PERDIDA

Capitulo 1

Derrepente abrí los ojos y descubrí que todo había sido solo un sueño, veía borroso asique no conseguía distinguir a quien tenia delante de mi cama.

-Rosse, ¿cariño estás bien?-Su voz me lo aclaró todo, era mi madre.

Agité la cabeza para dar señales de que sí, en efecto, estaba bien, me froté los ojos y me levanté de la cama.Tenía todo el pijama bañado en sudor de la pesadilla. Me cogí mi toalla y me duché, mientras tanto, pensé en esa pesadilla tan rara. ¿Quién era ese hombre, por qué Julio estaba allí, por qué nos perseguía?

Cuando me acordé de Julio salí de la ducha, me vestí con una blusa blanca y unos vaqueros negros y bajé las escaleras hasta la cocina, la respiración se me entrecortaba. Pero allí estaba, con su pelo castaño y revuelto y con esos ojos verdes que penetran a cualquiera.

Se volvió hacia mi y me sonrió con la boca huntada de nutella, yo le devolví la sonrisa y le dí un beso en la mejilla mientras cogía una tostada y salía de casa.

Mientras esperaba afuera a que mis amigas de la universidad me recogiesen, miré el movil por si tenía algunas llamadas y si que tenía, pero de un número privado.

Oí un claxon que me sacó de mis pensamientos  y me dirigí al coche, al entrar dí 3 besos a mis chicas. Mery, Susan y Cris. De camino a la universidad ellas iban hablando de Louis, el tío más cañón de la universidad  cuando derrepente me acordé de algo muy importante y solté:

-¡¡Mierda!!- Las chicas me miraron derrepente.

-¡¡Es el cumpleaños de mi hermanito y no le e comprado nada tías!!-Respondí yo nerviosa.

-¡¿De Julio?!-Respondieron ellas al unisomnio.

-Sí- Asentí yo mientras me encogía.

Cris, que iba conduciendo me dijo : - Hey, Rosse tranquila, es Viernes nos saltamos la universidad y vamos a por el regalo- Yo asentí y le dí las gracias.

Dimos media vuelta y nos fuimos al centro comercial, al llegar nos paramos a pensar que querría Julio asique pensamos en lo que querría un niño de 13 años, nos dividimos en dos grupos de 2 y nos fuimos a comprar.