volvé pronto

Ella

Me estaba despertando, pero sentí algo raro, escuche llantos y voces quebradas, sentí un escalofrío en mi cuerpo que inmediatamente dio a entender a mi mente que algo no estaba bien. Me levanto, y los veo en el sillón con los ojos hinchados de tanto llorar, ya lo sabía, pero no lo quería asimilar,  ya entendía que había pasado, pero igual pregunte:

- ¿Qué pasó? ¿todo bien

- No - fue su respuesta, mientras me respondía vi en sus ojos mucha tristeza, pero más que nada cansancio, y decepción, pero decepción por ella misma.

Lo miro a él y tenia lagrimas en sus ojos, no me pudo decir una palabra, solo con su mirada entendí lo arrepentido que estaba y lo triste que se sentía de yo me enterara.

- ¿Tenía plata? - fue la pregunta que me salió decir

- Sí - responde ella

- Me voy a bañar

No se me ocurría qué decir ni que hacer, había salido la noche anterior y volví tarde, no tenía los pensamientos tan lucidos así que me bañe, me pasa que con el agua reflexiono y me calma, no se si será porque tengo predominio de signos de agua en mi carta astral, pero siento que el agua me saca las malas energías y me renueva. ¿Qué hago ahora? no llore, no me salió, sentí que ya lo tenía mentalmente asimilado y que largando lágrimas no iba a cambiar nada, no sabía si hacerme la enojada y no hablarle nunca más o salir corriendo a abrazarlo. Pero entendí, o trate de entender que si yo me siento enojada, triste, decepcionada no me puedo imaginar con la intensidad que lo debe sentir el, si yo me siento mal no me imagino el, no me imagino que tan solo y vacío se debió sentir cuando decidió hacer lo que hizo, siendo que ya llevaba meses limpio, pero lo hizo, algo lo llevo a hacerlo y sintió que ese vacío que tenia solo lo podía llenar una cosa. Pero el vacío no se le llenó, sino que se hizo más profundo, porque en vez de remediar su dolor, abrió de vuelta todas sus cicatrices y siguió hiriendo a quienes más quería y ese sentimiento es mayor a cualquier otro que yo sienta en este momento.

Salí de la ducha y seguía pensando, y atiné por mi segunda opción, fui y lo abracé, él me devolvió el abrazo y con mi pecho en su cara sentía como me mojaban las lágrimas que caían de sus ojos, sentí también cómo el pecho se le agitaba. Luego de unos minutos me senté al lado de él, y al lado de ella. Me dio mas tristeza la cara de ella, no sabia que hacer para poder aliviar su dolor, el dolor de una madre que siente que tiene la culpa o es responsable de los problemas, traumas, adicciones de su hijo. Pensando siempre que si ella se hubiese dado cuenta antes podría cambiar algo, podría ayudarlo, pero cómo sacarle esta oscuridad a alguien si sus luces siguen apagadas, si él mismo no ve un rayo de luz que le de esperanza.

La abrace a ella también, le seguían temblando las manos, quería transmitirle fe de que todo iba a mejorar, de que todo iba a estar bien , pero se me hizo difícil cuando ni yo lo puedo creer. No lloré, no sé si porque sigo en shock o porque no entiendo todavía el grado de gravedad, pero no sabia como actuar o que decir, solo intente estar ahí para ella, porque es la que se muestra más vulnerable y la que más miedo me da perder.

El día siguió normal, es como esos días lluviosos que se nubla todo el cielo, pero deja de llover y queda el día gris. Bueno así, paso la lluvia que fue la mala noticia, y luego de tanta agua y lagrimas, el día quedo gris, amargo, porque ya había llovido y todos ya sabíamos que le había recaído.

Almorzamos todos juntos en silencio, no sabía de qué hablar, yo solo quería explicación y estas no iban a llegar nunca, intente hacer un comentario de algo que estaba pasando en la tele, pero no me salió decirlo en voz alta. Terminamos y cada uno se fue a su cuarto, ella era la que seguía más apagada, le hice señas para que venga a mi cuarto, quería que me contara y que se ahogara, capaz eso la aliviaba.

- ¿Quieres que te cuente? - me dijo susurrando para que el no escuchara

- Si no te hace mal recordarlo, me gustaría saber que paso

- Fue ayer a las 6 de la mañana, no lo escuche llegar, yo ayer ya lo había visto raro, pero confié, ahora me echo la culpa, capaz si le hubiese dicho algo capaz el no lo hacía

- No te eches la culpa, no hay un culpable ni nadie que tenga que asumirlo, ahora hay que ser más cuidadosos y no confiar tanto, porque ahora ni él puede cambiar en sí mismo

- Ya sé que no es totalmente mi culpa, pero busco un un culpable para que me de la razón de esto, para así capaz entiendo mejor lo que está sucediendo

Un ruido fuerte nos hizo cortar la conversación, fuimos a su cuarto, y seguían sus cosas, pero él ya no estaba.