Yo.

Deseo

Siento como si me ahogara, como si mi mente fuera sacudida constantemente, dónde no hay un orden y solo reina el caos, pero si hay algo que odio aún más son los momentos de silencio en dónde mis pensamientos más asfixiantes salen a flote y me gritan en susurros ideas que mi razón sabe que están mal, pero está esta tan saturada que ya no puede opinar y es ahí cuando mi mente siente que ya no quiere más, ni siquiera sé cómo describir este sentimiento es como si todo significado perdiera su valor, como si todo sueño o idea perdiera su color y como si el mañana se volviera una obligación. 

Amo tanto el silencio que lo comienzo a odiar, hay días en dónde deseo despertar y ver la vida como se supone que la debo de ver, pero no puedo y sinceramente no quiero. Me siento mal por los demás, porque ellos no merecen este pensamiento egoísta que solo marchita a todo aquel que lo conoce por lo que esté veneno será mío hasta que este cuerpo esté tan intoxicado de el que no tenga otra opción más que ceder. 

Busco ayuda, pero no sé qué es lo que espero en verdad, lo que yo quiero va en el lado opuesto de lo que me recomendara un profesional, y si hay algo que quiero que muera primero es esa parte de mí que me impide morir, sé que esta idea a muchos le desagradaría, pero es la verdad, después de todo soy un agresor que vive dentro de su propia víctima. 

Desde que mi intención se convirtió en morir nació una sombra con el fin de proteger ese pensamiento y otra cuyo propósito es estropearlo. Todas viven en mí, pero mi deseo de dejar de existir es más fuerte que cualquier grito aferrado a una vida que no deseo vivir.