El Amor Va Por Dentro [Terminada]

CAPÍTULO 17

Aunque su estado de ánimo había mejorado bastante, después de haber conversado con Johann en la mañana, Daniela todavía sentía cierta incomodidad cuando llegó a casa. No por María José, sino porque no podía sacarse por completo de la cabeza a esa estúpida pelirroja, y a sus descaradas  y peligrosas pretensiones con su novia.

Sin embargo, sólo hizo falta abrir la puerta para que su malestar comenzara a desaparecer, al ver a María José, con una enorme sonrisa, mientras bajaba corriendo las escaleras para darle la bienvenida.

Después de besarla en los labios al tiempo que la abrazaba, María José, con la mirada brillante, le dije.

-Mi ángel, te tengo una sorpresa. Antes de venir a casa fui a una clínica de fertilidad, me entrevisté con una de las doctoras y traje varios prospectos, para que comencemos a elegir al donante de semen. Una vez que cenemos, podremos verlos, ¿quieres?

Daniela no hubiera podido elegir un recibimiento mejor que ese para olvidarse del mundo y alegrarse como lo hizo. De forma casi instantánea, María José la contagió su entusiasmo, su ilusión; así que emocionada le respondió.

-Por supuesto que sí mi amor.

-¡Posimhaa!... Pero primero a cenar, ¿cierto? Tengo hambre.

María José dio media vuelta para servir; sin embargo, no alcanzó a dar un paso porque Daniela la detuvo, colocando la mano sobre su brazo para atraerla de nuevo hacia ella. La abrazó y le preguntó.

-Siempre logras que yo te ame más que el día anterior. ¿Cómo lo haces? ¿Tienes alguna fórmula secreta o algo parecido?

-Y ahora ¿qué hice?

-¿No lo sabes?, ¿en serio?

-Mmm..., no 

-¿Seguro?

-¡Ah! Ya sé, te refieres a la fórmula. Vale, te la diré; cuadrado de a, más el cuadrado de b, más el cuadrado de c, más el doble de a por b, más el doble de a por c, más el doble de b por c.

Daniela se echó a reír.

-Mi amor, ¿de qué hablas?

-La repasamos hoy en clases; es la fórmula de un trinomio al cuadrado; donde, en este caso; "a, soy yo; "c", eres tú; y "b", el bebé que vamos a tener. Y antes de que me sigas preguntando más fórmulas, te diré algo; "a" tiene hambre, "c" debe comer con "a", para que "a" y "c" decidan quien será "d"...Nota explicativa; "d" es el donante, quien por razones obvias, está fuera  de la fórmula ¿Quedó aclarada tu duda?

-No -dijo Daniela sin parar de reír.

-Dame un besito, a ver si con ello se despeja la incógnita.

Cuando terminaron de cenar, subieron a la habitación. Al entrar Daniela notó que María José había dejado, desperdigados sobre la cama, los prospectos que ya había comenzado a revisar. En seguida, ella los ordenó un poco, para que ambas pudieran sentarse y comenzar a verlos juntas.

Después de haber ojeado unos cuantos, que María José ya había visto y que le entregó para que los revisara, Daniela hizo una pausa y preguntó.

-Mi amor, ¿en verdad estás segura de esto?

-Bueno, aún no; tengo algunos preseleccionados, pero creo que todavía deberíamos revisar un poco más.

-No mi amor, no me refería a eso; quise decir; ¿si de verdad estás segura de que tengamos un hijo ahora? Tal vez estoy siendo egoísta al pretender que asumas conmigo una responsabilidad tan grande como esta; más aún, porque estuviste más de dos años aislada y justo ahora comienzas a retomar tu vida, quizás tus planes eran otros..., no sé, comenzar a salir con tus nuevos amigos de la universidad o algo parecido.