Blanks (Espacios en blanco)

Capítulo 20

Toma una maleta de el y se mete a la casa voy detrás de el, ya se que termino todo pero no tengo ni idea de como regresar y tampoco me quedare afuera a dormir, por lo menos me debe dejarme dormir aquí. Deja su maleta en la sala y se va a la cocina como si nada , veo unas escaleras así que decido subir. Ya arriba hay cinco puertas la verdad las reviso todas hubo una que era la mas grande pero no la tomo, tomo la de enfrente es igual de linda que las demás pero tiene otra vista, es linda pero es una pequeña ventana.
Me quedo sentada en la cama y ya no aguanto tengo que llorar, creo que la "lección" que quería darle me salió mal, pero porque no me dice nada siempre perdón y ninguna explicación, porque no me explica.
Me levanto después de lograr como una hora decido explorar la casa, no me aburrirá y menos teniendo este hermoso lugar. Ya revise la parte de arriba y tiene una terraza donde hay una mesa y una alberca, alrededor de la terraza hay un barandal de vidrio, la vista es perfecta, llega una brisa exquisita es único este lugar; me voy a la planta baja donde esta la sala y la cocina la sala es blanca y se ve muy comida las paredes son de color crema y esta la puerta corrediza por la que entramos, decido salir quiero ir al mar, le pasa la idea de quitarme el vestido y meterme, así que lo hago me deshago del vestido, me hecho a correr para meterme al agua. Me salgo como a la hora para poder me broncear, voy por mi bolsa para ponerme bloqueador me quedo como 1 hora mas. Cuando me meto a la casa son ya las 2:30, subo a la habitación que escogí y me meto a bañar, después tomare una siesta estoy mas cansada que cuando trabajo, al salir reviso la maleta rosa que me dieron; encuentro ropa y algunos artículos de limpieza, saco el shampoo, cepillo de dientes, jabón para el cuerpo, crema para peinar de la que siempre uso todo nuevo y todos es igual a los que me llevo Ernest el día que me cambie de casa, busco algo que ponerme como para salir de bañarme y encuentro una pijama de 2 piezas una playera sin mangas y un short de color rosa igual a mi pijama de casa, pues que tienen con el color rosa, saco mas cosas y encuentro ropa interior de tonos claros, tomo algunas cosas y me meto a bañar tardo alrededor de 15 minutos cuando salgo me tiro a la cama y empiezo a llorar creí que con esa provocación iba a reaccionar pero no de esa manera así sigo con mis pensamientos y mis lágrimas hasta que me duermo.
Cuando me levanto ya es de noche y mi estomago protesta por comida, me levanto para bajar a la cocina, estoy medio dormida y con los ojos todos hinchados de tanto llorar, así que voy a tientas para no golpearme hasta que llego a la cocina, Ernest esta cocinando así que me doy la vuelta para irme, no puedo verlo, pero escucho a mis espaldas:
- ¿acaso no piensas comer?, ven a sentarte, tienes que cenar- ahora se volvió mi papá o ¿Por qué me habla así?, pero soy tan tonta que me voy a sentar; me sirve espagueti se ve delicioso, se sirve él y se pone a comer; esto me mata, que no me hable, no lo soporto y me levanto con la cabeza abajo pero de nuevo hace su agarre famoso: tomarme del brazo.
- ¿a donde vas?, ¿no has probado bocado?- me quiero soltar pero es inútil, me jala hacia el y yo levanto la cara.
-¿estabas llorando?, veme a los ojos, ¿ por que lloras?- que tonto es y aquí voy de nuevo.
- ¿enserio? Pues yo pensaba arreglar las cosas, mas bien quería provocarte a que fueras honesto y si quiera una explicación, pero nada, eres tan torpe que no puedes ni darme una maldita explicación- lo miro y esta apunto de explotar.
-¡maldita sea Karen !, solo quería sacarte de tu patética vida- su mirada fría y su rostro contraído; ¡auch!, eso me dolió no creí que pudiera herir a alguien, pero me hiere a mi, ahora no paro de llorar.
- pues gracias- es lo único que logro decir y subo corriendo a la habitación. Escucho que me grita Karen pero no miro atrás.
Me tiro a la cama a llorar y los golpes son tremendos los que golpean la puerta.
- Karen ábreme, por favor, discúlpame no era mi intensión decir eso, ábreme- siguen los golpes hasta unos minutos después no se escucha nada.
- esta bien, toda la semana estuve preparando este fin de semana para los dos, acostumbro venir solo pero prepare cosas para ti- Me levanto de la cama para acercarme a la puerta pero no le abro solo escucho muy atenta.
- era amable con Natalia por lo feliz que estaba por pasar estos días contigo y sobre en la mañana, ella fue a tocar la puerta, Eleazar no estaba se salió antes para arreglar la lancha para nosotros, yo te esperaba para decirte algunas cosas de las sorpresas; ella fue a preguntarme sobre esta sorpresa; no se como se entero pero me negué a decirle, se molesto y su venganza la culmino en el momento exacto, cuando tu ibas a tocar la puerta. Lo juro no hice nada, te quiero mucho esto era para nosotros-

No escucho nada, así que tomo el pomo de la puerta, de un solo movimiento lo abro y esta recargado en la puerta de enfrente, mi instintos es lanzarme a sus brazos y besarlo, es lo único me sale últimamente para agradecerle algo. Me toma de la cintura, me alza ligeramente yo lo tomo de la nuca y juego con su cabello; el beso es exquisito, sus labios se mueven lento pero de pronto el beso se vuelve intenso mete su lengua a mi boca y yo me voy acoplando a los ligueros masajes de su lengua a la mía, después de unos segundos nos separamos agitados.
- nena tenemos que parar o terminaremos, bueno ¿lo sabes no?, o mas bien en si, terminaremos- sus palabras me hacen avergonzarme el juego de palabras que utiliza me pone la cara roja, pero la adrenalina del momento me tiene tan a tope que lo único que me hace es pedir más, había sentido cosas excitantes antes pero nunca me atreví a tener relaciones con nadie, pero hoy el momento de la pelea, el te quiero de ayer , la explicación y como planeo venir aquí conmigo me hacen sentir segura con el y el valor que me inspira no para, sigo tomándolo de la nuca y el me tiene de la cintura.
- no, por favor no pares, solo repite que me quieres- me mira y me toma la cara.
- te quiero como no he querido a nadie, de verdad- lo ultimo lo recalca y me besa.
-¿estas segura que quieres esto?, te juro que no te traje para esto- lo miro y los nervios se asoman.
- te creo, eres un caballero y quiero hacerlo, estoy nerviosa pero quiero hacerlo- me vuelve a besar y me hace sentarme encima de él con mis piernas a sus costados, sigo besándolo pero ahora con mas intensidad, lo deseo tanto, en ese momento toma la camiseta por lo bajo y la sube para quitármela, traigo ropa interior no iba a salir sin nada a cenar así que traigo sostén, pero es uno de los que estaba en mi maleta rosa, es un sostén muy lindo rosa claro, al momento me da vergüenza pero me toma del cuello de una forma tan dominante que lo olvido; mi pecho sube y baja de lo agitada que estoy bajo mis manos a su camiseta para quitársela, se deja y la aviento a no se donde, ahora estamos iguales; después de besos y carisias en un movimiento suave me levanta y ya estoy de espaldas en la cama, me doy cuenta de que el cuarto es obscuro y estamos en la habitación de la mas maravillosa vista a la playa, cuando regreso a lo interesante lo veo bajar sus besos a mi cuello, mi pecho, mi estomago hasta que llega al short rosa levanta la mirada y me sonríe de lado, eso me provoca mas y con ese gesto no duda y baja el short sin la pataleta, mientras baja el short sigue bajando sus besos a mis piernas y por ultimo a mis pies, de pronto se levanta muy rápido.
-¿que paso?- ¿Qué esta mal?, ¿ya no quiere?
-tenemos un problema, no tenemos protección no quiero provocar algo- ¡ashhh!, que frustración, ¿ahora que hacemos?, pero recuerdo las burlas de Samanta y Roxana, acerca de tener relaciones.
-podrías pasarme mi bolso que esta en la otra habitación?- me siento en la orilla de la cama y lo veo hacer un gesto de frustración. Llega con mi bolso de tela y busco lo que me interesa, saco una tira de condones son unos 4.
- Samanta y Roxana los guardan en mi bolso, se burlan que nunca hago nada de esto y también lo hacen por si algún día mi mamá los encuentra, querían que les dijera la cara que puso- me toma la cara y me sonríe.
- bonita, esto no debe de avergonzare y por esto podremos tener la mejor noche- me besa de nuevo.
Seguimos con los besos y las caricias, que siguen mas intensas, me voltea para quedar encima de el ahora ya solo traer bóxer, donde es evidente la excitación, ahora yo logro sentirlo, me observa desde la cama y yo me llevo la mano a mi boca para jugar con mi labio.
- me encantas y hoy vas a ser mía- me toma de la cintura para echarme para atrás y es cuando me quita el sostén, pega su pecho con el mío, es el mejor toque que he sentido, me besa hasta bajar de nuevo los besos a mis pecho hasta quitarme mis pantis; cada uno de sus toques me enloquece, seguimos así asta que sucede; me hace el amor.