Lo supe desde que te vi

Capítulo 24.-

Capítulo 24.-
No te voy a perder, morenita

Mar no podía dejar de leer ese artículo y mucho menos podía dejar de ver la foto del beso en el que Julio e Isabella fueron protagonistas, Alejandra se esforzaba mucho en decirle que esa foto era vieja pero ella sabía que no era así.

Se sentía muy traicionada.

Ni siquiera sabía que Julio se había visto con la chica.

No quería creer en la traición de un chico que hasta ese momento se había esforzado en demostrarle que la amaba, tenía un sabor muy agrío en la boca.

— Me niego a pensar que Julio te traicionó de esa forma — dijo Alejandra mientras negaba una y otra vez — yo pienso que debes de hablar con el, esa foto debe de ser vieja.

— Deja de engañarte, Ale — Mar dejó salir un suspiro largo — Julio tiene el cabello en esa foto justo como lo tiene ahorita.

— Mar...

— Dejemos de hablar del tema, vamos a desayunar, mi mamá ya debe de tener listo el desayuno.

Alejandra suspiró y se puso de pie siguiendo a su amiga, ambas intentaron estar animadas durante el desayuno, para que la madre de Mar no hiciera preguntas al respecto, aunque era demasiado notorio que Mar estaba muy triste.

Llamada Julio ♥️

Mar suspiro y se apresuro en voltear el celular y quitarle el sonido, sin embargo, Alejandra si alcanzó a mirar quien era el que hablaba a su amiga.

— Unas amigas me invitaron a tomar un café — dijo la señora mientras terminaba de recoger los platos sucios del desayuno — ¿estarán bien si salgo unas horas?

— Si, tía, nos quedaremos viendo series.

— Si, mamá, vete tranquila.

Luego de despedirse de ambas, la madre de Mar salió de la casa, dejando a las dos chicas solas.

Llamada Julio ♥️

Las llamadas de Julio eran constantes, pero Mar se negaba a responderle.

— Creo que es algo obvio que si no le respondo a las primeras veinte llamadas, quiere decir que no tengo nada de ganas de escucharlo — masculló enojada, dejando el celular de lado.

— Mar, habla con Julio, no saques conclusiones, es tu novio y...

— No, cariño, ya no somos novios.

No espero a que Alejandra dijera algo más y se puso de pie, caminando hasta el baño bastante enojada. El teléfono sonó nuevamente y esta vez Alejandra no tuvo el corazón de dejarlo sonar.

— Morenita...

— No soy Mar, Julio — respondió Alejandra — ella no quiere hablar contigo.

— Necesito explicarle, esas fotos fueron sacadas de contexto y no...

— No se que decirte, Julio, ella está bañándose, decidí responderte porque me da mucha pena que estes marcando y ella no te responda — explicó la chica tranquilamente — dale un poco de tiempo, ella esta muy enojada ahora.

Julio dejo salir un suspiró.

— No quiero perderla por un estúpido rumor.

— Confiemos en que pronto se le pase el enojo y puedan hablar.

— Puedes decirle que la amo — pidió Julio desganado — más que a nada.

Alejandra se sintió culpable, deseaba poder hacer entrar en razón a su amiga, pero cuando ella estaba enojada era muy difícil dialogar con ella.