Solsticios y equinoccios: Millie

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Durante su vida como mortal había escuchado muchas historias de como las malas personas sufrían en la eternidad en lo más profundo de los Infiernos, pintándoles ese lugar como oscuro, intimidante y aterrador... Y una vida de malos tratos y servidumbre le mostró en realidad que las malas personas parecían salirse con la suya, simplemente yendo al párroco de la iglesia para confesarse y salir de allí para seguir tratándoles a ella y a su familia como seres inferiores por el color su piel; Y mientras ellos rezaban en el suelo de la cocina, los amos iban a la congregación con sus mejores ropas, siempre cerrándoles la puerta en la cara.

...Este 'despertar' en el Infierno ahora como un ser de la oscuridad fue, tal y como le dijeron, algo intimidante y aterrador.

Las descripciones que había oído a hurtadillas sobre el "Lago de fuego y azufre" fueron muy imprecisas: Sí, había un lago de fuego y azufre... millares de ellos repartidos en un enorme mundo subterráneo lleno de horribles criaturas de toda clase, todo salpicado de colores rojizos y oscuros. Habría estado totalmente aterrada y devastada de estar por toda la eternidad en ese lugar si no fuera por... Su guía, su amigo, antiguo familiar y ahora compañero, Moxxie.

Aún después de todo lo que sucedió y la forma tan atroz en la que murió, Millie siempre vería el haberse tropezado con el demonio como una bendición y también su liberación... Y ahora convertida en su igual, gracias a algún gesto 'misericordioso' de alguna fuerza superior que vio que ella no podía quedarse sola en esta nueva vida, al fin podía dar rienda suelta a sus deseos y sentimientos que habían empezado a germinar en su corazón cual oscuras y retorcidas raíces desde que era humana.

Como Virgilio al escritor Dante en su viaje por el Infierno, Moxxie fue su acompañante por los caminos oscuros del Abismo, siempre sosteniendo su mano y sonriéndole para hacerla sentir bien, guiándola por el reino donde estaría de ahora en más, mostrándole muchos de sus lugares favoritos y que eran bellos a su propia manera infernal, desde el Ante-Infierno hasta el Cócito. Millie llegó a disfrutar esta travesía, porque aparte de conocer diferentes lugares de los que se estaba acostumbrando y hasta empezado a gustarle, su compañero siempre estaba allí.

Algo que a la ahora diablilla le había encantado era que podían ir a la Tierra a través de las grietas de las profundas cuevas o desde las raíces de un árbol seco, jadeando de alegría al sentir los rayos del sol vislumbrándose entre el toldo verde que se extendía sobre sus cabezas. Porque si bien encontraba muy interesante el Infierno, aún le gustaba salir a la superficie, y cuanto más aislada fuera, mejor. El mismo Moxxie le decía que muchos demonios preferían estar más en la Tierra, no solo para cumplir su 'propósito' de atormentar a los humanos, sino también para estar a salvo de los demonios superiores que trataban a los demás como sus sirvientes y sus juguetes, algo que ella no pudo evitar relacionarlo a cómo la gente de pile oscura era tratada por los aldeanos blancos; Siempre prefiriendo esconderse en el bosque.

Sin duda era lo que más Millie extrañaba de su vida anterior, pues el bosque tenía un olor único, particular y potenciado, nada comparado con los olores de la aldea, desde el acre humo de las fogatas o la mierda que se acumulaba junto a las casas y los callejones; por no hablar de los sonidos también potenciados, nada de gritos de gente desde las calles, sino gritos de pájaros y demás criaturas invisibles que habitaban los árboles... Criaturas que, ahora ella sabía, podían ser otros seres como ellos dos, de pie en medio del pequeño claro donde habían llegado tras salir del Inframundo. Moxxie, a su lado, le sonrió.

—No tardarás en sentir y oír todo muy diferente a como solías hacerlo en tu vida mortal.

Y tenía razón, pues Millie podía sentir como sus sentidos de demonio estaban potenciados con los sonidos más ínfimos, desde un arrendajo cantando a lo lejos hasta el movimiento del agua de un arroyo cercano. No tardó en recoger cosas a su alrededor, mirando y aplastando ramitas y hojas entre sus garras. Comprobando con asombro lo fuerte y grácil que era su pequeño cuerpo carmesí, haciendo profundas marcas de garras en gruesos troncos para luego escalar y saltar hasta lo más alto de un árbol entre risas y diciendo que nunca había escalado un árbol así de rápido antes, con Moxxie mirándola divertido; Una sonriente cabeza invertida emergió de entre las ramas, instando al demonio macho a acompañarle. Así, pronto ambos estuvieron apretujados uno junto al otro en una rama gruesa, mirando el amanecer pintando de dorado sus rostros, así como los primeros brotes: Era Primavera.

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⏰ Última actualización: Mar 05, 2022 ⏰

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The Demon's Season [Helluva Boss]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora