Amarte A Mi Manera |1|

16: Novios

Niall

Últimamente he estado muy solo. Liam desapareció luego de pedirle a Zayn que se dieran un tiempo y Harry sigue detrás de Louis como siempre. En cuanto a Shawn, él se fue una semana a Canadá para visitar a su familia y desde entonces no he sabido nada de él.

A pesar de la ausencia de Shawn seguí frecuentando la cafetería y pude conocer mejor a Camila. Incluso ella y su novia Lauren me invitaron al cine el otro día y nos la pasamos genial. Y gracias a mi reciente amistad con Camila ella me conto que hoy mismo Shawn regresa.

Apenas supe la noticia corrí a casa para ponerme mis mejores prendas. Quería darle una buena bienvenida. Podría invitarlo a cenar o a caminar por ahí. Si hubiera sabido antes que llegaba hoy le hubiera preparado algo mucho mejor, pero sé que Shawn amara lo que haga. Él es feliz con muy poco y se que si le doy a elegir entre el mundo entero o una caja de muffins será feliz con sus muffins. Esa es una de las cosas que amo de él, su sencillez.

Cuando termino de cambiarme camino hacia el baño y comienzo a pensar que hare con mi cabello. Cuando entiendo que no hay mucho que hacer decido dejarlo como esta. Tomo una chaqueta, mis llaves y mi celular para luego ir hacia la puerta e irme.

Al llegar a la cafetería me detuve un momento en la puerta para tomar aire. No había pasado mucho tiempo desde que Shawn se fue, pero verlo me daba muchos nervios. La alegría de verlo fue más fuerte que mi nerviosismo así que me arme de valor y entre al lugar.

Inmediatamente Camila volteo a verme cuando la campanita de la puerta anuncio mi entrada. Ella me sonrió y me señalo una de las mesas. Allí se encontraba Shawn, pero no estaba solo, un chico de más o menos mi edad lo acompañaba. Ambos reían a carcajadas. Él desconocido abrazaba a Shawn por los hombros.

Me quedo mirando la escena por un momento. No puedo evitar sentir un poco de celos y ni siquiera tengo porque sentirlos.

¿Quién es ese y qué hace abrazando a mi novio?

Bueno no es oficialmente mi novio, pero lo será pronto.

A pasos apresurados me acerco a ellos y me pongo en medio de ambos. Me quedo de brazos cruzados frente a Shawn. Él se pone de pie inmediatamente y me abraza con efusividad. Me relajo y le devuelvo el abrazo con la misma intensidad.

Nuevamente siento que respiro al tenerlo entre mis brazos. Miro al chico que estaba con Shawn y noto que aprieta los puños al vernos.

—¿Qué haces aquí, cariño? —me pregunta besando mis mejillas enrojecidas—. Tenía planeado sorprenderte hoy por eso no te avise que regresaba.

—Cam me aviso y quise venir a sorprenderte —le cuento sin dejar de abrazarlo. Me pongo de puntas de pie y me estiro para robarle un beso. Él me mira sorprendido por mi actitud—. Te extrañe, Shawnie —él sonríe e intenta acercarse a mí, pero se detiene cuando escuchamos un carraspeo.

—Oh, cierto, disculpa —Shawn le dice al chico—. Ni, él es Connor Brashier, mi mejor amigo en Canadá. Connor, él es Niall, mi...

—Soy su novio —respondo por él. Shawn sonríe complacido—. Es un placer —extiendo mi mano a Connor y él la toma de mala gana.

Me siento a un lado de Shawn y él comienza a contarme como fue su visita a Canadá. Al parecer le hablo a su familia sobre mi y ellos le dijeron que están ansiosos por conocerme. Me alegre al escucharlo decir eso. Me encantaría poder decirle lo mismo, pero mis padres jamás me han aceptado así que menos lo aceptaran a él.

Una media hora después Connor se da cuenta de que sobra en nuestra conversación y se va. Aprovecho el momento y le propongo a Shawn salir a caminar. Él acepta y ambos salimos del lugar no sin antes despedirnos de Camila.

—Con que soy tu novio, eh —dice sonriendo. Lo miro avergonzado—. Me hubiera gustado pedírtelo.

—No estamos en una comedia romántica, Shawnie, pero si quieres hacerlo aceptare —le aseguro. Él se arrodilla y toma mi mano—. No exageres, Mendes.

—Niall James Horan —empieza a decir—, ¿me harías el honor de ser tu novio para así poder cuidarte y amarte como lo mereces? —pregunta derritiendo mi corazón. Me arrodillo frente a él y le doy un beso—. No sé si es un si o una hermosa forma de rechazarme, pero no me quejo.

—Es un si —respondo riendo. Él vuelve a besarme—. ¿Ahora podemos irnos, novio?

—Me gusta como suena —murmura poniéndose de pie—. Podemos irnos, novio.

Lo tomo de la mano y comenzamos a caminar.

Siento una calidez en mi pecho que jamás había sentido antes. Me siento feliz, pleno y todo se lo debo a él.

Hace meses atrás estaba en un pozo depresivo del que parecía que no iba a salir jamás. El rechazo de mi familia y mi rompimiento con mí ex novio me dejaron devastado. Llegue a pensar que jamás iba a poder salir a adelante. Por mucho tiempo me sentí mal por no poder compartir buenos momentos con mis amigos y sentirme feliz de verdad, pero ahora las cosas son diferentes. Shawn se encargo de juntar todos los pedacitos de mi corazón y los pego con su amor. Lo mejor de todo es que no tuvo que romperse para arreglarme. Sino que fue algo que hicimos juntos y solo necesitamos querernos y confiar en el otro. Lo que tenemos es muy especial y no puedo arruinarlo.

—Te quiero mucho —suelto de la nada. Él me mira—. Se que no lo digo mucho, pero debes saber que cada vez que lo digo es porque de verdad lo siento aquí —señalo mi corazón.

—Eres increíble —sonríe alegremente—. No hace falta decir nada, ya me tienes a tus pies desde la primera vez que nos vimos y no pude apartar los ojos de ti. Te quiero —besa mi mejilla con dulzura—. No quiero cortar con el momento, pero, ¿a que se debe tanto cariño el día de hoy? Créeme que me encanta, pero que yo recuerde tengo por novio a un niño caprichoso y gruñón.

—Tú eres el niño aquí. Mi cariño se debe a que te extrañe mucho y no puedo fingirlo —confieso.

—¿No será por qué estabas celoso? —lo miro ofendido.

—¿Celoso? ¿Yo? Quisieras —miento.

—No puedes engañarme a mí, cariño.

—Bien, pero solo un poquito. Es que me sorprendí cuando te vi con él y encima él descarado te comía con la mirada —frunzo el ceño al recordarlo.

—Claro que no, Ni. Connor y yo nos conocemos desde hace tiempo y jamás paso algo entre nosotros —asegura.

—No viste lo mismo que yo. Él realmente se esforzaba en llamar tu atención. Siendo sincero no es feo y tú podrías fijarte en él —susurro.

—No, no me fije. Deje de prestarle atención desde que llegaste. Siempre es así. Cuando estas cerca nada más me importa —dice mirándome a los ojos. Sonrió como idiota.

—Bien, demasiada azúcar por hoy. Vayamos por un helado.

Encontramos una heladería cerca y nos quedamos allí por unos minutos hasta que acabamos nuestros helados. Después caminamos hacia el parque y Shawn se recostó bajo un árbol, yo me recosté en su regazo y vimos el atardecer. No hacían falta las palabras. La compañía del otro era todo lo que necesitábamos.

Por un momento dejamos atrás los problemas, las preocupaciones  y fuimos los adolescentes enamorados que somos. 

No importa que pase en el futuro. En el presente soy feliz con la persona que quiero.