Hasta que el sol regrese

1K 221 20
                                    

🌞

Namjoon y yo tenemos una historia bastante compleja.

Estamos juntos un mes y al siguiente ya no, a veces sentimos que nos amamos y luego ya no, por momentos disfruto estar en sus brazos y después solo lo quiero lejos. Nos hacemos mucho daño, pero al mismo tiempo, es difícil visualizarnos separados, eso duele mucho más.


Por eso, mientras lo observo tomar sorbos pequeños de su café mientras mira a su alrededor, tan distante y casi aburrido, yo decido que el cielo oscuro del mediodía en esta época de Alaska es maravilloso, a él le encanta pasar el año nuevo aquí y es la primera vez que ha querido traerme.


Pero como he dicho, yo tomé una decisión, en realidad tomé muchas y entre ellas la de dejarlo definitivamente.

—Entiendes que esto no tiene futuro ¿verdad?

—Desde el inicio lo sabíamos y hemos conversado tantas veces sobre lo mismo que empieza a ser agotador— deja de mirar por la ventana y por primera vez desde hace mucho, se centra en mi— ¿Quieres dejarlo? ¿De eso se trata?

—Creo que es lo mejor.

Suspira.

—Yo no deseo dejarlo.

—No he dicho que yo quiera, he dicho que es lo mejor que podemos hacer.

—¿Lo mejor para quién?

—Para ambos.

—¿Asumes que dejar de vernos será la solución al embrollo tan grande que somos? —niega— Esto tiene una solución tan fácil y menos drástica, que la idea de dejarnos es ridícula a su lado.

—¿Y qué sugieres? ¿Qué yo sea más romántica y tú más atento?

—No sé tú, pero yo si puedo intentarlo— su café se ha enfriado y por eso lo ha dejado en el olvido, sus dedos tamborilean sobre la mesa y no me mira más, no sé si por vergüenza o porque está enojado— yo no puedo verme a mí mismo con alguien que no seas tú, en este punto de mi vida es simplemente inaceptable que no figures en ella. Por eso te he traído conmigo hasta aquí, porque quiero intentarlo enserio esta ocasión, pero entonces estás diciéndome que quieres terminar y yo no sé cómo puede siquiera cruzarte por la cabeza que puedes decidir lo que es mejor para mí.

Le observo anonadada, sin creer que palabras de esa magnitud han salido de su boca, incluso siento mis manos temblar y mi corazón queriendo salirse de mi pecho, trago saliva porque fue tan inesperado que no sé ni cómo reaccionar.

—Honestamente, no sé qué decirte, nunca habías mostrado interés alguno en mejorar nuestro intento de relación, nunca te gustó el rumbo estable que tomaba por momentos y jamás me detuviste cuando terminábamos por estar hartos del otro, entonces, ahora me dices que quieres intentarlo y yo simplemente no tengo idea de cómo debería responder— no sé si darle más oportunidades a esto— yo te quiero, Namjoon, pero también estoy cansada y quiero algo real, que dure y no me agote.

—Tú no me quieres, ese sentimiento es demasiado simple, esto va más allá de un simple querer, además, ¿Qué importa si somos desastrosos?
Funcionamos mejor cuando no lo pensamos tanto, cuando no le damos un titulo a cada jodida cosa.

—Me gustan los títulos, Namjoon ¿Okey? Me gusta darle un nombre, un significado a cada cosa, me gusta decir que tengo un novio, que lo amo, decir su nombre, hablarles acerca de él y lo mucho que me encanta, me gustan esas jodidas cosas y a ti no te gustan.

Se muerde el interior de la mejilla izquierda, entrelaza sus manos sobre la mesa y me observa.

—Entonces puedo ceder un poco ante eso.

—No lo harías.

—Lo haría, joder que puedo hacerlo, si tanto te gusta, yo puedo ceder. Dale todos los malditos títulos que quieras a nuestra relación, presúmeme con tus amistades, familia, con quien quieras, hazlo con libertad y con la seguridad de que al final del día no será un problema.

—Suena demasiado bueno para ser verdad. Tú no eres así de condescendiente con nada.

—Si yo puedo ceder ante cosas pequeñas, tú igual.

—Sigo pensando que perderemos el tiempo, mucho más tiempo. Solo... déjame irme, por la paz, no intentemos más y no prometamos cosas que no se cumplirán. Estoy harta.

Me levanto y salgo del local, unas tremendas ganas de llorar me atacan y golpeo mi pecho con mi mano como si sirviera para mantenerlo dentro, me detengo a medio camino, aún estoy cerca de la cafetería y levanto la vista al cielo, tan oscuro, no recuerdo por cuánto tiempo permanecerá así, creo que todo el mes de diciembre, ojalá no sea más que eso, porque se siente como una noche eterna.


De nuevo la colonia de Namjoon me invade y mi vista cae al suelo, veo sus botas posicionarse a mi lado, embarrándose de nieve, también lo escucho suspirar y su mano toma mi cintura, acercándome a él y apretando allí.

—Dame una oportunidad más— pide— estamos en Alaska, que sea hasta que el sol regrese.

Resoplo una risa, girándome para verlo, debo mirar hacia arriba pues resulta ser más alto que yo, es una de sus cualidades más atractivas, todo él es hermoso en miles de formas, que es imposible negarle esa petición. Soy tan patética, tan débil.


Acuna mi rostro en sus manos, sus pulgares acarician mis mejillas y su aliento choca y se mezcla con el mío antes de conectar ambas bocas, entonces de nuevo estoy disfrutando dichosa de sus carnosos labios y su traviesa lengua buscando la mía, oficialmente he vuelto a caer.


Ojalá que todo mejore para cuando el sol regrese.






🎉 Has terminado de leer ʜᴀsᴛᴀ ǫᴜᴇ ᴇʟ sᴏʟ ʀᴇɢʀᴇsᴇ❝ɴᴀᴍᴊᴏᴏɴ 🎉
ʜᴀsᴛᴀ ǫᴜᴇ ᴇʟ sᴏʟ ʀᴇɢʀᴇsᴇ❝ɴᴀᴍᴊᴏᴏɴDonde viven las historias. Descúbrelo ahora