D O S

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CAPITULO 2

Primer encuentro. 



Es temprano por la mañana cuando el palacio Min se alza frente a él.

A su lado va su hermano mayor, Seokjin, a la izquierda su padre y detrás de él, sus asistentes. Hubiera deseado a su nana a su lado, pero la mujer es anciana y no hubiera soportado el viaje. Tae agradece que pudiera descansar, pero no por eso lloró sobre su pecho sin que su madre le viera, porque un "buen omega nunca llora en público".

El lugar es majestuoso, de techos rojizos y un atrio amplio con una fila de guardias perfectamente uniformados de color negro. Entre las columnas del lugar hay pequeñas banderas de colores, dándole un aspecto más alegre al hogar de una posible bestia.

Tae luce un hanbok blanco con detalles en azul celeste. Su cabello está atado en una coleta, pero ha sido cubierto con un manto azul con detalles en dorado. Su cabeza siempre viendo al piso, aunque ha podido ver las banderas, y a su lado, una asistente con una pequeña sombrilla color rojo. Tienen que caminar el largo pasillo y Tae sólo puede ver las piedras con cada paso. Hasta que siente que su séquito se para, y una voz desconocida habla.

—Con ustedes, su alteza imperial... Min Yoongi.

Taehyung quisiera poder mirar a su futuro marido. No es como que importe tanto su apariencia, pero siempre había sido curioso. Y esa es una de las características que más molestan a su madre. La segunda es que pocas veces puede crear un filtro, entre lo que piensa y dice. Ha recibido demasiados golpes en las manos por hablar de más.

—Alteza, le presento al príncipe, Kim Taehyung.

Tae reconoce la voz de su padre. Y cuando termina el discurso, Tae se inclina hacia el frente. Todavía sin saber dónde está su futuro marido.

Puede escuchar unos pasos firmes, cada vez más cercanos y de pronto detecta un aroma a mandarina y sándalo.

Así es como la realidad cae sobre Tae, y a pesar de no pensar en nada, preparándose para este momento la mayor parte de la vida, ahora que es real, puede sentir un leve temblor en sus rodillas. El pensamiento de dejar atrás su casa y a su nana le causa un estremecimiento en el pecho y por primera vez se asusta. Porque ahora todo se vuelve tangible. Vivirá con un extraño y no hay nada que pueda evitarlo.

Su cuerpo, que aún hace le reverencia se entumece de pronto.

¿Cómo sería la vida sin su nana?

Sus piernas le traicionan y caen, porque no quiere ni siquiera averiguarlo.

Por primera vez quiere algo para sí mismo, y eso es, estar con su nana, con sus hermanos en su casa; recorrer sus jardines y jugar con las ardillas.

No quiere casarse.

Y es la primera vez que lo piensa.

Sus rodillas casi impactan contra las rocas, pero hay unos brazos sosteniéndolo. El aroma a sándalo aumenta y Tae levanta el rostro por primera vez, haciendo que el velo caiga y se revele su cabello negro.

Frente a él está un pálido hombre con una cicatriz lineal que le atraviesa el ojo derecho. Es rojiza y de bordes prominentes, los ojos rasgados son oscuros y el cabello rubio platino está amarrado en un nudo alto.

—Alfa —, susurra, y de pronto el aire falta.

Y Tae cae, su cuerpo inconsciente sobre los brazos del rey.

Mi Alfa Bestia {YOONTAE}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora