si no lo hago, voy a seguir sufriendo y muriendo poco a poco. —
Xiao finalmente volvió a abrir los ojos y miro hacia esa persona.
Su vecino de abajo estaba allí, justo frente a él, con una canasta de ropa sucia y una mirada preocupada, sin embargo, su iluminación todavía estaba allí y radiante.
— Lamento entrometerme. Me dirigía hacia la lavandería, pero cuando te vi, parecía estar molesto, así que lo seguí y- —
El semblante de Xiao ahora era serio. Tal vez estaba enojado, después de todo, otro intento de suicido fallido por un hombrecillo de peli rubio.
— No me importa. — dijo Xiao mientras bajaba del parapeto y se dirigía hacia la puerta. Xiao abrió y señalo con la barbilla. — Fuera. —
— si me voy, ¿todavía intentaras saltar de allí? — Aether, pregunto con cautela
— Bueno, supongo que sí — Aether apretó más la canasta contra su pecho. Se sintió juzgado por la mirada fría y sin vida de Xiao, parecía hasta un niño suicida con poderes mágicos, y con solo su mirada descubriría los secretos más oscuros de Aether.
Fueron largos minutos de silencio con los dos chicos. Aether, intimidado y tímido por ello, tomo coraje y pronuncio en voz baja; — Si te lanzas, yo también me arrojare. —
Xiao lo escuchaba con cuidado. Sus cejas se levantaron y su rostro fallo totalmente en un intento de ocultar la sorpresa.
Su vecino, una persona totalmente desconocida para el ¿estaba negociando su vida solo para que no saltara allí?
Xiao no sabía que sentir en ese momento. Se tapo la cara con sus manos y la ola de estrés se podía ver desde lejos que rodeaba a Xiao de la cabeza a los pies.
— si eres otro hombre deprimido, busca tu lugar para suicidarte y culpa a otra persona cuando lo hagas. — dijo Xiao furioso.
Aether dejo caer la canasta al suelo. No estaba esperando esa reacción, sino la retirada. Rápidamente estrecho sus manos para un "no".
— ¡Hombre! ¡Eso no es lo que quise decir! — Trato de explicar aether.
Xiao enojado soltó la puerta y se dirigió hacia aether, sosteniéndolo del cuello.
— ¡Entonces viniste a burlarte de mí! ¡¿Eso es!? — grito.
La cabeza de Xiao estaba confundida. Escuchó varias voces y su corazón se había acelerado desde que vio al rubio allí, mirándolo preocupado.
— No, no, no ¡Cálmate! Simplemente no quiero que hagas esto con tu vida porque todavía hay mucho que disfrutar, y si nadie te dijo eso, ¡me importa! ¡me preocupo completamente por las vidas que me rodean! — esta vez, fue el turno de Aether de gritar. Eso causo que Xiao lo dejara caer de inmediato.
Esta vez, las voces se detuvieron.
— ¿Qué? — dijo xiao.
— No quiero ser el héroe. No quiero presumir que mi vida es diferente a la tuya... —
Dijo aether tumbado en el suelo, el chico masajeo con una ligera dificultad en el área del cuello. Nunca había sentido tanta adrenalina como en ese momento. —Quiero ayudarte. Por favor, déjame ayudarte. —
Xiao se sentó en el suelo, con la cabeza agachada, miro sus manos, temeroso de volver a mirar a Aether.
—No puedes ayudar a un extraño. —
—Pero te conozco, Xiao. Eres mi vecino de arriba. —
Xiao vio la mano de aether acercarse y apretar su mano. Era imposible no levantar la cabeza y ver una tierna sonrisa en los labios del rubio.
— Y si no confías en eso, te propongo una...apuesta. —
—¿Apuesta? Xiao repitió, todavía sospechoso.
— Sí, más o menos. Sería más un acuerdo. Si te doy suficientes razones para vivir, nos vamos a casar, y si nada de esto funciona, y fallo, vamos a saltar aquí. Juntos. —
¿Aether realmente haría eso? No conocía a Xiao. ¿y qué es eso de casar...Eso no sería posible, son dos hombres y la sociedad no aceptaría eso. ¡Casarse sin siquiera amar, buff!
Xiao quería decir que no estaban en un cuento de hadas y que aether no es el príncipe azul que lo salvara del peligro.
Pero en cambio, simplemente estrecho la mano del otro y asintió con la cabeza a la propuesta.
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Aether tuvo doce meses para cambiar de opinión de Xiao, de lo contrario ambos saltarían del decimoquinto piso del edificio en que ambos vivían..