𝐍𝐈𝐆𝐇𝐓𝐌𝐀𝐑𝐄𝐒

Prólogo

Una noche más...

Sólo una noche.

—Mami no quiero dormir aquí —dijo el pequeño estrujando las suaves mantas encima suyo.

La mujer sonrío y acarició a su hijo con el dorso de su mano.

—Te dejaré la lamparita prendida, ¿sí? Mira, es de dinosaurios —intentó animar la mujer.

JungWon sonrío mostrando sus blanquecinos dientes de leche, asintiendo con su cabecita.

—Mami, antes de que te vayas, ¿podrías revisar mi cuarto?

—Claro —pronunció con suavidad comenzando con su labor bajo la tensa mirada de su retoño—. ¿Ya ves? No hay nada JungWonnie, ahora a dormir cariño.

Dejó un casto beso en la cabeza del pequeño, desapareciendo por la puerta segundos más tarde; dejándolo en completa soledad.

Hasta que lo que más temía llegó:

—¿Tienes miedo?

JungWon abrió sus ojitos en grande, de nuevo, nuevamente esa masculina voz causaba estragos en su interior, de nuevo experimentaba los horrores de la noche y lo que ésta trae consigo.

Preso del pánico y adrenalina deslizó sus pies, impulsandose hacia la cabecera de la cama. Sentado, en la penumbra de la noche y con la única luz que tenía cerró sus ojitos.

—Mami —balbuceó.

—Oh mi pequeño JungWon, mami no te salvará esta vez. Porque yo te cuidaré.

12:15 a.m.

Centro médico Asan

Ingreso del paciente: Yang JungWon.

Edad: seis años.

Causalidad: ...