Pat abrió la pequeña cajita entre sus manos y miró el reluciente anillo que había comprado para Pran. Pensó en lo feliz que estaban al saber la noticia del bebé, pero aún no se habían comprometido.
-Deberías pedírselo. Estoy seguro que debe estar esperando eso. - dijo Korn a su lado.
-Lo sé. Es solo que no encuentro el momento indicado.
-No sé qué es lo que estás esperando. A este ritmo, tu hijo nacerá, tendrá cinco años y tú aún estarás mirando ese anillo.
-Tampoco exageres. Solo... Tengo que planear todo a la perfección para que Pran lo recuerde por el resto de su vida.
-Entonces por qué no te vistes de payaso y entras rodando por el piso de la habitación. Yo creo que esa sería una buena forma de que lo recuerde por el resto de su vida. - dijo antes de reírse Korn.
-Te odio. Lo sabes, verdad? - dijo Pat sin una pizca de gracia.
-Solo intentó decirte que no le des tantas vueltas, da igual lo que hagas, seguro que a Pran le encantará. - dijo Korn apoyando su mano sobre el hombro de Pat.
Pat suspiró sonoramente cerrando la cajita entre sus manos y caminando a su escritorio para guardarlo dentro de uno de los cajones.
-Venga, ya lo pensarás luego. Ahora tenemos que ir al súper antes de que cierre. - dijo Korn levantándose del sillón.
-Qué teníamos que comprar? - preguntó Pat llegando hasta la terraza donde Pran y Wai estaban charlando.
-Te lo repetí como cinco veces. Por qué no lo anotas? - dijo Pran preocupado de que Pat no recordara todo lo que le había pedido.
Una vez que los dejaron solos Pran y Wai se quedaron hablando de todo un poco, desde el embarazo hasta la boda de Wai.
-Quiero un traje blanco. Korn quería que me lo haga un diseñador, pero con el tema del embarazo creo que sería una perdida de tiempo. Prefiero comprarlo una semana antes. Tú que opinas? - preguntó Wai a un Pran que estaba perdido en sus pensamientos. - Tierra llamando a Pran. Me recibes? Cambio.
-Qué? - dijo Pran al escuchar su nombre.
-Me estabas escuchando?
-Sí.
-No mientas. En qué pensabas?
-En que Pat aún no me pidió matrimonio.
-Pero seguro lo va a hacer.
-Ya sé que lo va a hacer. - dijo seguro Pran.
-Cómo lo sabes?
-Él otro día entré a su oficina y casualmente me encontré con el anillo. - explicó Pran.
-Ya viste el anillo?!
-No. Solo encontré la caja. No quise abrirla porque quiero que sea una sorpresa. Pero no entiendo por qué tarda tanto. Hace una semana que sabe que vamos a ser padres. - puchereó Pran.
-Dale tiempo. Si ya tiene el anillo no creo que tarde mucho más.
-Odio tener que esperar. Y si se lo pido yo?
-Quieres proponerle matrimonio?
-Sí. Si compró el anillo quiere decir que se quiere casar, pero si él no se decide podría hacerlo yo.
-No lo sé. No piensas que Pat podría estar preparando algo para sorprenderte?
-Le doy como mucho una semana más, sino iré a una joyería y le compraré un anillo para pedírselo yo mismo.
Pat y Korn estaban en la fila del supermercado a punto de pagar cuando Korn recibió una llamada de Wai. Pat vio a Korn retirándose un poco para atender la llamada mientras él se quedaba pagando todo lo que llevaban.
-Pasó algo? - preguntó Pat cuando Korn regreso a su lado.
-Primero llevemos esto al auto y allí te cuento. - dijo Korn mientras agarraba algunas bolsas de mercadería para ponerlas dentro del carrito.
Una vez dentro del automóvil Korn se puso serio.
-Y bien. Qué pasó? - dijo Pat poniéndose el cinturón.
-Wai me dijo que Pran solo te dará una semana.
-Una semana para qué?
-Para qué le pidas matrimonio.
-Qué?! - dijo alterado Pat.
-Sí. Wai me dijo eso. O sino... - dijo misteriosamente Korn.
-O sino...?
-No lo sé. - dijo Korn con una sonrisa nerviosa.
-Cómo que no lo sabes? - dijo confundido Pat.
-Es que Wai no me dijo que pasaría. Solo me dijo. "Dile a Pat que como no le pida matrimonio a Pran en menos de una semana, se arrepentirá por el resto de su vida." - explicó Korn recordando lo que le había dicho su omega.
-Esto es malo. Qué pasa si me quiere dejar? Sería capaz de abandonarme e irse con nuestro hijo? - dijo preocupado Pat pensando en diferentes posibilidades donde no acababa junto a Pran.
-No creo que sea eso. Quizás solo me lo dijo porque sabe que Pran se quiere casar. De todas formas dijo que tienes una semana.
-Genial! - dijo Pat irónicamente.
-Oye... Y si Pran tiene una enfermedad terminal y es por eso que solo tienes una semana? - cuestionó Korn.
-No es eso! - dijo enfadado Pat. - Si fuera así me lo habría dicho.
Pat puso en marcha el auto mientras su mente comenzaba a ordenar bien todos sus pensamientos, debía elegir bien cómo le propondría matrimonio a Pran y debía hacerlo rápido o a saber qué haría su omega sino.
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Motel de citas
RomanceEn un mundo donde el dinero manda, y los omegas son comercializados como esclavos para el uso y disfrute de los alfas de clase alta, un joven alfa conocerá a su pareja destinada pero su pareja es un omega marcado por uno de los mafiosos más temido y...