Un día en la vida del único niño Xiyuan

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"Príncipe..."

Jing Qi escuchó a Ashinlae llamar a la puerta de su habitación y la de Wuxi. "¿Sí?".

Rápidamente terminó de vestirse y tomó la primera cinta que encontró colgada junto al espejo del tocador de madera. Se ató el cabello en un peinado medio recogido con una de las muchas cintas negras de Wuxi. Abrió la puerta y rápidamente dijo: "Ya no es 'Príncipe'. No en esta tierra. Pero puedes llamarme " Señor " o incluso " Maestro ", se encogió de hombros y luego siguió rápidamente: "¿Qué pasa, Ashinlae?".

"Disculpas, Ma-- Maestro".

Jing Qi suspiró. Pensó: 'Incluso el Maestro suena un poco raro. Ya no soy un oficial de la dinastía y no soy yo quien te ha empleado. Ahora sólo soy un vagabundo cuyas propiedades ni siquiera figuran bajo su propio nombre. Diablos, incluso solo "Beiyuan" está bien, si tu Gran Chamán con temperamento de burro está dispuesto a no degollar a su propio miembro del clan por un asunto tan trivial. Salió de sus pensamientos.

"¿Qué pasa?".

"Emm, el joven chamán--".

Beiyuan se apresuró a salir de su casa. Ashinlae estaba a punto de desatar sus caballos, pero el consorte del chamán decidió correr hacia la escuela del heredero-aprendiz. El asistente guerrero lo siguió a pie, de todos modos, la escuela estaba a solo dos calles de distancia.

"¿Dónde está WuXi?", Preguntó Beiyuan mientras corrían.

"El Gran Chamán fue llamado por los ancianos".

"Ah". Era la temporada de operaciones y su pobre "pequeña toxina" había estado terriblemente ocupada. Le gustaba tener más tiempo para jugar con su hijo, pero había notado que su esposo había estado tan preocupado por los asuntos del gobierno de Nanjiang que lo estaba molestando cada vez menos en estos días.

Estaba empezando a extrañar el monótono regaño del hombre, aunque en realidad, sólo había disminuido en un veinte por ciento. Pero, para Beiyuan y Wuxi, la más mínima diferencia en el comportamiento de sus parejas es suficiente para causar una alarma emocional. Ambos tienen un historial de ignorar sus propias necesidades por el bien de otra persona.

En estas noches sucesivas, el que tiene que recordarle al otro que cene a tiempo es Jing Qi, y eso en sí mismo es suficiente para hacer que el príncipe, aparentemente indiferente, desencadene su lado sobre analítico.

Beiyuan llegó al salón de clases lleno de niños pequeños de 4 a 5 años. En la esquina de la habitación, se escuchaban los lamentos de cinco niños y dos niñas, sus brazos y sus rostros regordetes estaban llenos de manchas azules.

Contuvo el aliento mientras caminaba hacia su dirección. A un lado, un chico de ojos grandes y cabello trenzado de la misma manera que el Gran Chamán le tiraba de la manga.

"Papá, les dije que aún no tengo el antídoto, ¡pero querían tocar la rana!".

"Sr. Lu Ta. ¿Conoce los efectos secundarios de entrar en contacto con las secreciones de esta rana?".

Lu Ta miró hacia arriba cuando la rana azul saltó sobre su cabeza. Dirigió sus grandes ojos a su padre. "Viruela azul". La rana siguió saltando por la habitación.

Beiyuan levantó una ceja. Si los niños están lo suficientemente sanos como para gemir tan fuerte, seguramente lo que sea que les pasó no podría ser tan letal. Pero no puede simplemente llamar a un médico de Nanjiang al azar para esto, si la noticia de que su joven chamán se porta tan mal a una edad tan temprana se difundía, el problema puede señalarse en la crianza del niño por parte de WuXi y él.

UN DÍA EN LA VIDA DEL ÚNICO NIÑO XIYUAN @rivercurrents - Xiyuan. Traducción AO3Donde viven las historias. Descúbrelo ahora