—¡Ah! —El muchacho más joven respiró y ni siquiera reconoció su propia voz porque era alta y temblorosa.
Minho le dio un golpecito a la mejilla de Jisung con su nariz, para que Jisung moviera la cabeza hacia el otro lado del cuello de Minho. Tan pronto como lo hizo, Minho apretó sus labios contra la piel caliente de Jisung, justo donde el cuello se encontraba con su hombro. Y entonces empezó a chupar, morder y lamer, una y otra vez.
La mezcla entre las frotaciones de Minho y la atención que le daba al cuello de Jisung, lo envió sobre el borde, gimiendo "Minho" en el cuello al irse en sus calzoncillos Armani.
Mientras se calmaba, Minho se mantuvo chupando su cuello y acariciando su espalda, y con la otra mano su culo.
—Lo siento —Dijo Jisung y Minho se alejó del cuello de Jisung.
— ¿Por qué?
—Por... eh. Por no durar tanto.
—Está bien, es normal para un virgen.
Jisung se sonrojó y se sentó, así que ahora estaba a horcajadas sobre el pecho de Minho, sintiendo su polla en sus pantalones vaqueros.
—En serio, está bien —Minho le aseguró y le palmeó el trasero una vez antes de rodar a Jisung fuera para que pudiera ponerse de pie.
— ¿A dónde vas? —Preguntó Jisung.
—A terminar con esto al baño.
—Oh. No dejes un lío.
—No lo haré.
Jisung trató de bloquear los gemidos procedentes del baño mientras se subía la cremallera de sus pantalones y entrelazaba sus tirantes por la espalda. Se abotonó la camisa y se pasó una mano por el pelo, todavía respirando con dificultad a causa de lo que acababa de suceder.
Sus calzoncillos se sentían pegajosos, pero sabía que tenía que lidiar con eso durante dos horas más hasta que todos se fueran. Minho salió del baño dos minutos más tarde y sus ojos se posaron en el cuello de Jisung.
— ¿Qué? —Preguntó Jisung.
—Es posible que quieras tapar eso.
— ¿Por qué?
Minho señaló el espejo y Jisung se levantó para ir a verse a sí mismo. Dejó escapar un ruido raro cuando vio un gran moretón donde Minho había aspirado anteriormente, que se fue convirtiendo poco a poco de rojo oscuro a púrpura.
— ¿Qué es eso?
—Un chupetón.
— ¿Me marcaste? ¿Cuándo va a desaparecer?
—En unos dos o tres días. Cuatro, probablemente.
— ¿Qué? ¿Qué pasa si alguien lo ve?
—Diles que te quemaste o algo así. Tranquilo, tápalo y nadie se dará cuenta.
Jisung lo hizo, y para su suerte, no se veía. Volvieron a la planta baja y la gente todavía estaba bailando y bebiendo, así que se las arreglaron para pasar desapercibidos.
La gente empezó a salir alrededor de la medianoche, dándole las gracias por la fiesta y pidiendo otra igual pronto.Changbin, Hyunjin y Minho fueron los últimos en salir. Jisung y Jiwoo los llevaron a la puerta, y Jiwoo les dio las gracias por asistir antes de invitarlos a la iglesia el domingo (todos sabían que ninguno de los tres irían, pero la cortaron rápido ya que no encontraban las palabras adecuadas para decirles que no), Minho se inclinó para susurrarle al oído a Jisung.
—Pronto, Dios no va a ser el único chico que te ponga de rodillas.
Jisung miró su espalda hasta que desaparecieron detrás de las puertas automáticas. Jiwoo estaba sonriendo alegremente hacia él y se acercó para darle un beso, antes de pedirle que fueran a la cama y dejaran que las criadas limpiaran.
ESTÁS LEYENDO
Bebé El Cielo Está En Tus Ojos [Minsung] Adaptación
FanfictionMinho es el chico malo y jodido con demasiados problemas. Jisung es el niño rico, perfecto y con demasiado dinero. Sus escuelas están justo en frente. Se reúnen en una fiesta y eso es lo último y tal vez lo único que necesitan. ★ Historia terminada...