Capítulo 16.

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-Entonces... ¿Has decidido firmar?

-Si.

Mi compañera Victoria se miraba al espejo del vestidor, su uniforme era mas atrevido que el mio y eso por que ella misma se había encargado de ello "Es para atraer mas clientes" decía ella cada vez que le preguntaba el porque, por alguna razón las mujeres que conozco visten así, incluso la de la librería. No puedo quejarme, al menos conozco a alguien.

Salimos del vestidor y nos quedamos heladas al ver que la cafetería estaba completamente llena, cada silla de cada mesa e incluso las de la barra estaban habitadas, si, hoy definitivamente terminaremos agotadas por completo y mas por que solo éramos ella y yo, ya que las demás habían pedido el día libre, así que descansaré los siguientes dos días ¡Genial!

***8 horas después***

-Ahg esto es horrible -Dijo Victoria completamente agotada-, pero, la verdad no importa la fiesta sigue -Dijo emocionada comenzando a desvestirse-, ahora uno de los clientes del café me invitó, y era totalmente apuesto, ahora esta esperando fuera del local.

-¿Cómo vas a salir con alguien a quien apenas conoces? -Yo ya me había vestido , y la miraba sorprendida, jamás pensé que hiciera cosas como esas-.

-Tranquila, no es la primera vez que lo hago además, se muy bien cómo cuidarme sola.

-Pero no sabes con lo que puedes encontrarte -Dije acercándome a ella intentando convencerla-.

-Vasta, te quiero -Tocó mi nariz con su de do índice y salio de ahí-.

Grandioso, esta ,mujer es un caos completo. Rodé los ojos y salí de ahí dejando a mi jefa sola y cuando salí me encontré con mi compañera besando a un tipo el cual me notó y se alejó de ella para mirarme fijamente mientras que ella aun estaba colgada a su cuello, hice caso omiso a ello y seguí mi camino hasta mi departamento recordando cada característica de aquel hombre, era tan extraño, demasiado diría yo.

Mañana sería el día en el que me encontraría al licenciado para firmar los papeles y hacer el acuerdo, me sentía nerviosa ya que en menos de una semana sería el recorrido por las carreras de la universidad y al día siguiente, cumpliría mi mayoría de edad, ¿Por qué las cosas tienen que suceder tan rápido?, como sea, no me siento preparada no, no , no.

Abrí la puerta de mi departamento, de tanto pensar se me fue el tiempo y me pareció corto el recorrido, entré al departamento y el estaba sin su usual sudadera secando su rostro, no pude evitar mirarlo, cerré la puerta y dejé mis cosas en mi escritorio para después acercarme a el, quien como siempre sonreía.

-No puedo creer que incluso el resto de tu cuerpo es color blanco, pálido -Dije tocando su abdomen, lo cual no se por qué hice-.

-Bueno, si mal no recuerdo te comenté que no soy humano, no soy así por que quiero, es como tu piel, tu no quisiste que fuera de ese color.
-Si pero... Es genial -Deslice mi mano a su cuello y de ahí al perfecto corte que tenia en el rostro, entonces sentí un impulso, pero me contube y el sonrió. Se agacho hasta quedar a mi altura y tomo mi cintura para acercarme a el.
-Nena, ¿Quieres averiguar de que color es el resto de mi cuerpo? -Abrí mis ojos a tope y lo empuje para después ir al baño mientras el reía a carcajadas (Si con su risa de loco maniático), lo cual me hizo recordar aquel día.
-Jeff -Dije sosteniendo la puerta del baño con una de mis manos y volteando mi rostro hacia el-, aquello... No volverá a suceder ¿Verdad?
-Nena -Se acercó lentamente hasta quedar detrás mio, tomó mi mano libre y la beso-, ahora, tu eres mi vida y no me perdonaria que nada te sucediera, te amo y haré todo lo posible por que aquello no se vuelva a repetir.
*****
Llegue al café ya algo tarde escuchando en mi mente la chillona voz de mi jefa renegando y dándome el ya conocido discurso sobre la formación de un ser y bla bla bla.
Lo extraño fue que en el cartel que solemos poner con pizarron en la puerta decía cerrado, entré y vi a varios oficiales platicando con la jefa quien tenia lágrimas en sus ojos, me regrese para ver por el cristal y efectivamente había varios autos de policía rodeando el lugar, camine hacia ellos para escuchar.
-Este ya es el séptimo caso que tenemos sobre desapariciones de chicas como Victoria que se han dado en los últimos 10 días, aun no encontramos la causa pero, todas las chicas concuerdan -Dijo el oficial-.
-¿Disculpe? -Dijo mi jefa a lo que el oficial asintió-.
-Así es señorita, todas las chicas cumplen con las misma características físicas, ¿Ustedes no tienen alguna información sobre lo ocurrido? -Me puse a pensar en lo que sucedió ayer, así que decidí decirlo al oficial-.
-Bueno, anoche, ella conoció a un muchacho en el local, y de hecho al terminar su turno, salió con el -El oficial asentía mientras anotaba-.
-Disculpa, ¿Podrías describirlo?
-Bueno, no fue mucho lo que le vi, pero pude notar que su cabello era café iluminado, su piel era blanca, sus ojos no los vi pero en su sonrisa había algo extraño...
-¿Puede usted describirlo? -Negué, en realidad no lo sabia-.
-Lo siento, no le puse mucha atención.
-¿Y su atuendo, lo vio?
-Mmm -Pensé, pensé y pensé buscando en lo mas profundo de mi mente y si, ahí estaba-, llevaba una camisa a cuadros y sobre ella una sudadera color tinto y... Es todo, lo siento, no recuerdo más.
-Esta bien señorita, bueno, cualquier CISA, nosotros vendremos a con ustedes, amm, ¿Podrían proporcionarnos sus números telefónicos?
-Claro.
Ya que los oficiales se habían ido la jefa decidió cerrar el lugar un tiempo ya que no quería que nosotras corrieramos un riesgo pero que nos mantendría informadas, bueno, al menos descansare un tiempo.

Esto es sobre nosotros (Jeff the killer y tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora