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La herencia maldita perdura. A sangre y fuego; hasta la muerte.

¿Cómo se comienza una historia que aún no tiene fin?

¿Cómo puedes contar los sucesos dolorosos que han pasado?

Ninguno puede evitar no llorar...

Todo va de mal en peor, todo duele y nada quiere sanar, y aunque se quieran hechar la culpa los unos a los otros ¿De que sirve? Eso no va a devolver a tu hija, hermana, amiga... O peor aún eso no va a calmar tu culpa.

YoonGi y JiMin no estuvieron mejor después de la muerte de SoYoon, por el contrario, parase que la muerte de su hija los distancio...

JiMin estaba en completa depresión, para un Omega perder una camada en un parto, o tener un aborto espontáneo es difícil de superar, pero perder un cachorro casi adulto, es casi imposible. Como Omega, su vida gira al rededor de sus crias, los Omegas nacen con el instinto maternal, listos para amar y proteger y sentir que ese instinto desaparece con la muerte de un hijo, conlleva a el Omega a morir de pena moral. Y ese era el caso de JiMin, estaba casi que al borde de cometer una locura.

Por otro lado YoonGi llevaba su dolor de diferente manera, se sumergía en el alcohol y volver a beber en bares lujosos era su punto de distracción de un Omega depresivo rechazando a sus hijos, una cachorra llorona y un adolescente hormonal con su mismo carácter, sin hablar de su hijo mayor al borde de la muerte.

Y si, en esto se habían convertido los Min en unas pocas semanas, ¿Dónde estaba la familia unida? Párese que SoYoon se la había llevado con su muerte.

YoonGi y JiMin parecían no soportase más.

— con una mierda, JiMin, ¡¡la cachorra necesita de ti!!.— grito YoonGi furioso.

La cachorra lloraba por hambre, YoonGi había intentado darle el biberón, una de las amas de llaves había intentado darle pecho, pero nada funcionaba, la pequeña cachorra lloraba por la atención de su padre omega, quería ser amamantada y compartir ese vínculo de calma que solo su papá podía darle.

— es... es que no puedo Yoo...

— ¡¡Cómo mierda no vas a poder!!.— el alfa hablo con voz furiosa mientras mesia a la cachorra en su pecho.— ¡¿La dejaras morir de hambre?! ¡A ella también la dejaras mo...

No había discusión que no terminara de esta forma, siempre hechandose la culpa de quien había dejado morir a SoYoon, de quién puedo a verla ayudado, o aconsejado bien.

— ¡¡Que dices!! ¡¡Cierra la maldita boca!!.— chillo el Omega furioso.— DAME A MI CACHORRA Y LÁRGATE.

— ¡ESO ES LO QUE QUIERO HACER DESDE ESTA PUTA MAÑANA!.— grito YoonGi dejando a la pequeña sobre la cama llorando y saliendo de la habitación.

¿Cómo llegaron a este punto?

¿Que paso con el; en las buenas y en las malas? Sencillo, cada uno está lidiando con su luto a su manera, cada uno está dejando actuar a su lado primitivo sin pensar en el otro o peor aún en su familia.

SoYoon estaba muerta, SonJi estaba en el hospital sin mejoría ¿Cómo no sentirse mal? Sus hijos mayores, no estaban bien, uno muerto y el otro al parecer en poco tiempo lo estaría, ¿Cómo se supera eso?.

No lo haces... Tienes que aprender a vivir con ello, pero ¿Cómo se hace algo así?.

— padre por favor, no dejes a papá solo.— hablo YoonJi mientras veía a YoonGi bajar por las escaleras listo para irse.

— joder!!.— exclamo YoonGi viendo a su hijo.— yo no... no puedo estar cerca a tu papá ahora mismo, volveré más tarde.

— padre!!.

Hijo de la mafia M.Y'G  P.J'MDonde viven las historias. Descúbrelo ahora