¿VOLVER A ENAMORARME?

CAPÍTULO 28 🌶️

REUNIONES

Su cuarto es mas  grande que el mío, con postres en las paredes que se nota que no ha cambiado desde que tenia 10, ya que todos son de marvel y cosas así. La cama es igual de grande a la mía, sus muebles son de color marrón claro y en la esquina de la habitación hay una guitarra y un piano.

Casi todo es gris, algunas cosas azules oscuras y negras. Y tiene una gran cama, un saco de boxeo, un escritorio, un armario... como no.

—Aprendí cuando mi madre murió.— dice al ver que cojo la guitarra.

—No sabia que tocaras...—comentó y él sonríe como fuckboy, se lo que está pensando así que me apresuro a aclarar las cosas—Me refiero a el piano y la guitarra—digo mientras siento el color subir a mis mejillas.

—Lo se, pero si has pensado en lo otro es por que quieres...— dice y me sonrojo aun más, me aclaro la garganta.

—¿Como era?— preguntó cambiando de tema, dejando la guitarra e inspeccionando las fotos enmarcadas que tiene.

Hay una foto donde hay un niño pequeño, un hombre muy parecido a Zack y una mujer hermosa de pelo castaño claro, con una sonrisa hermosa. El niño se ve feliz en medio de ellos con su hermano, en un gran parque... central park.

—No la recuerdo muy bien... y siento que la olvidare...— dice con tono melancólico y le miro.

—Nunca se te olvidará, te lo aseguro. Tú madre donde quiera que esté te estará cuidando, y tu jamas dejarás de pensar en ella, por que el amor de una madre es increíble... aunque yo no sepa como es eso...— le digo y miro la siguiente foto.

En esta solo aparece un  niño de 11 y el otro mayor. Con un señor parecido a Zack, su padre supongo en medio. Ambos sonriendo y con un helado en sus manos, se ven felices..

—Se parece demasiado a ti.— digo señalando a su padre, Zack se a puesto a mis espaldas así que le muestro al foto por encima de mi hombro.

—Era increíble... sabía lo que me pasaba por más que lo intentara ocultar.—

Dejo al foto en la mesa y me doy la vuelta para abrazarle. Hundo mi nariz en su pecho y él me abraza a él como queriéndose fundir a mi.

Tras unos minutos así, el sonido de su móvil nos rompe el momento. Se separa de mi y me da la espalda para coger su móvil.

—Déjame en paz. Ahora no— se coge el puente de la nariz y cierra los ojos. —Ahora voy, tranquilízate.— coge la chaqueta me mira pidiendo perdón le sonrió y le hago señas para que vaya. Me agradece con la mirada y una sonrisa me regala.

—Tranquila, Mia. Tranquilízate ahora hoy— Y desparece cerrando al puerta tras de si.

La sangre se me congela al escuchar el nombre de Mia. Intento apartar ese sentimiento pero no puedo, y me odio por ello.

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Una semana ya ha pasado, y hoy es miércoles, salgo con Zack detrás de mi, nos hemos arreglado y estamos bien, nadie enfadado...estamos más unidos, al menos es lo que yo siento.

—Perdona por los que te dije ayer, es que no me gusta que alguien me controle, seguro el tío ese me vio como un perro que sigue a su ama. Y yo no soy así—dice y me recuerda a ayer.