EL JARDINERO

¡El inicio de un deseo! CAP. 1

🚫ADVERTENCIA 🚫🛑
Contenido sexual muy fuerte, violencia,etc, si eres una persona sensible o que no respeta los gustos de otras personas lo mejor es que busques una historia adecuada para ti, esto es totalmente solo ficción y no busco faltarle el respeto a nadie....

-Mamá- grito Lucero por toda la gran casa.

-¿Que necesitas cariño?- dice doña Lucero, su madre.

-Es que te quería pedir permiso para salir con mis amigas- dice Lucero con una gran sonrisa de niña pequeña.

-¡Claro!, Solo no regreses tan tarde-.

Lucero emocionada se despide de su mamá y sale de casa, el chófer pregunta a donde quiere ir, Lucero le responde que irá a casa de su amiga Chantal, ahí se encontraría también con Mariana su otra mejor amiga, las tres eran como hermanas o al menos eso pensaba Lucero.

Llegan a la casa de Chantal, el chófer le abre la puerta del auto, ella se baja y se dirige hasta la entrada para tocar el timbre, Mariana abre la puerta y recibe a Lucero con una sonrisa hipócrita como de costumbre.

-¡Hola! Mar, ¿donde está Chanti?-. Menciona luego de abrazar a Mariana.

-¡Hola mi vida!, Esta arriba, hay casa sola, tenemos muchas cosas que platicar-. Menciona agarrando a Lucero de la mano para llevársela arriba.

-Pero mujer, cada día estás más sexy- menciona Chantal.

-Hay Chanti, son imaginaciones tuyas-
Lucero se sonroja.

-Justo te estábamos esperando, vamos, pon tus pompas duras en ese sofá, tenemos que platicar- Chantal ríe.

-Hay Chantal, no molestes a Lucero-. Dice Mariana con una de sus sonrisas.

-No la estoy molestando, solo digo la verdad- Ríe de nuevo.

-Yo creo que ya te volviste lesbiana- Dice Mariana con sarcasmo.

-Puede que si, te recomiendo que te cuides- habla una vez más Chantal, hasta que Lucero interrumpe con una risa que estaba tratando de retener.

-Hay, lo siento, ya no me río- Lucero sigue riendo un momento hasta que se cubre la boca.

-Pero bueno, tengo que decirles que tendré casa sola por un buen tiempo- Dice Chantal con emoción.

-Esto me huele a sexo salvaje por toda esta casa- Menciona Mariana y ríe.

-Oye, más respeto, aquí hay una virgen- Ambas miran a Lucero, Lucero cruza miradas y se avergüenza.

-Vamos Lucero es enserio, pensé que ya por fin te habías cogido a alguien-
Dice Mariana con una mirada de desgraciada.

-Muy pronto encontraré a alguien- dice Lucero mientras miraba hacia la ventana.

-Tampoco hay urgencia, pero es que ya casi cumplirás 18 años y eres más santa que nosotras dos- Menciona Chantal.

-Oye si, ¡Ya lo sé!, Pero tampoco puedo ir por el mundo preguntándole a todos los hombres si quieren tener sexo conmigo, eso sería venderme- Dice Lucero con cara de enojada.